Doncic pide hora para una cita con el destino

Luka Doncic tiene 25 a?os y ya es, con esa edad, uno de los mejores jugadores de la historia del baloncesto. Tras ganar el Eurobasket de 2017 con Eslovenia y la Euroliga con el Real Madrid en 2018, puso rumbo a una NBA a la que lleg¨® con vientos de promesa. Y no hace m¨¢s que confirmarlos: el Rookie del A?o en su primera temporada fue s¨®lo la antesala de lo que estaba por venir. Cuatro selecciones consecutivas en el Mejor Quinteto de la mejor Liga del mundo que ser¨¢n cinco cuando se confirme la de este curso, cinco presencias en el All Star y votaciones constantes para el MVP, un premio en el que se ha clasificado en cuarta, sexta, quinta y octava posici¨®n y al que opta ahora dentro de los tres finalistas. El esloveno es un jugador hist¨®rico, generacional. Jugador franquicia de unos Mavericks que han encontrado en ¨¦l a un nuevo mes¨ªas tras la retirada de Dirk Nowitzki, con el que comparti¨® vestuarios un a?o. Y l¨ªder de una nueva generaci¨®n que ha sustituido definitivamente a otra que ya forma parte del pasado. En estos playoffs ya no est¨¢n LeBron James, ni Kevin Durant. Stephen Curry ni siquiera se ha clasificado. El tiempo de la dinast¨ªa de los Warriors y del reinado del Rey ha acabado. Y la eliminaci¨®n de los Clippers confirma todo eso.

El equipo angelino apost¨® por un proyecto arriesgado, muy com¨²n en la NBA actual, uno que junta jugadores que en su d¨ªa fueron estrellas pero se han quedado por el camino y ahora lo ¨²nico que tienen de referentes son sus alt¨ªsimos contratos. Y los tiempos cambian porque son el mismo proyecto que elimin¨® a los Mavericks en 2020 (4-2) y 2021 (4-3), cuando sufrieron m¨¢s de lo que quer¨ªan y optaban a un anillo que nunca lleg¨®. Ahora, la madurez de los texanos es mayor, el proyecto m¨¢s s¨®lido y, sobre todo, Doncic es un mejor jugador. Uno de los mejores, en algunos tramos el mejor, de la competici¨®n norteamericana, del mundo entero con permiso de otro balc¨¢nico, Nikola Jokic. Y que ahora, unos a?os despu¨¦s de lo que se ha considerado un breve periodo de iniciaci¨®n previo al salto definitivo de un equipo que ya no quiere esperar m¨¢s. En la era de los jugadores empoderados m¨¢s vale darse prisa para que la estrella escogida no agote su paciencia. Y el momento ha llegado: los Mavs est¨¢n en semifinales de Conferencia un a?o despu¨¦s de ni siquiera clasificarse para los playoffs. Y los Thunder les esperan frot¨¢ndose las manos. Un duelo entre una entidad que deber¨ªa haber aprendido del pasado y otra llena de ganas y precocidad. Una eliminatoria en la cumbre.

Los Mavs han ganado porque han sido mejores. Han cerrado en seis partidos una serie que podr¨ªa haberse acabado antes, pero que ha tenido contrastes y dosis de talento a partes iguales. En la que Kawhi Leonard ha hecho un breve acto de presencia en dos partidos consecutivos, ambos perdidos con los Clippers, antes de hacer gala de su consabido hermetismo y que Tyronn Lue decidiera que no contaba m¨¢s con ¨¦l porque su estado f¨ªsico era ¨ªnfimo y ralentizaba un juego ya de por s¨ª lento y tedioso. En la que Kyrie Irving demuestra que es el ¨²nico hombre del pasado que sigue siendo ¨²til en el presente, con un talento inigualable y un papel en las segundas mitades esencial para todas y cada una de las victorias, y para so?ar con ganar cuando han perdido. Su balance en partidos para cerrar una serie de playoffs aumenta ya hasta el 13-0 y hace tiempo que va caminando entre sombras, saliendo a la luz de cuando en cuando para demostrar que tiene m¨¢s calidad en la u?a del dedo me?ique de su pie izquierdo que la que tiene el resto de la NBA junta. Y en la que Doncic se reivindica como el jugador del momento en unos playoffs en los que los Mavs tienen, necesitan, igualar al menos esas finales de Conferencia de 2022 que parecen muy lejanas, no por tiempo pero s¨ª por sensaciones.

