Armstrong: "Un d¨ªa le dije a mi hijo: 'no me defiendas m¨¢s"
La segunda y ¨²ltima parte de la entrevista de Oprah Winfrey a Lance Armstrong tuvo un enfoque m¨¢s personal. Una vez admitido el dopaje, vienen las consecuencias.

Esta semana, todos los art¨ªculos que se han escrito sobre usted comienzan con la palabra 'deshonra'.?
Es terrible.
?Se siente deshonrado?
Claro. Pero tambi¨¦n humillado y avergonzado. S¨ª, no es nada agradable.
(En octubre de 2012, la Agencia Antidopaje de Estados Unidos, USADA, despoj¨® a Armstrong de sus siete victorias en el Tour y le castig¨® a no poder competir de por vida. Despu¨¦s vino el batacazo. Durante a?os, los patrocinadores se hab¨ªan aliado con el chico de oro. Nike, Anheuser-Busch, Oakley, Trek Patrocinadores que le hicieron amasar decenas de millones de d¨®lares rompieron los contratos).
?Qu¨¦ momento de humillaci¨®n hizo que se enfrentara a s¨ª mismo?
Creo que era mi¨¦rcoles. Me llam¨® Nike. Y no fue el momento m¨¢s humillante. Ahora voy a eso. Resumiendo me dijeron que, obviamente, se largaban. Y despu¨¦s comenc¨¦ a recibir llamadas de Trek, Giro
?El mismo d¨ªa? ?En un par de d¨ªas?
En un par de d¨ªas. Todo el mundo se larg¨® y aun as¨ª no fue el momento m¨¢s humillante. No fue una ¨¦poca nada divertida.
?C¨®mo le afect¨®?
En el fondo, sab¨ªa que un d¨ªa esto pasar¨ªa. La historia se nos estaba yendo de las manos y esa era mi peor pesadilla. En mi mente siempre ten¨ªa la idea de que todos nos abandonar¨ªan. Quien nunca pens¨¦ que lo har¨ªa es la Fundaci¨®n.
(Cuando s¨®lo ten¨ªa 25 a?os, Armstrong fue diagnosticado de un c¨¢ncer de test¨ªculo en estadio 3. Los m¨¦dicos le dieron menos de un 50% de posibilidades de sobrevivir. A los pocos meses, Armstrong fund¨® Livestrong con el fin de concienciar sobre el c¨¢ncer y apoyar a los supervivientes. Tres a?os despu¨¦s de superarlo gan¨® su primer Tour de Francia. Livestrong pas¨® a ser una de las organizaciones m¨¢s conocidas del pa¨ªs. Armstrong se uni¨® a Nike para presentar las m¨ªticas pulseras Livestrong. Fue una apuesta genial y las ventas se extendieron como la p¨®lvora. A d¨ªa de hoy, se han vendido 80 millones. Algunos critican a Livestrong por haber gastado mucho dinero en relaciones p¨²blicas y no el suficiente en investigaci¨®n para el c¨¢ncer. Otros afirman que Lance lo utiliz¨® para desviar cualquier cr¨ªtica sobre su persona. Livestrong ha recaudado 500 millones de d¨®lares para la lucha contra el c¨¢ncer. En octubre, dej¨® la presidencia pero permaneci¨® en la junta. En noviembre rompi¨® toda relaci¨®n).
Y este fue el momento m¨¢s humillante. Recibir esas dos llamadas. Primero, dejar el cargo de presidente pero seguir en la junta y continuar implicado. Pero no fue suficiente para nuestros seguidores. Al cabo de una semana me dijeron: 'Necesitamos que te desvincules'.
Ya no s¨®lo dejar el cargo, desvincularse.
Fue: 'Necesitar¨ªamos que consideraras la posibilidad de desvincularte'. Y tuve que pensarlo mucho. Y eso que ninguno de mis hijos me dijo: 'Pap¨¢, est¨¢s fuera'. Tampoco mis amigos dijeron: 'Lance, est¨¢s fuera'. La fundaci¨®n era como mi sexto hijo. Y tomar esa decisi¨®n fue Dif¨ªcil.
