Porzingis se da un homenaje

Hay noches en la que no hay manera. Y seguramente no hay m¨¢s an¨¢lisis del horrible partido de los Mavericks en Washington (135-103 final) contra unos Wizards que acaban de ser eliminados de la pelea por el play-in, que fueron a menos despu¨¦s de brillante inicio de temporada y que est¨¢n acabando el curso con Bradley Beal y Kyle Kuzma lesionados. No era el d¨ªa ni el rival: los Wizards sumaron 120 puntos en Dallas y 135 esta vez, y han ganado los dos partidos del curso a los Mavs. El segundo, claro, con Kristaps Porzingis en pista.

Era el morbo de la noche. El reencuentro. El aireado asunto de los revenge games en la NBA, la oportunidad de ajustar algunas cuentas con quien dej¨® de contar contigo, con los que prefirieron hacer negocios (deportivos y econ¨®micos) con tu contrato. As¨ª son las cosas. Y por eso Kentavious Caldwell-Pope, campe¨®n con los Lakers en 2020, dej¨® claro despu¨¦s de jugar su mejor partido de la temporada (35 puntos, 6/11 en triples) que, para ellos, era importante ganar: ¡°Le dijimos a Kristaps que ellos le hab¨ªan dejado ir y ahora les ¨ªbamos a machacar por ¨¦l¡±. En el lado contrario, regresaba a Washington la principal pieza de intercambio por KP, un Spencer Dinwiddie que no sali¨® demasiado bien de la capital: ¡°Les dije a mis compa?eros no nos iba a ganar aqu¨ª¡±, dijo KCP.

Porzingis, por su parte, fue elegante aunque s¨ª dej¨® claro que est¨¢ donde quiere estar: ¡°Ha sido divertido jugar contra mi exequipo. Ahora estoy aqu¨ª y soy feliz, todo el mundo me apoya. La mayor equivocaci¨®n que se comete cuando se habla de mi tiempo en los Mavs es que no me llevaba bien con Doncic fuera de la pista. No hay ning¨²n problema entre nosotros, es un t¨ªo guay y es dif¨ªcil no llevarse bien con ¨¦l. Simplemente, a veces las cosas no salen como se espera. Para m¨ª fue genial jugar con un talento generacional, pero ya es pasado. Ahora estoy feliz de estar aqu¨ª en Washington. Echo de menos a mucha gente de Dallas pero no fue como esper¨¢bamos. Son cosas que pasan, pero todo el mundo all¨ª me trat¨® bien".

Los Mavericks juagban su tercer partido en cuatro noches, y tienen ma?ana partido temprano en Milwaukee, en casa del campe¨®n. Era l¨®gico esperar cierta fatiga, f¨ªsica y mental¡­ pero no un nivel tan pobre contra un rival motivado pero inferior. Porzingis empez¨® arrollando y acab¨® con 24 puntos, 9 rebotes y 4 asistencias. Rui Hachimura sum¨® 21 puntos, 5 rebotes y 4 asistencias, y Avdija 14+4+3. Los Wizards anotaron el 54% de sus tiros, el 51% de sus triples (17/33) y el 90% de sus tiros libres. Los Mavericks se quedaron en un 28% en triples (11/38), un dato fatal porque no tuvieron piernas para atacar el aro con continuidad, y dieron 14 asistencias por 13 p¨¦rdidas. Un nivel baj¨ªsimo que solo salvaron Jalen Brunson (21 puntos) y, claro, Luka Doncic: 36, 7 rebotes y 6 asistencias. Eso s¨ª, cinco p¨¦rdidas y un -22 en sus 36 minutos.

No era el d¨ªa y no lo fue desde un primer cuarto en el que los Wizards anotaron 41 puntos (41-20). En el tercer cuarto la ventaja lleg¨® a 26 puntos (88-62) y no hubo remontada ¨¦pica visitante, solo un conato de reacci¨®n que dej¨® en el limbo un par de tiros importantes con la ventaja en -13 (91-78). La derrota, as¨ª est¨¢n las cosas de apretadas, es importante: ahora los Mavs vuelven a ser cuartos, y vuelven por la tanto al lado del cuadro de Phoenix Suns (te¨®rico rival en segunda ronda), el ogro que todos quieren evitar. Hoy juegan Warriors (terceros otra vez) y Jazz, quintos a un partido y medio de los Mavericks. Esta derrota no es obviamente dram¨¢tica¡­ pero puede ser recordada en unos d¨ªas, cuando acabe la regular season.

No solo eso: hay s¨ªntomas poco halag¨¹e?os. Sobre todo en un declive defensivo que ha sido evidente en las ¨²ltimas semanas despu¨¦s de un nivel extraordinario y seguramente insostenible, sobre todo en el mes de febrero. En siete de los ¨²ltimos diez partidos, el rival de los Mavs ha anotado al menos 110 puntos. En las dos ¨²ltimas semanas, el equipo de Jason Kidd (expulsado en este partido) tiene la 19? defensa de la NBA. Parece que los rivales meten tiros que antes fallaban, y a veces es tan sencillo como eso. Pero tambi¨¦n puede estar influyendo el cansancio de un equipo de rotaci¨®n corta y con un esquema defensivo de una enorme exigencia. Veremos, porque ma?ana en horario de tarde espa?ola (19:00) los Mavericks visitan al campe¨®n, Milwaukee Bucks. Doncic vs Antetokounmpo. La ocasi¨®n de borrar el mal sabor de boca de un plumazo¡­ o de abrir ciertos debates peligrosos a unos d¨ªas de los playoffs. Ma?ana sabremos porque el ritmo no para en la NBA.