Un partido t¨ªpico de cierre

El sexto asalto fue como ten¨ªa que ser: los Mavs salieron fuertes, permitieron que los Clippers se metieran en el partido un par de veces por las dudas t¨ªpicas que suponen este tipo de encuentros y aceleraron en la segunda mitad. El ¨²nico momento preocupante fue antes del descanso, cuando pasaron de un 46-33 a un 50-52, un 4-19 de parcial que fue el ¨²nico momento en el que los visitantes parecieron tener opciones. Y eso que lo intentaron: James Harden, que no ha tenido la culpa de la derrota, se fue a 16 puntos, 7 rebotes y 13 asistencias. Norman Powell a 20 tantos desde el banquillo, Terance Mann a 14, Ivica Zubac a 17 y 11 (4 ofensivos) y Paul George, al retratamiento. De hecho, es la estrella que peor acaba por reputaci¨®n a pesar de su 18+11+5, debido a su 2 de 10 en triples y al nivel generalizado mostrado por un jugador ins¨ªpido en estas ocasiones, que tiene un techo tan alto como un suelo baj¨ªsimo. Casi en el s¨®tano de un fracaso que se repite una y otra vez. Un hombre con un talento inigualable que se ha quedado en nada.

Tyronn Lue, que ya ha sonado para los Lakers tras el despido de Darvin Ham a pesar de tener un a?o m¨¢s garantizado con los Clippers, apost¨® por PJ Tucker y sus 38 a?os de inicio, pero el pasado es el pasado y esta plantilla es eso, una composici¨®n de jugadores de ayer que s¨®lo mira al futuro en los despachos, con la mudanza a Inglewood para escapar de la alargada sombra de sus compa?eros de ciudad, los de p¨²rpura y oro. En esas est¨¢ Steve Ballmer, cofundador de Microsoft, el hombre que sustituy¨® como propietario al taca?o Donald Sterling. En lo deportivo, poco m¨¢s se puede hacer: tienen casi 172 millones de d¨®lares comprometidos para el curso que viene, Kawhi tiene casi 200 hasta 2028 y George una posible player option de m¨¢s de 48 para la temporada que viene a la que ya veremos si se acoge. Poca cosa y muchos problemas, entre los que figura un Russell Westbrook que ya dej¨® de cobrar montones de dinero y ahora es un jugador de rol, sin que nadie sepa cu¨¢l es exactamente su rol: sus 6 puntos en el sexto partido supieron a poco, al igual que su papel en una serie en la que ha sido m¨¢s protagonista por sus aspavientos y la expulsi¨®n en el tercer encuentro que por otra cosa.

Los Mavs son la otra cara de la moneda. La transgresi¨®n, el cambio. Lo que parec¨ªa no funcionar finalmente lo ha hecho y la salida de Jalen Brunson, una estrella brutal ahora en los Knicks y un jugador del que muchos se acuerdan, ha sido suplida por Kyrie cuando la sensaci¨®n es que era imposible. El espectacular base, adaptado perfectamente a Doncic y su tiempo de bote, se ha ido a 30 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias con 11 de 19 en tiros de campo y 5 de 9 en triples que permiti¨® escaparse a los texanos hasta los 15 puntos al final del tercer cuarto (87-72) tras un parcial de 35-20 que defini¨® las cosas. Un 3+1 suyo en el ¨²ltimo periodo llev¨® el partido a un 106-82 que fue tambi¨¦n la m¨¢xima del encuentro y que provoc¨® el ¡°bang¡± de Mike Breen, el narrador de la TNT y responsable de contar gestas incre¨ªbles, como la de ese triple que meti¨® ante Stephen Curry para amarrar el sue?o prometido de LeBron James para los Cavaliers en 2016. Un jugador hist¨®ricamente bueno. Un aut¨¦ntico genio.

Y luego est¨¢ Doncic, claro. Los Mavs fueron mucho hacia dentro con Daniel Gafford (13 puntos y un mate brutal sobre Zubac) y Dereck Lively (10, 9 rebotes y 3 asistencias desde el banquillo), pero todo fluy¨® porque el esloveno se hart¨® de producir. Asistencias a mansalva, hacia dentro cuando hac¨ªa falta y una toma de decisiones que demuestra una sabidur¨ªa en crecimiento y s¨®lo ensombrecido por el 1 de 10 en triples, una variable negativa en un mal d¨ªa en el tiro, pero bien rectificada al dar paso a Irving y no cebarse en el lanzamiento. Al final, 28 puntos, 7 rebotes y 13 asistencias que dejaron en nada las 5 p¨¦rdidas y las 5 faltas personales. Y la seguridad de que, en caso de dificultad, tiene a un Irving que da el paso adelante y que se ha ido a m¨¢s de 20 puntos de media en las segundas mitades. Ahora, esperan los j¨®venes Thunder, liderados por otro candidato al MVP, Shai Gilgeous-Alexander. Un duelo brutal y estupendo, que pilla a los de Oklahoma descansados (4-0 a los Pelicans), pero sin necesitar eso. Al fin y al cabo, parece que nunca se cansan. Contra eso y mucho m¨¢s tendr¨¢ que luchar Luka Doncic, el hombre del momento. Uno que ha pedido hora para una cita con el destino. El suyo.

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