Alberto Contador no descansa.?Iba el pelot¨®n tranquilo, con la fuga ya hecha y consolidada, en una jornada de respiro tras la inmensa batalla de Calar Alto. Pero el Torcal era una tentaci¨®n demasiado golosa para un ciclista rebelde, para la imaginaci¨®n de un campe¨®n que inventa estrategias cuando nadie las espera. No hay descanso, ya descansar¨¢ cuando se retire del ciclismo al t¨¦rmino de esta Vuelta a Espa?a. Su ataque prendi¨® la mecha. Y los posteriores infortunios de Chris Froome en el descenso, dos ca¨ªdas y una aver¨ªa, incendiaron la ¨²ltima parte de la duod¨¦cima etapa. Contador lleg¨® con 22 segundos sobre el grupo de Vincenzo Nibali y con 42" sobre el maillot rojo. Hac¨ªa 7:25 minutos que un polaco residente en Granada,?Tomasz Marczynski, hab¨ªa conquistado su segunda victoria en esta edici¨®n. Otro h¨¦roe del d¨ªa.
La etapa presentaba un bonito encadenado en la segunda mitad: el Le¨®n (17,4 km al 4,9%) y el Torcal (7,6 km al 7%), este ¨²ltimo a s¨®lo 17 kil¨®metros de la meta en Los D¨®lmenes de Antequera. Un cebo para los m¨¢s osados, una trampa en la que s¨®lo picaron dos ciclistas:?Nicolas Roche, dolido por su p¨¦rdida de m¨¢s de cuatro minutos en Calar Alto, y Alberto Contador. Siempre Contador. El irland¨¦s no tuvo piernas para seguir al Pistolero, que no dispara con armas de fogueo. El pinte?o abri¨® un hueco de una veintena de segundos. ?Qui¨¦n quiere pelea? En la cima le esperaba frenado su compa?ero Edward Theuns, que rodaba ocho minutos por delante, en la escapada. Theuns le impuls¨® en el descenso final.
Froome no entr¨® inicialmente en la provocaci¨®n, controlaba la situaci¨®n con sus mejores gregarios. Pero el africano rompe ese perfil de campe¨®n extraterrestre, intocable e invencible. Froome no es Indurain ni Armstrong. Froome es humano. No es la primera vez que le vemos cambiar de bici, o rodar por los suelos. Por verle, hasta le hemos visto correr a pie en el Mont Ventoux. El maillot rojo sufri¨® una primera ca¨ªda, que dej¨® su rueda delantera maltrecha y le oblig¨® a tomar otra montura, y luego volvi¨® a rodar por los suelos. Dos curvas, dos accidentes, dos bicicletas.?Con Contador desatado, ning¨²n gallo se plante¨® ralentizar el ritmo para esperarle. La carrera estaba lanzada. El Sky descolg¨® a Nieve y Poels para escoltar a su l¨ªder y para amortiguar las p¨¦rdidas. La Vuelta hab¨ªa estallado.
La segunda semana de carrera no sonr¨ªe a Froome como la primera. El l¨ªder ha sufrido de lo lindo en Calar Alto, ha tenido que perseguir a la desesperada camino de Antequera... El ataque de Contador y los posteriores sucesos han dejado al maillot rojo con s¨®lo 59 segundos sobre Vincenzo Nibali, que va a m¨¢s en la Vuelta. El Tibur¨®n tambi¨¦n tiene hambre. Contador, por su parte, es noveno a 3:13 del africano, pero ya se encuentra a solo un minuto del podio, que cierra Esteban Chaves. El fin de semana asoman dos etapas de a¨²pa en la Pandera (s¨¢bado) y Sierra Nevada (domingo). ?Qu¨¦ Froome nos encontraremos?
Lo que s¨ª sabemos con seguridad es que por all¨ª volver¨¢n a aparecer los cazaetapas, con el certero Marczynski al frente. El corredor del Lotto ya se ha echado dos victorias a la saca: Sagunto y Antequera. "Si puedo, lo intentar¨¦ tambi¨¦n en Sierra Nevada", dice en perfecto castellano con acento andaluz. Hijo adoptivo de Granada. Muy crecido por su buena punter¨ªa. Justo la que le falta a otros aventureros habituales como Jos¨¦ Joaqu¨ªn Rojas y Pawel Poljanski.