Bird: ¡°O me defiende otro o meto 60¡å
Larry Bird, uno de los mayores iconos de la NBA, acaba de cumplir 65 a?os. Estos son los momentos cumbres de uno de los reyes del ¡®trash-talking¡¯.
Larry Bird es uno de los grandes iconos de la NBA. Un jugador maravilloso, generacional, cuyos duelos con Magic Johnson salvaron la competici¨®n y prepararon unos a?os dorados que eclosionaron definitivamente con el ascenso de Michael Jordan. Bird era un alero con un tiro en suspensi¨®n letal pero tambi¨¦n hac¨ªa todo lo dem¨¢s: reboteaba, defend¨ªa y era uno de los mejores pasadores de la historia del baloncesto. Un jugador total. Gan¨® tres anillos con sus Celtics (1981, 1984 y 1986), tres MVP (1984, 1985 y 1986), dos MVP de Finales (1984 y 1986), fue doce veces all star, entr¨® nueve en el Mejor Quinteto, gan¨® el Rookie del A?o (1980), se impuso en tres concursos de triples, firm¨® dos temporadas seguidas (1987 y 1988) con al menos un 50% en tiros de campo, un 40% en triples y un 90% en tiros libres y fue tambi¨¦n, claro, uno de los grandes rostros del inolvidable Dream Team de Barcelona 92.
Bird, cuyo m¨ªtico 33 cuelga en lo m¨¢s alto del Boston Garden, cumpli¨® en diciembre 67 a?os. Este alero irrepetible, que naci¨® el 7 de diciembre de 1956 en West Braden Springs, en el estado de Indiana, fue tambi¨¦n un competidor salvaje¡ y uno de los m¨¢s h¨¢biles a la hora de sacar de quicio o directamente acomplejar a los rivales. Un sabio del baloncesto (ha ganado los premios de MVP como jugador, Entrenador del A?o y Ejecutivo del A?o) que aprovechaba su fuego y su inteligencia para dejar momentos que ya forman parte de su leyenda y de la del trash talking en la NBA. Estos son los m¨¢s c¨¦lebres:
¡°Desde el regazo del entrenador¡±. En 1985, Larry Bird anot¨® 60 puntos contra Atlanta Hawks. Doc Rivers, que era base de aquellos Hawks, cont¨® c¨®mo tuvieron que sufrir el martirio de los puntos de Bird¡ y sus comentarios: ¡°Bird llegaba a la zona y empazaba a anunciar qu¨¦ tiros iba a hacer. Dec¨ªa ¡°a tabla¡±¡ era una tortura para Domiquine Wilkins. Mentalmente pod¨ªa con ¨¦l. Ninguno pod¨ªamos. Nos dec¨ªa ¡°a tablero¡±, o ¡°contra qui¨¦n el pr¨®ximo¡± o ¡°desde d¨®nde quer¨¦is que la meta ahora¡±. Y no fallaba ni una. Pero al final ten¨ªas que reconocer lo bueno que era. El ¨²ltimo tiro fue un triple lejano y dijo antes, mientras cruzaba la pista, ¡°desde el regazo del entrenador¡± (in thre trainer¡¯s lap) por la zona desde la que iba a lanzar. Despu¨¦s dijo ¡°qui¨¦n lo quiere¡±. Y creo que fue Reggie Brown el que intent¨® defenderlo pero lanz¨® uno de sus tiros con mucho arco¡ y lo meti¨®. Reggie choc¨® con ¨¦l y lo mand¨® contra el regazo de nuestro entrenador, s¨ª. As¨ª que todo fue como lo hab¨ªa dicho ¨¦l. Un accidente¡ pero como si hubiera sido el destino. Hab¨ªa jugadores de nuestro banquillo chocando los cinco entre ellos¡ fue algo incre¨ªble. Mike Fratello, el entrenador, tuvo que reunirnos despu¨¦s para decirnos que una cosa era admirar lo que pod¨ªa hacer un jugador como Bird y otra muy distinta celebrarlo en el banquillo¡±.
