Calmejane gana acalambrado y Froome supera un delicado d¨ªa
El franc¨¦s de 24 a?os, que el a?o pasado conquist¨® una etapa en la Vuelta, venci¨® en solitario. El Sky tuvo que trabajar mucho para controlar una fuga.
Lilian Calmejane se present¨® en sociedad la pasada temporada con una victoria en la Vuelta a Espa?a, en San Andr¨¦s de Teixido, y este s¨¢bado confirm¨® la alternativa en el Tour con un imponente triunfo en la Estaci¨®n de Les Rousses, que tuvo una dosis de emoci¨®n y sufrimiento extra cuando comenz¨® a padecer calambres a cuatro kil¨®metros del final. Francia tiene nuevo h¨¦roe, un corredor con pundonor y entrega, de esos que tanto gustan en el pa¨ªs vecino. Y en cualquier pa¨ªs. Un Virenque, un Voeckler o un Chavanel, por buscar ejemplos recientes. A sus 24 a?os, Calmejane pide paso. A golpe de pedalada. Y rejuvenece un pelot¨®n franc¨¦s en el que ya sobresalen Bardet, Pinot, Barguil, D¨¦mare... Siempre hubo grandes ciclistas franceses, pero no ganan el Tour desde Hinault en 1985. Cada d¨ªa falta algo menos para su reconquista..
La clasificaci¨®n no tuvo cambios relevantes. Ning¨²n gallo atac¨® en la ¨²ltima subida. Ni antes. Pero fue una jornada de mucho desgaste, en la que el Sky de Chris Froome tuvo que trabajar de lo lindo para mantener a raya una numerosa fuga. A 110 kil¨®metros salt¨® la alarma para el maillot amarillo, con un movimiento masivo que situ¨® a una cincuentena de corredores en cabeza, casi un tercio del pelot¨®n. Todos los equipos ten¨ªan representaci¨®n, as¨ª que lo dieron por bueno: Landa y Henao, por el Sky; Roche y Van Avermaet, por el BMC; Felline, del Trek; Amador y Castroviejo, del Movistar; Valgren, del Astana¡ Pero tambi¨¦n hab¨ªa hombres preocupantes para la general, como Latour, Barguil y Frank. Junto a acreditados cazadores de etapa: Bakelants, Pauwels, Gesink, Chavanel, Ulissi¡ Y el emergente Calmejane.
Los equipos rivales dejaron la tostada al Sky, que esta vez no se descompuso como en otras ocasiones. Recuerden la trisca que se mont¨® camino de Formigal en la ¨²ltima Vuelta. La formaci¨®n brit¨¢nica se mantuvo fr¨ªa y organizada, con Landa y Henao en el corte, aunque luego se descolgar¨ªan para ayudar atr¨¢s. La situaci¨®n era delicada, pero logr¨® que la desventaja no superara nunca los cuatro minutos. Y se fue reduciendo sin piedad. Eso s¨ª, con una erosi¨®n extra e inesperada para el Sky. Y con un buen susto cuando Geraint Thomas se cay¨® y Froome se sali¨® en el descenso del Viry.
El desgaste fue enorme durante los 187 kil¨®metros. Ya de salida, la etapa hab¨ªa arrancado a una velocidad endiablada, a un promedio fren¨¦tico de 48 km/h en la primera hora de carrera. Los intentos de escapada se sucedieron, pero ninguno fragu¨®. Los velocistas, en su lucha por el maillot verde, pretend¨ªan llegar sin obst¨¢culos al sprint especial de Montrond, situado en el kil¨®metro 45. Todos menos D¨¦mare, que padec¨ªa problemas f¨ªsicos, se descolg¨® a las primeras de cambio y coquete¨® con el fuera de control.
La general no se vio alterada, pero este domingo puede cobrarse alguna v¨ªctima en la exigente etapa alpina que incluye tres dur¨ªsimas ascensiones: el Biche (10,5 km al 9%), la Grand Colombier (8,5 km al 9,9%) y el Mont du Chat (8,7 km al 10,3%). Se termina en Chamb¨¦ry, a 26 kil¨®metros de la ¨²ltima cima. Dice Froome que ya no teme los descensos, que ya demostr¨® su progresi¨®n el pasado a?o en el Peyresourde. Pero el susto en el Viry puede haberle creado alguna inseguridad, un tembleque en las piernas. Este domingo lo sabremos.