Ya la hab¨ªan tomado por usted.
No dir¨ªa que me forzaron a irme, me lo sugirieron. Era consciente de la presi¨®n. Y s¨ª, era lo mejor para la asociaci¨®n. Pero me doli¨® much¨ªsimo.
De todo este batacazo, ?ha sido eso lo m¨¢s duro?
El golpe m¨¢s bajo.
?Puede Livestrong sobrevivir sin su historia?
S¨ª, eso espero. Desde luego.
Su historia trascendi¨® m¨¢s all¨¢ del deporte y dio esperanza a millones de personas que luchaban contra el c¨¢ncer. Tengo este e-mail que me envi¨® una amiga al saber que le iba a entrevistar: "He o¨ªdo que es un verdadero gilipollas, pero siempre le defender¨¦. Me dio esperanzas en momentos muy dif¨ªciles. A mi primer hijo le diagnosticaron leucemia dos semanas antes de que cumpliera un a?o y yo estaba en cuidados intensivos, sin apenas poder moverme, cuando mi hermano me regal¨® el libro de Lance 'Mi vuelta a la vida'. Esa noche lo le¨ª de principio a fin y me ense?¨® que mi hijo no s¨®lo ten¨ªa esperanzas de sobrevivir sino tambi¨¦n de crecer sano. Aquella noche decid¨ª c¨®mo deb¨ªa enfrentar la enfermedad de mi hijo y c¨®mo deb¨ªa enfrentarse al mundo.
Mi oraci¨®n para Lance, cuando se enfrenta a los demonios, es que se acuerde de que 'Its not about the bike' ('No s¨®lo se trata de ciclismo', otro libro de Armstrong).
S¨¦ de quien habla. Am¨¦n.
Am¨¦n. ?Se enfrenta a sus demonios?
Totalmente. S¨ª. Es un proceso. Y ahora estoy al inicio.
?Cree que el dopaje contribuy¨® a que sufriera c¨¢ncer?
No, no creo. No soy m¨¦dico, pero ninguno me ha dicho eso nunca ni me lo ha sugerido.
(Le muestran un v¨ªdeo de una confesi¨®n del juicio contra SCA en la que Armstrong reconoce que si da positivo perder¨ªa todos sus contratos con patrocinadores y 'la fe de todos los supervivientes de c¨¢ncer en el mundo. Soy consciente de ello. No es una cuesti¨®n de dinero para m¨ª', dice entonces).
Parece como si lo hubiera profetizado.
S¨ª, es horrible.
?Qu¨¦ piensa?
No me gusta Y ese tipo es Lance Armstrong.
?Qui¨¦n es ese tipo que habla en el v¨ªdeo?
Es un tipo que se sent¨ªa invencible. Le dec¨ªan que era invencible y verdaderamente se lo cre¨ªa. Todav¨ªa est¨¢ ah¨ª. No le voy a enga?ar a usted y al p¨²blico diciendo: 'Estoy en terapia y me encuentro mejor'. Todav¨ªa est¨¢ ah¨ª. ?Necesita ese proceso, est¨¢ comprometido con ¨¦l? S¨ª. Hemos hablado de disculpas y debo un mont¨®n a un mont¨®n de gente. Y las m¨¢s obvias a Frankie (Andreu), Betsy (esposa de Frankie), Greg Lemond, Tyler Hamilton, Floyd Landis, Emma O'Reilly, a todos les debo una disculpa. Y cuando ellos quieran, me disculpar¨¦.
?Y le debe una disculpa a David Walsh, periodista de 'The Sunday Times' que durante trece a?os investig¨® el caso y escribi¨® libros sobre usted?
Lo har¨ªa. Me disculpar¨ªa con ¨¦l. Lo he hecho.
?Qu¨¦ le dice a esta mujer que me escribi¨® el e-mail y a los millones de personas que llevaban la pulsera, a los millones que creyeron en usted?
