Contador acusa las ca¨ªdas y se deja 48 segundos en la meta

Cara y cruz en el Tinkoff. No existe la felicidad plena. Peter Sagan, tercero el d¨ªa anterior, domin¨® la segunda etapa en Cherburgo, por delante de Julien Alaphilippe y Alejandro Valverde, y es el nuevo maillot amarillo del Tour de Francia 2016. Por detr¨¢s, Alberto Contador no aguant¨® el ritmo de los gallos en el repecho final y cedi¨® 48 segundos. El madrile?o pag¨® las consecuencias de su ca¨ªda del d¨ªa anterior y, para colmo, se vio implicado en otro accidente durante la jornada. Demasiados golpes. En el cuerpo y en el ¨¢nimo.

Normand¨ªa ofreci¨® este domingo al mundo su rostro lluvioso y gris. Ese mal tiempo que lleg¨® incluso a retrasar las fechas del Desembarco en la II Guerra Mundial. En plena oscuridad, con los ciclistas embuchados en sus chubasqueros, cuando a¨²n restaban 123 kil¨®metros para Cherburgo, son¨® el ruido de una montonera. Frenazos y enganchones. En la televisi¨®n se vio a un corredor del Katusha con ligera cojera: ?ngel Vicioso. Y posteriormente una cara seria y resignada: Alberto Contador. El de Pinto hab¨ªa vuelto al asfalto. Y varios corredores cayeron sobre su magullada carrocer¨ªa. Esta vez se da?¨® su lado izquierdo. Los golpes son reincidentes. Y la mala suerte.

Igual que el d¨ªa anterior, el pelot¨®n no se ensa?¨® con los heridos. Y Contador pudo enlazar, despu¨¦s de cambiar de montura. De momento lleva una media de dos bicicletas por d¨ªa. Specialized va a tener que doblar la producci¨®n. Poco despu¨¦s, a 90 kil¨®metros, se vio lucir el sol. Fuera chubasqueros. Dentro sonrisas. Las c¨¢maras enfocaron a los l¨ªderes en distendida charla: Porte con Froome, Purito con Majka, Sagan con Zakarin¡­ Y a un Contador sonriente. Tregua en el pelot¨®n. Esperanzas para el espa?ol.

A esas alturas, la escapada del d¨ªa circulaba a cinco minutos y medio. Paul Voss repet¨ªa experiencia en defensa del maillot de la Monta?a que se enfund¨® el s¨¢bado en Utah Beach. Junto a ¨¦l rodaba un acreditado compa?ero de viaje, un insigne de las nuevas generaciones: Jesper Stuyven, ganador de etapa en la Vuelta a Espa?a 2015 y de la Kuurne-Bruselas-Kuurne 2016. Unos resultados que est¨¢n confirmando lo que ya apuntaba en edad j¨²nior, cuando fue campe¨®n del mundo y gan¨® la Par¨ªs-Roubaix de la categor¨ªa. Vegard Breen y Cesare Benedetti completaban el cuarteto. Un alem¨¢n, un belga, un noruego y un italiano.

Esta segunda etapa terminaba en un repecho de 1,9 kil¨®metros al 6,5%, con picos del 14%. Los velocistas se desentendieron de la caza. Tan s¨®lo el Dimension Data del l¨ªder Cavendish tiraba un poco, m¨¢s por honrar el maillot amarillo que por convicci¨®n. A 50 kil¨®metros, la ventaja del cuarteto segu¨ªa rozando los seis minutos. El BMC, con Van Avermaert como baza del d¨ªa, fue la primera escuadra que tom¨® la iniciativa. Poco a poco se incorporaron el Tinkoff de Sagan, el Orica de Matthews, el Sky, el Astana¡­ Ya estaban todos, pero restaban 20 kil¨®metros y la fuga transitaba a tres minutos. ?Todav¨ªa estaban a tiempo?

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Stuyven dej¨® a sus compa?eros de aventura cuando y como quiso. En un repech¨®n arranc¨® la moto. Juega en otra liga. Pero por detr¨¢s rug¨ªan las ligas mayores. Richie Porte sufr¨ªa una aver¨ªa en el peor momento, a 4 kil¨®metros. Con la carrera lanzada, no se hacen prisioneros. Se dej¨® 1:45 en la meta. El Tinkoff reparti¨® funciones. Kreuziger tiraba de Sagan en la subida final y Kiserlovski se quedaba para cuidar del malherido Contador. Demasiado ritmo para sobrevivir. Sagan remach¨® el trabajo en una meta hecha a su medida, con Alaphilippe y Valverde a su estela. Tres especialistas en este tipo de llegadas que ahora ocupan las tres primeras plazas de la general, por ese mismo orden. Vuelvo a un cl¨¢sico: en la primera semana no se gana el Tour, pero se puede perder. Pregunten a Porte y Contador.