¡°?Qui¨¦n va a quedar segundo?¡±. Lo cont¨® Michael Cooper y es otro momento absolutamente c¨¦lebre de Bird, que gan¨® las tres primeras ediciones del concurso de triples (1986-88). En la segunda, en 1987 y en Seattle, lleg¨® al vestuario donde estaban el resto de participantes y les pregunt¨® si ya sab¨ªan qui¨¦n iba a quedar segundo. Bird gan¨® el concurso con la chaqueta de entrenamiento de los Celtics puesta y con el dedo elevado al cielo antes de que entrara su ¨²ltimo tiro del ¨²ltimo carro. Despu¨¦s de ¨¦l, y tras el triunfo de Dale Ellis en 1989, lleg¨® Craig Hodges, que gan¨® otros tres seguidos. Cuando a Hodges le preguntaron si ten¨ªa menos m¨¦rito ganar aquel concurso ya sin Larry Bird entre los participantes, ret¨® al alero de los Celtics con un ¡°ya sabe d¨®nde encontrarme¡±. La respuesta de Larry Bird fue ¡°s¨ª, al final del banquillo de los Bulls¡±.
¡°No puedes defenderme¡±. En su a?o rookie (1983-84), Clyde Drexler (despu¨¦s diez veces all-star y campe¨®n de la NBA, uno de los grandes escoltas de la historia) tuvo este encuentro con Bird: ¡°Yo era novato y me toc¨® defenderlo. Me mir¨® y me dijo ¡®no puedes pararme¡¡¯. Yo le dije que ten¨ªa demasiada confianza y me dijo ¡®?Confianza? Pero si eres rookie, no sabes nada todav¨ªa¡¯. Entonces me meti¨® como 10 puntos seguidos. El entrenador tuvo que sentarme y Bird pas¨® al lado de nuestro banquillo ri¨¦ndose de m¨ª¡±.
¡°Vuela, p¨¢jaro¡±. Esta la cont¨® Brad Daugherty, excelente p¨ªvot de los Cavaliers que fue cinco veces all star entre los a?os 80 y los 90: ¡°?l recibi¨® en una esquina y yo sal¨ª corriendo para defenderlo. Cuando iba a tirar, salt¨® todo lo que pude y cuando estaba en el aire me dijo ¡®vuela, p¨¢jaro¡¯. Ca¨ª, lanz¨®, y entr¨® limpia, sin tocar el aro¡±.
¡°Una toma de temperatura¡±. Frank Layden era el entrenador de Utah Jazz cuando Larry Bird comenz¨® a enlazar una canasta tras otra contra los de Salt Lake City. Despu¨¦s de las primeras pas¨® junto al banquillo y dijo ¡°solo es una toma de temperatura (heat check), para que ve¨¢is c¨®mo de caliente estoy¡±. Despu¨¦s le dijo al entrenador rival ¡°oye, Frank, no tienes a nadie en el banquillo que me pueda defender¡±. Y Layden mir¨® a sus suplentes y le contest¨® ¡°no¡±.
Un show para Magic Johnson: La rivalidad Magic-Bird es una de las m¨¢s legendarias de la NBA, una Liga que creci¨® gracias a esos duelos entre Lakers y Celtics y entr¨® en una edad dorada que luego dispar¨® Michael Jordan. Magic, que acab¨® siendo su ¨ªntimo amigo, cuenta c¨®mo le recibi¨® Bird antes de un partido entre ambos que ¨¦l no pudo jugar por una lesi¨®n muscular: ¡°Se acerc¨® a m¨ª y me dijo, ¡®t¨ªo, siento que no juegues. Pero ya que est¨¢s aqu¨ª voy a hacer un buen show para ti. As¨ª que solo si¨¦ntate y disfr¨²talo¡¯. Yo le dije que me dejara en paza, pero despu¨¦s cada vez que met¨ªa una canasta, se giraba y me miraba directamente a m¨ª¡±.
¡°Dec¨ªas que le ibas a patear el culo¡±. Kevin McHale desvel¨® la estrategia de Bird antes de un partido contra Elvin Hayes: ¡°Iba a empezar el partido y justo antes del salto incial, Larry me grita ¡®va, Kevin, dile a Elvin Hyes lo que me acabas de decir¡¯. Yo no le hab¨ªa dicho nada, absolutamente nada. Pero ¨¦l insisti¨® ¡®venga, dile lo que me hab¨ªas dicho, que le vas a patear el culo¡¯. Hayes me miraba fijamente y ya en ese punto no era cosa de negarlo, as¨ª que me limit¨¦ a darle la raz¨®n¡±.