Les dir¨ªa que entiendo su enfado. Entiendo que se sientan traicionados. Me apoyasteis durante a?os y tuvisteis fe en m¨ª y yo os ment¨ª. Lo siento. Y me comprometo a pasar el tiempo que sea necesario para compensar este da?o. S¨¦ de sobra que no puedo arreglarlo.
Mucha gente cree que concedi¨® esta entrevista porque quiere volver al deporte.
?Me est¨¢ preguntando si quiero volver a competir? S¨ª, claro. Soy un competidor. Es lo que he hecho toda mi vida. Me encanta entrenar, correr, la disciplina. Pero no espero que vuelva a suceder.
?Quiere volver a competir en ciclismo?
(Se r¨ªe) No en el Tour, pero hay un mont¨®n de cosas diferentes que podr¨ªa hacer. Podr¨ªa, pero no puedo. Con esta sanci¨®n, con este castigo Ya s¨¦ que me lo he buscado, pero si tuviera la posibilidad me gustar¨ªa correr la marat¨®n de Chicago cuando tuviera cincuenta a?os. Me encantar¨ªa y no puedo.
?As¨ª que ahora no puede competir en ninguna marat¨®n?
No, ni en los diez kil¨®metros de Austin.
?No puede correr en ning¨²n caso?
Nada que incluya la sanci¨®n. Aunque haya 40.000 corredores, si lo dice el organismo oficial no puedo correr. Me encantar¨ªa tener la posibilidad de volver a competir, pero esa no es la raz¨®n por la que estoy diciendo esto. Francamente, puede que esta no sea la respuesta m¨¢s popular, porque creo que me lo merezco. Quiz¨¢s no ahora, pero si se fija en la situaci¨®n, en la cultura y en el deporte y ves el castigo, volver¨ªa a aquella ¨¦poca y dir¨ªa: 'Vale, te cambio mi historia por una sanci¨®n de seis meses'. Es con lo que han sancionado a la gente (se refiere a los excompa?eros que han colaborado en la investigaci¨®n). A m¨ª me condenaron a muerte y a otros
Quiere decir que no podr¨¢ volver nunca m¨¢s.
No digo que sea injusto, no necesariamente, pero es diferente.
?Cree que tiene lo que se merece? Durante mucho tiempo dijo que la gente estaba organizando una caza de brujas contra usted. ?Cree que este es el momento? Considerando lo grande que era, lo que significaba, cuanta gente confiaba en usted
Me merezco el castigo, pero no estoy seguro de merecer la pena de muerte.
?As¨ª que s¨®lo estaba siendo un chulo arrogante cuando public¨® en Twitter esa foto con todos sus maillots?
S¨ª, ese fue otro fallo.
(S¨®lo unas semanas despu¨¦s de que le fueran retirados los Tours y suspendido de por vida, Armstrong public¨® una foto en Twitter con los siete maillots y escribi¨®: 'De vuelta en Austin, descansando').
?Por qu¨¦? En serio. Tiene a los lobos acechando y tuitea eso. ?Para qu¨¦ hizo eso?
Era para mostrarme m¨¢s desafiante.
M¨¢s desafiante
Y lo que m¨¢s miedo me da es que de hecho pensaba que era una buena idea.
Ah, ?s¨ª?
S¨ª, todo el tiempo.
Cuando algo de estas dimensiones pasa en su vida, ?c¨®mo repercute en el concepto que tiene de s¨ª mismo? ?Ha cambiado el concepto que tiene de s¨ª mismo?
No del todo. Es muy fuerte. Muy complicado. No es algo que pueda hablar con usted, marcharme y decir: 'Todo est¨¢ bien'.
Mencion¨® la terapia hace un minuto. ?Est¨¢ haciendo terapia?
S¨ª. A lo largo de mi vida la he hecho peri¨®dicamente. Soy el tipo de persona que necesita que no sea espor¨¢dicamente. Tiene que ser de manera permanente porque he tenido una vida desordenada. No es excusa. Va a ser un proceso muy largo.
?Tiene remordimientos? ?Hay un verdadero sentimiento de culpabilidad o s¨®lo lamenta que le hayan pillado?
