Presi¨®n m¨¢xima sobre la NBA por el esc¨¢ndalo en Phoenix Suns
Crecen las voces que piden que Robert Sarver no siga vinculado a los Suns ni a la NBA de forma definitiva y no solo de forma temporal.
Sigue amplific¨¢ndose el esc¨¢ndalo que rodea a la sanci¨®n que ha recibido Robert Sarver, el propietario de Phoenix Suns, en la NBA. Despu¨¦s de que personalidades con el peso de LeBron James o Chris Paul (precisamente jugador de los Suns pero que tambi¨¦n fue presidente del sindicato de jugadores) se quejaran de que la sanci¨®n es demasiado benevolente (10 millones de d¨®lares y un a?o de suspensi¨®n), ahora las cr¨ªticas llegan desde dentro de la propia organizaci¨®n de los Suns.
Cada vez son m¨¢s las voces que claman porque Sarver sea de un modo u otro apartado definitivamente de la NBA. En 2014, un esc¨¢ndalo de trasfondo racista hizo que Donald Sterling se viera forzado a vender Los Angeles Clippers, gesti¨®n muy aplaudida de un Adam Silver que acababa de ser elevado al cargo de comisionado y que empez¨® con muy buen pie una etapa en la que le ha tocado enfrentarse a muchos retos (el mayor, la pandemia) y en la que sus ideas y su car¨¢cter han sido alabados de forma mayoritaria¡ seguramente hasta ahora. Este asunto Sarver est¨¢ explotando en las manos de la Liga y de un comisionado que sali¨® a dar explicaciones ante la prensa y solamente empeor¨® las cosas. Muchos consideran que la NBA ha rebajado sus est¨¢ndares ¨¦ticos para tratar de manejar con mano blanda este asunto despu¨¦s de la culminaci¨®n de un informe de 36 p¨¢ginas y 12.045 palabras que la firma Watchell, Lipton, Rosen & Katz realiz¨® en nombre de la Liga. En ¨¦l, m¨¢s de 100 personas detallan comportamientos racistas, sexistas y de bullying dentro de Phoenix Suns, realizados o promovidos por Sarver, arrinconado desde que un art¨ªculo de Baxter Holmes en ESPN levantara la liebre sobre la t¨®xica cultura de trabajo en la franquicia de Arizona.
La ¨²ltima persona que se ha sumado a la petici¨®n de mayor firmeza con Sarver es nada menos que Jahm Najafi, vicepresidente y segundo mayor inversor en los Suns por detr¨¢s del propietario. Najafi ha hecho una marca en el suelo para distanciarse de Sarver con una carta abierta a aficionados y jugadores de los Suns en la que pide que el esc¨¢ndalo no se intente capear con una sanci¨®n y que se tomen las medidas m¨¢s dr¨¢sticas (forzar la salida de Sarver): ¡°En buena voluntad no puedo quedarse sentado y dejar que nuestros ni?os y las siguientes generaciones de aficionados crean que estos comportamientos se pueden permitir si eres rico y perteneces a la clase privilegiada. As¨ª que, en virtud de mi compromiso con la lucha por erradicar cualquier forma de racismo, sexismo y otros prejuicios, como vicepresidente de los Suns pido la renuncia de Robert Sarver. No me interesa convertirme en gestor de la franquicia, pero trabajar¨¦ sin descanso para asegurarme que quienes llegan a ella traten a todos sus integrantes con dignidad, profesionalidad y respeto¡±.
Las acusaciones sobre la actitud de Sarver durante casi dos d¨¦cadas son inacabables: el uso de t¨¦rminos racistas al referirse a trabajadores afroamericanos, bullying a empleadas de la franquicia, contacto inapropiado con hombres¡ El informe contiene suficientes detalles escabrosos, y grav¨ªsimos, para que muchos se planteen por qu¨¦ la NBA (y su nudo de fuerza: el resto de propietarios) no quiere actuar con m¨¢s dureza. La actual directora ejecutiva del sindicato de jugadores (NBPA), Tamika Tremaglio, tambi¨¦n se mostr¨® dura con la Liga: ¡°Son acciones y conductas horribles, que tendr¨ªan que tener cabida en nuestro deporte ni en ning¨²n lugar de trabajo. Le he dejado clara mi posici¨®n al comisionado Adam Silver: creo firmemente que el Se?or Sarver no deber¨ªa volver a tener ning¨²n cargo ni posici¨®n ejecutiva dentro de la NBA¡±.
Silver compareci¨® ante los medios y, a diferencia de lo que ha sido norma en ¨¦l durante a?os, estuvo d¨¦bil en sus argumentaciones, inseguro en su forma de comunicar y contradictorio en unos argumentos que trataban de justificar el tipo de sanci¨®n aplicada a Sarver. Un anuncio de la NBA que, en lugar de dar carpetazo a un tema muy complicado, lo ha puesto en el primer plano de la actualidad medi¨¢tica en el deporte estadounidense. M¨¢xima presi¨®n sobre Silver y sobre la Liga, a la espera de si hay nuevos movimientos con respecto a un Robert Sarver totalmente arrinconado por la opini¨®n p¨²blica y por el resto de fuerzas de la NBA m¨¢s all¨¢ de los despachos de los propietarios. Ahora hemos sabido que tambi¨¦n dentro de su propia organizaci¨®n, Phoenix Suns.