¡°Me voy a llevar la bola¡±. KC Jones, el entrenador de los Celtics en los a?os 80, se acordaba del final de un partido contra los Bullets en Washington: ¡°Larry meti¨® la ¨²ltima canasta pero yo hab¨ªa pedido tiempo muerto. Lleg¨® algo molesto al banquillo y dijo ¡®despu¨¦s del tiempo muerto voy a tirar del mismo sitio y voy la voy a meter otra vez¡¯. Y era porque ya le hab¨ªa dicho a los jugadores de Washington que iba a meter la ¨²ltima canasta y se iba a llevar el bal¨®n¡±.
¡°Hoy voy a ser zurdo¡±. Bill Walton era el m¨ªtico sexto hombre en los Celtics campeones en 1986, uno de los mejores equipos de la historia de la NBA. El gigante rojo vivi¨® en primera persona c¨®mo Bird se motiv¨® para un partido de una forma muy especial: ¡°Al final de una gira de partidos hab¨ªa conseguido todo lo que se hab¨ªa propuesto. No hab¨ªamos perdido en ese viaje, as¨ª que el d¨ªa antes del ¨²ltimo encuentro nos dijo que iba a jugar con la izquierda, como si fuera zurdo. Y que lo iba a hacer por lo menos los tres primeros cuartos. Despu¨¦s de esos tres cuartos, en Portland, llevaba 27 puntos contra el pobre Jerome Kersey¡±. Bird acab¨® con 47 puntos, 14 rebotes y 11 asistencias. Y un 21/34 en tiros de campo. No solo eso: anot¨® la canasta que forz¨® la pr¨®rroga y luego anot¨® el tiro ganador en el tiempo extra.
¡°Dame la bola y aparta¡±. Su excompa?ero ML Carr tambi¨¦n vivi¨® sus m¨¦todos en primera persona: ¡°Nos pregunt¨® si quer¨ªamos ganar el partido. Le dijimos que s¨ª y nos dijo ¡®vale, pues dadme la bola a m¨ª y apartaos de mi camino¡¯¡±.
¡°?Cu¨¢l es el r¨¦cord de anotaci¨®n?¡±. Danny Ainge, ahora presidente y general manager de los Celtics, vivi¨® como compa?ero el h¨¢bito de Bird de motivarse con el r¨¦cord de anotaci¨®n de cada pabell¨®n: ¡°Cuando estaba en un pabell¨®n vend¨¢ndose los tobillos sol¨ªa llamar a alg¨²n trabajador de esa cancha y le preguntaba cu¨¢l era el r¨¦cord de anotaci¨®n en esa pista. Era su forma de plantearse retos¡±.
La c¨¢mara de torturas. Ainge tambi¨¦n cont¨® que ¨¦l y Dennis Johnson (el backcourt titular: escolta y base) sol¨ªan escuchar como Bird les dec¨ªa ¡°dame la bola, que tengo a este t¨ªo en la c¨¢mara de torturas¡±: ¡°Y lo dec¨ªa con el jugador que le defend¨ªa justo ah¨ª, delante de ¨¦l¡±.
¡°Tendr¨¢s otro para defenderme¡¡±. Bird ten¨ªa la costumbre de retar a los entrenadores rivales sobre sus emparejamientos defensivos. ¡°Eh, entrenador. M¨¢s vale que tengas a otro por ah¨ª para defenderme porque voy a matar al que hasta puesto a defenderme ahora¡±.
¡°Voy a meterla en tu cara¡±. Xavier McDaniel, el alero de los Supersonics, sufri¨® la sangre fr¨ªa de Bird en los instantes finales de los partidos: ¡°Est¨¢bamos empatados. Y vino y me dijo que d¨®nde iba a recibir y que iba a anotar en mi cara. Yo le dije que le estar¨ªa esperando. Salimos del tiempo muerto, cort¨® dos veces por la l¨ªnea de fondo y recibi¨® en el poste, en el sitio exacto que me hab¨ªa indicado. Se debuto, gir¨® y la meti¨® en mi cara. Entonces mir¨® el reloj, se gir¨® y me dijo ¡®no contaba con dejar dos segundos de tiempo de juego¡±.