A cualquiera le afecta que le pillen. Yo todav¨ªa estoy empezando y esto va a continuar. Cuando esto salga, el efecto domin¨® Hay gente que todav¨ªa conf¨ªa en m¨ª y van a escuchar algo totalmente diferente. ?Que si tengo remordimientos? Por supuesto. ?Que si los seguir¨¦ teniendo en el futuro? Por supuesto. Estoy pagando un precio muy alto, pero lo merezco.
Cuando algo as¨ª ocurre, uno espera que deje una huella tal que provoque un gran cambio. ?Le ha ocurrido ya?
Mentir¨ªa si dijera que s¨ª. Sigo diciendo que esto es un proceso, que a¨²n tengo mucho que hacer. No va a haber un enorme cambio que indique que todo est¨¢ encaminado.
?Hubo personas de su entorno que sab¨ªan lo que estaba ocurriendo y quer¨ªan que parara con las mentiras y de doparse?
Por supuesto.
?Hay algo que pudieran hacer o decir?
Probablemente no.
Estoy pensando en su mujer, Kristin.
(Armstrong y Kristin se divorciaron tras cinco a?os de matrimonio. Tienen tres hijos: Luke, de 13 a?os, y dos hijas gemelas de 11, Isabella y Grace. Armstrong tiene dos hijos con Anna Hansen, su novia desde hace cinco a?os: Max, de 3, y Olivia, de 2).
Si pudiera mencionar a alguien, ser¨ªa Kristin. Ella es una mujer inteligente. Es muy espiritual. Cree en la honestidad, la integridad. Cree que la verdad te hace libre. Tenemos creencias diferentes en muchas cosas. Tiene una parte religiosa que yo no tengo. Pero no importa. Tenemos tres hijos juntos. Se merecen la honesta verdad. Se merecen un padre que les diga la verdad. A ellos y a la gente. Anna siempre ha querido eso. Entonces no conoc¨ªa esta historia porque no est¨¢bamos juntos.
?Hab¨ªa alguien que conociese toda la verdad? ?Le ha dicho a alguien toda la verdad?
(Risas) S¨ª, s¨ª.
Volvamos a Kristin. Ella sab¨ªa lo que estaba ocurriendo. ?Habl¨® con usted sobre dejarlo?
Bueno, le pregunt¨¦ a Kristin. La vi hace dos d¨ªas en un partido de los ni?os y le pregunt¨¦ que si pod¨ªa hablar de esto si sal¨ªa a la luz. Me dijo que s¨ª. No sent¨ªa curiosidad. Quiz¨¢ no quer¨ªa saberlo. Seguro que lo sab¨ªa, pero no Ya sabe, no necesitaba conocer los detalles. Supongo que la proteg¨ª un poco de aquello. Lo que pasa con ella en lo de mi dopaje y mi regreso es que fue la ¨²nica persona a la que pregunt¨¦ si pod¨ªa hacerlo.
?Si pod¨ªa volver?
S¨ª, si pod¨ªa volver. Pens¨¦ que si iba a hacer esto, era una decisi¨®n importante y necesitaba su bendici¨®n. Ella me dijo: Puedes hacerlo con una condici¨®n, que nunca vuelvas a cruzar esa l¨ªnea.
?La l¨ªnea del dopaje?
S¨ª. Y yo le dije: trato hecho. Y nunca la hubiera traicionado con esto. Era una petici¨®n muy seria. Era un compromiso serio. Ella me hab¨ªa dado su bendici¨®n. Si hubiera dicho que no, que no le gustaba la idea, no lo hubiera hecho. Pero le di mi palabra y la voy a mantener.
Es decir, que ha vuelto y est¨¢ dispuesto a ello. Me dijo al principio que no cre¨ªa que fuera posible ganar siete veces seguidas sin dopaje. Ahora ha vuelto, pero no se va a dopar, no va a hacerse transfusiones de sangre ?y todav¨ªa espera ganar!
S¨ª. Porque pensaba, y todav¨ªa lo pienso, que el deporte es algo limpio. Ha habido un gran cambio. Con el pasaporte biol¨®gico, no pude ser m¨¢s claro.
