Un Valencia coral suma otro triunfo y se instala en la zona alta
Dubljevic regres¨® por sus fueros y volvi¨® a ser dominantes debajo del aro despu¨¦s de bastante tiempo.
El Valencia Basket ha puesto velocidad de crucero en la Liga Endesa. Otro triunfo m¨¢s ante Unicaja (90-75) le deja mano a mano con el Joventut, en pugna por la tercera plaza de la liga regular, su lugar natural en el campeonato. Lo mejor es que fue una victoria coral, sin ning¨²n jugador que sobresaliera sobre el resto, pero con varios de ellos firmando un notable alto.
Llam¨® la atenci¨®n el regreso de Dubljevic a su nivel habitual despu¨¦s de varios partidos en el que se hab¨ªa mostrado muy gris. 13 puntos, 8 rebotes y la sensaci¨®n de que vuelve a ser dominante en la pintura. En realidad fue ah¨ª donde se fragu¨® la victoria ante Unicaja. Los n¨²meros de Rivero (13+4) y Pradilla (11+4) as¨ª lo atestiguan. En el per¨ªmetro, Hermannsson y L¨®pez-Arostegui siguen manteniendo el tipo ante el carrusel de lesiones, y Ferrando volvi¨® a demostrar que va a ser muy ¨²til en la rotaci¨®n.
En el Unicaja, no fueron suficientes ni para pelear el partido los 16 puntos y 5 asistencias de Brizuela. Da la sensaci¨®n de que los de Ibon Navarro no acaban de engrasar el bloque a pesar de que son un pu?ado de buenos jugadores. Los playoffs ya se le quedan a una brecha de tres partidos, con ocho por jugar, una distancia que le ponen el objetivo m¨¢s que complicado
Poco m¨¢s de 40 horas despu¨¦s de vencer al Tenerife en un duelo extenuante, el Valencia Basket volv¨ªa a La Fontea para roer otro hueso duro en su tercer partido seguido en cinco d¨ªas. El Unicaja entr¨® m¨¢s entonado al partido, el Valencia empez¨® muy fr¨ªo, concediendo demasiadas segundas opciones a los cajistas. Brizuela campaba a sus anchas por el per¨ªmetro. Un parcial de 0-8, con dos triples de Brizuela y Abromaitis, abri¨® la primera brecha (6-13). Claver sali¨® al rescate con dos triples y dos libres pero Carlos Su¨¢rez, bien abierto, devolvi¨® los dos lanzamientos desde el 6,75.
Este Valencia acostumbra a intercalar momentos de lucidez absoluta en el que desarbola a su rival con otros en los que se le nublan las ideas. Y el inicio del segundo cuarto fue uno de los primeros. En un abrir y cerrar de ojos, una canasta de Rivero con adicional que no aprovech¨® y dos triples de L¨®pez-Arostegui y Dubljevic le dieron la vuelta al marcador (27-25, min. 11). El plan del Valencia era buscar siempre a sus hombres interiores, tratar de darles la bola en ventaja. As¨ª, Dubi y Rivero hac¨ªan da?o dentro. Tambi¨¦n Pradilla, poco despu¨¦s, con su movilidad, pon¨ªa la m¨¢xima ventaja local hasta entonces (39-35, min. 18). Unicaja estaba m¨¢s inc¨®modo que en el primer acto. Aun as¨ª, segu¨ªa dando guerra con un Barreiro que aparec¨ªa por lugares donde no se le esperaba. Una canasta de Hermannsson, en penetraci¨®n, lo dejaba 41-40, al descanso.
El Valencia sali¨® del vestuario con la misma idea pero con una vuelta de tuerca m¨¢s en defensa, punteando siempre la l¨ªnea de pase de los cajistas. As¨ª, entre Dubi y Rivero se marcaron de inicio un parcial de 9-3 que dio las primeras ventajas serias a los taronjas. El Unicaja, al contrario, encontraba las v¨ªas hacia al aro desde el per¨ªmetro. Dos triples de Abromaitis y Brizuela fueron contestados con otros dos de Hermannsson y Arostegui. El Valencia empezaba a estar muy s¨®lido, a pesar de que Unicaja segu¨ªa encontrando bolas extra a trav¨¦s del rebote ofensivo (10). Dos libres de Labeyrie pusieron la m¨¢xima (65-55) a falta de 33 segundos. Pero Bouteille, de tres, lo dej¨® en 65-58.
Al Unicaja le quedaban diez minutos para darlo todo e Ibon Navarrro sac¨® a Bouteille para cambiar el ritmo. Y el Valencia tard¨® en detectar al galo que mientras, iba anotando. Una canasta de Oliver volvi¨® a poner al Unicaja muy dentro del partido (70-66, min. 33). Pero justo ah¨ª se le acab¨® la gasolina a los malague?os. Un triple de Hermannsson sobre la bocina de posesi¨®n fue el primer golpe duro para los de Navarro (79-68, min. 35). Otro m¨¢s, tambi¨¦n con el reloj a cero, de Ferrando, acab¨® de minar la moral de los cajistas. Una antideportiva de Barreiro a Rivero fue la constataci¨®n de ello. Un triple de Dubi (88-71), a falta de minuto y medio, fue la puntilla.