¡°Ya les he castigado bastante¡±. El 18 de febrero de 1985, contra Utah Jazz, Bird llevaba al final del tercer cuarto 30 puntos, 12 rebotes, 10 asistencias y 9 robos de bal¨®n. No jug¨® en todo el ¨²ltimo cuarto (el marcador era 90-66 antes de ese ¨²ltimo parcial) y cuando le preguntaron despu¨¦s por qu¨¦ no hab¨ªa buscado el cu¨¢druple-doble, respondi¨® ¡°?para qu¨¦? Ya les hab¨ªa castigado lo suficiente¡±.
¡°Soy el mejor tirador de la NBA¡±. Como Drexler, Reggie Miller tambi¨¦n tuvo su experiencia como rookie con Bird. El de los Pacers intent¨® distraerle durante una serie de tiros libres y entre los dos lanzamientos (meti¨® ambos) Bird le dijo: ¡°Rookie, soy el puto mejor tirador de la Liga. De toda la Liga, ?entiendes? As¨ª qu¨¦, ?est¨¢s intentando decirme alguna puta cosa?¡±.
¡°Feliz jodida Navidad¡±. En un partido en Navidad, tambi¨¦n contra los Pacers, Bird le dijo a Chuck Person antes del salto inicial que ten¨ªa un regalo para ¨¦l. Despu¨¦s, en un momento en el que Person estaban en el banquillo, Bird lanz¨® un triple delante de ¨¦l y con la bola todav¨ªa en el aire se gir¨® y le dijo ¡°jodida feliz Navidad¡± (Merry fucking Christmas). El tir¨® entr¨® limpio justo despu¨¦s, claro.
¡°?Ben Poquette? ?Est¨¢s de puta broma?¡±. En un partido en Chicago, en 1987, Bird tuvo problemas con las entradas de cortes¨ªa que tendr¨ªa que haber recibido de los Bulls. Antes de jugar, le comunic¨® esta situaci¨®n al entrenador rival, Doug Collins. Y tambi¨¦n le pregunt¨® cu¨¢l era el r¨¦cord de puntos del pabell¨®n porque su intenci¨®n era superarlo. El partido comenz¨® con Ben Poquette, un alero blanco, defendiendo a Bird, al que no le sentaba bien que le colocaran defensores blancos porque le parec¨ªa una falta de respeto. As¨ª que se volvi¨® hacia Collins y le dijo ¡°?Ben Poquette? ?Est¨¢s de puta broma?¡±. Despu¨¦s, anot¨® 33 puntos solo en el primer tiempo y acab¨® el partido con 41.
¡°Ponme un defensor o meto 60¡å. En un duelo contra los Bad Boys de Detroit, Bird anot¨® cuatro canastas seguidas ante Dennis Rodman y le dijo a Chuck Daly, el m¨ªtico entrenador de los Pistons: ¡°?Qui¨¦n me est¨¢ defendiendo, Chuck? ?Hay alguien defendi¨¦ndome? M¨¢s te vale poner a alguien o meter¨¦ 60 puntos¡±. El propio Rodman lo record¨® as¨ª: ¡°Yo estaba pegado a ¨¦l, intentando que ni recibiera y ¨¦l se dedicaba a decirle a sus compa?eros que le pasaran la bola, que estaba solo, que se dieran prisa antes de que el rival se diera cuenta y le cubriera. Y ¨¦l recib¨ªa, me daba un codazo en la mand¨ªbula y anotaba el tiro en mi cara. Y le dec¨ªa a mi entrenador ¡®quita a este t¨ªo y saca a alguien que defienda un poco porque es muy f¨¢cil cuando juego tan liberado¡¯¡±.
¡°?Os dais cuenta?¡±. En un partido en Dallas en 1986, Bird le dijo a todo el banquillo de los Mavericks lo que iba a pasar despu¨¦s de un tiempo muerto: ¡°?Os dais cuenta? Voy a quedarme aqu¨ª, sin moverme. Me pasar¨¢n la bola y lo siguiente que oir¨¦is ser¨¢ el sonido de la bola atravesando la red¡±. Y as¨ª sucedi¨®, exactamente. Bird anot¨® y gui?¨® el ojo al banquillo de los Mavs mientras volv¨ªa hacia el otro lado de la pista para defender.
¡¤
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrar¨¢s todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del d¨ªa, la agenda con la ¨²ltima hora de los eventos deportivos m¨¢s importantes, las im¨¢genes m¨¢s destacadas, la opini¨®n de las mejores firmas de AS, reportajes, v¨ªdeos, y algo de humor de vez en cuando.