?Claro! ?As¨ª que pensaba que estaba volviendo al deporte limpio?
Con juego limpio.
?C¨®mo fue para usted quedar tercero? Usted, que adora ganar a cualquier precio.
Esperaba ganar. Siempre lo he esperado. Al final, me dije a m¨ª mismo: ?Sabes? S¨®lo te han ganado dos tipos que eran mejores. Y por eso tenemos estas competiciones. Ya me doy cuenta de que no me pega decir esto. Pero hice todo lo posible durante los entrenamientos, y me dieron una paliza.
Me hablaba de Kristin. Tienen tres hijos en com¨²n. ?Qu¨¦ le dice a Luke? Ha luchado contra esto toda su vida. ?Qu¨¦ le dice? Tiene 13 a?os. Suficientemente mayor para saber lo que est¨¢ sucediendo.
Cr¨¦ame. Saben mucho. Lo oyen por los pasillos. En sus escuelas los compa?eros les apoyan. Cuando pierdes el control con tus hijos es cuando se salen de ese espacio: Instagram, Facebook, Twitter. Llega toda la informaci¨®n.
?Qu¨¦ le cont¨®?
Primero quiero contar lo que pas¨®. Cuando todo empez¨®, ve¨ªa que mi hijo me defend¨ªa diciendo que no era cierto. Y esto me lleva a la pregunta de por qu¨¦ ahora ?Sabe? ?l no puede (se le humedecen los ojos, 17 segundos de silencio tratando de aguantar las l¨¢grimas) Entonces supe que deb¨ªa dec¨ªrselo. Y nunca me pregunt¨®. Nunca me dijo: 'Pap¨¢, ?es cierto?'. Confiaba en m¨ª. Y me enter¨¦ por los pasillos (silencio, se revuelve inquieto).
?Qu¨¦ le dijo?
En aquel momento, nada. Pero supe que ten¨ªa que decirle algo.
?Le oy¨® defenderle?
S¨ª, ante otros cr¨ªos. Respondiendo en Instagram que no es desagradable. Y tuve que ?sabe? Decid¨ª que ten¨ªa que decir algo. Estaba fuera de control. Y luego tuve esa charla con ¨¦l. Fue aqu¨ª, durante las vacaciones.
?Qu¨¦ le dijo?
Le dije, 'hay muchas preguntas sobre tu padre, sobre mi carrera. Si me he dopado o no. Siempre lo negu¨¦ y he sido implacable y desafiante al respecto. Lo hab¨¦is visto. Por eso confiabais en m¨ª. Esto lo vuelve a¨²n peor'. Y tambi¨¦n le dije que quer¨ªa que supiera la verdad. Y luego estaban las ni?as, que tienen 11 a?os. Son gemelas, ya sabe. No dijeron mucho, no mucho: 'Oye, pap¨¢'. Simplemente lo aceptaron. Se lo dije a Luke, le dije (nuevo silencio, de 24 segundos, tratando de no llorar) No vuelvas a defenderme. Nunca
?C¨®mo se lo tom¨®?
Ha actuado de modo maduro y tranquilo en esto. Le dije que si alguien le dec¨ªa algo (contiene las l¨¢grimas)... Si otros cr¨ªos hablan, no me defiendas. Simplemente di que me arrepiento. Y dijo, 'vale'.
?Le dijo algo?
S¨®lo me dijo que me quer¨ªa, que era su padre. Que eso no cambiar¨ªa. Esperaba no s¨¦, supongo que esperaba algo.
?Que le desafiase?
??l?
S¨ª. ?Enfado? ?Decepci¨®n?
Gracias a Dios, se parece m¨¢s a Kristin que a m¨ª.
?Espera que con esta conversaci¨®n, admiti¨¦ndolo, diciendo que desear¨ªa haber actuado de otra forma con la USADA, levantar¨¢n la prohibici¨®n de que compita de por vida?
Ego¨ªstamente, s¨ª. Pero siendo realista, no creo que pase. Tengo que vivir con eso, me tengo que aguantar.
