Las primeras pedaladas de Bahamontes en Villarubia
El ganador del Tour de 1959 pas¨® sus a?os de infancia en Villarrubia de Santiago. Aqu¨ª empez¨® a trabajar y a demostrar sus habilidades sobre la bicicleta.
Llegamos a la meta de Villarrubia de Santiago, uno de los lugares que han marcado la vida de Federico Mart¨ªn Bahamontes. En este municipio, ¡°el ?guila de Toledo¡± pas¨® buena parte de su infancia y fue donde comenz¨® a demostrar su habilidad sobre la bicicleta.
El propio Bahamontes cuenta en la llegada su vinculaci¨®n con este pueblo toledano. ¡°En Villarrubia de Santiago pas¨¦ la Guerra y pasamos mucha hambre¡±. Fue aqu¨ª donde el ganador del Tour de 1959 desempe?¨® sus primeros trabajos, en los que ayudaba a su familia. ¡°Mi padre trabajaba rompiendo piedra con un martillo y un se?or y yo le ayud¨¢bamos con un volquete. Con 11 a?os ya estaba trabajando. Mi padre echaba tierra y nosotros ech¨¢bamos piedra con la pala al volquete¡±.
En los ratos libres, Bahamontes aprovechaba para correr en bicicleta. Mariano Monz¨®n fue compa?ero del campe¨®n toledano durante su juventud. ¡°Corr¨ª con ¨¦l una vez. Era muy bueno. Hab¨ªa una prueba que sal¨ªa desde Toledo hacia Madrid para luego volver. Cuando volvimos, ¨¦l ya estaba dirigiendo la carrera. Desde entonces sab¨ªamos que era un figura sobre la bicicleta¡±, cuenta Mariano.
Otro compa?ero de aventuras de Bahamontes en sus inicios como ciclista fue Arsenio Santiago: ¡°Corr¨ªa con mucho estilo. Nos escap¨¢bamos subiendo a Oca?a, otras veces ¨ªbamos a La Guardia, y tir¨¢bamos para delante. Entonces, ya demostraba potencial, se desenvolv¨ªa bastante bien en la monta?a¡±. Por aqu¨¦l entonces, nadie presagiaba que ese jovencito se convertir¨ªa a?os despu¨¦s en el primer ganador espa?ol del Tour de Francia. ¡°Ni ¨¦l ni nosotros pens¨¢bamos que llegar¨ªa tan alto como lleg¨®. Entonces era un simple aficionado, como los dem¨¢s. Era un poco mayor que nosotros, y se meti¨® a profesional cuando fue al t¨ªtulo de Barcelona y desde entonces, fue para arriba¡±, relata Arsenio.
En la l¨ªnea de llegada, Bahamontes se reencuentra con Mariano y con Arsenio. Mientras supervisa que todo lo relacionado con la carrera est¨¦ en orden, aprovecha para saludarles, hablar con ellos e incluso posa para una foto delante de la c¨¢mara. Qui¨¦n sabe si en la Vuelta a Toledo saldr¨¢ un joven ciclista que nos d¨¦ alegr¨ªas en el futuro. Mientras, Mariano y Arsenio s¨ª pueden contar que ellos rodaron en bicicleta con otro joven llamado Federico Mart¨ªn Bahamontes. A?os m¨¢s tarde, su compa?ero de aventuras se convertir¨ªa en el primer vencedor espa?ol en el Tour de Francia.