La verdad es que la gente debate, se habla mucho de por qu¨¦ lo hace, y qu¨¦ va a decir y c¨®mo va a decirlo. ?Cu¨¢l era su intenci¨®n, su esperanza sobre el resultado?
Mire, la mayor esperanza, mi intenci¨®n, era lograr el bienestar de mis hijos. Eso era. Los mayores necesitan dejar de vivir con este asunto rondando. No es justo que yo les haya hecho eso. Y lo hice. Tambi¨¦n por los peque?os, que no tienen ni idea, pero la tendr¨¢n. Tienen 2 y 3 a?os. Esta conversaci¨®n estar¨¢ ah¨ª siempre. Todo lo que hacemos hoy, ese est¨²pido tuit con los maillots amarillos tambi¨¦n pervive. As¨ª que tengo que repararlo para cuando crezcan.
El pasado mi¨¦rcoles, Travis Tygart, director de la USADA, declar¨® a '60 Minutes Sport' que alguien en su equipo hab¨ªa ofrecido una donaci¨®n quela USADA no acept¨®. Dijo que era de m¨¢s de 150.000 d¨®lares. ?Intentaba saldar una cuenta?
No es cierto.
?No lo es?
No es cierto.
Y en el informe de m¨¢s de mil p¨¢ginas que publicaron hab¨ªa muchas cosas.
S¨ª. Todo estaba all¨ª. ?Por qu¨¦ no estaba eso? Menuda historia.
?Nadie le represent¨®?
Nadie. No ten¨ªa conocimiento de eso. Pero he preguntado si alguien lo pudiera haber hecho No es cierto.
Es Lance Armstrong, maneja su propio espect¨¢culo. Si alguien hubiera ofrecido 150.000 d¨®lares lo sabr¨ªa.
Creo que incluso dijeron 250.000.
S¨ª.
Bueno, ?sabe? Era un n¨²mero redondo. Pero lo disminuyeron. Es mucho dinero. Yo lo sabr¨ªa.
?Cu¨¢l ha sido el coste econ¨®mico? ?Lo ha perdido todo?
He perdido todos mis ingresos futuros.
?Y emocional?
Puedo ver ese d¨ªa, cuando todos se largaron. Le voy a dar un n¨²mero. Me ha preguntado por el coste. No me gusta pensar en ello. Pero ese fue un d¨ªa no s¨¦. Fue un d¨ªa de 75 millones de d¨®lares.
Desaparecieron de su vida.
Por completo.
Fuera.
Fuera. Y puede que nunca vuelvan.
?Se ha sentido alguna vez en esa condici¨®n en que no quiere ni siquiera salir de la cama?
He estado en un lugar oscuro que no era culpa m¨ªa. En un sitio donde no sab¨ªa si iba a vivir un mes, o seis, un a?o, cinco a?os, diez a?os. Me ha ayudado ahora. O sea, no estoy bien. Pero no es lo peor de mi vida. No puedes comparar esto con un diagn¨®stico, uno avanzado, y posibilidades del 50% o menos. Eso pone un l¨ªmite. Est¨¢ cerrado. Pero soy optimista. Me gusta mirar hacia delante. Esto me oblig¨® a mirar atr¨¢s. Nunca lo hago. Mi madre y yo nos parecemos mucho en esto. Nunca mira atr¨¢s. No hablamos del pasado. Nunca le pregunt¨¦ por mi padre biol¨®gico. Nunca nos sentamos y no entramos en eso. Eso es el ayer. Eso fue el a?o pasado.
?C¨®mo lleva todo esto?
Est¨¢ hundida.
Claro, la gente que le quiere sufre igual que usted o m¨¢s.
Est¨¢ hecha polvo. No es el tipo de persona que llama y te dice, 'Lance, estoy mal'. Pero me llam¨® mi padrastro y me dijo que lo llevaba fatal. Le dije que lo imaginaba. Es una mujer fuerte. Ha superado todos los momentos duros de su vida. Lo sac¨® fuera. Est¨¢bamos haciendo FaceTime con sus nietos y mis hijos Vi a mi madre y pens¨¦ que estaba muy hundida.
Le ha golpeado fuerte.
S¨ª. Hasta que no la vi no me di cuenta de que le ha pasado factura (se le vuelven a humedecer los ojos).
Y hay otros. S¨¦ que habl¨® sobre esto. Toda esa gente. ?Est¨¢ ya en condici¨®n de poder porque antes, claro est¨¢, ese otro no era consciente de lo que hac¨ªa y de c¨®mo afectaba a los dem¨¢s.
No ten¨ªa ni idea.
En ese sentido era un abus¨®n, un psic¨®pata obsesionado consigo mismo. Comportamiento narcisista.
Narcisista. Usted lo ha dicho.
?Est¨¢ ahora en situaci¨®n de llamar a sus viejos amigos, socios, de pedir disculpas? ?Est¨¢ en situaci¨®n de no s¨®lo pedir disculpas, sino de empezar a sentir c¨®mo ha truncado la vida de otras personas? ?Est¨¢ preparado?
S¨ª, s¨ª. (Silencio). No necesito volver a aquel momento en que fallaba, cre¨ªa merecerlo todo, y abusaba de mis privilegios. Vimos esos v¨ªdeos. ?Si uno de mis hijos actuara as¨ª? Me dar¨ªa una apoplejia.
Todos sabemos que cuando eres famoso a la gente le encanta ver el heroico ascenso, y despu¨¦s adoran ver c¨®mo te tambaleas para finalmente caer. ?Volver¨ªa a ascender?
No lo s¨¦. No s¨¦ lo que me espera ah¨ª fuera. Yo me he lanzado pero no s¨¦ lo que va a pasar. Empieza a gustarme esto. Es algo que me hubiera vuelto loco en el pasado. Sin embargo, lo estoy logrando. Aunque tengo que hacerlo mejor. No lo s¨¦. Estoy profundamente arrepentido por lo que hice. Podr¨ªa decirlo mil veces y podr¨ªa no ser suficiente para volver. Me est¨¢ preguntando si puedo volver.
No me interesa tanto su vuelta al mundo deportivo. ?Es un ser humano mejor a causa de lo ocurrido? ?Le ha ayudado todo esto a convertirse en una persona mejor?
Sin ninguna duda. Esto me ha ocurrido dos veces en la vida. Cuando me diagnosticaron. Me convert¨ª en una persona mejor despu¨¦s de aquello. Era una persona m¨¢s inteligente despu¨¦s de aquello. Y entonces perd¨ª el rumbo.
Perdi¨® el rumbo. Por culpa de...
Y esta es la segunda vez. Es f¨¢cil sentarse aqu¨ª y decir que me siento diferente. Que me siento m¨¢s listo, que me siento un hombre mejor. Pero no puedo volver a perder el rumbo. Y s¨®lo yo puedo controlar eso. Y no estoy en condiciones de hacer promesas. Meter¨¦ la pata de vez en cuando. Pero ¨¦se ser¨¢ el mayor reto del resto de mi vida, no meter la pata y no perder de vista lo que tengo que hacer. Lo ten¨ªa todo. Y de repente se me escap¨® de las manos. Las cosas se salieron de madre. As¨ª que es un gran reto.
Es una historia ¨¦pica. ?Cu¨¢l es la moraleja?
No es que tenga una gran respuesta para esto. S¨®lo puedo contemplar lo que hice. Hacer trampas para ganar carreras de bicis. Mentir sobre ello. Intimidar a la gente. Evidentemente, uno no debe hacer estas cosas. Esto es lo que ense?amos a nuestros hijos. De eso se trata. Esa es la parte f¨¢cil. Hay otra moraleja en esta historia. Creo que para m¨ª todo giraba en torno a las competiciones, y acab¨¦ perdido y enredado en todas esas cosas. El peor delito fue traicionar a las personas que me apoyaron y creyeron en m¨ª y a las que ment¨ª.
Gracias por confiar en m¨ª para esto. Ya sabe cu¨¢l espero que sea la moraleja de esta historia. Aquello que Kristin le dijo en 2009, que la verdad le har¨¢ libre.
S¨ª. Todav¨ªa me lo dice. Gracias.