La NBA se olvida de John Wall
No hay ofertas por el base, el segundo jugador mejor pagado de toda la Liga, que seguir¨¢ fuera de las pistas seguramente por todo lo que queda de curso. Una situaci¨®n muy fea.


La mitad de los ¨²ltimos doce jugadores elegidos (desde 2010) con el preciad¨ªsimo n¨²mero 1 del draft de la NBA no est¨¢ en las canchas en este inicio de temporada 2020-21. Hay asuntos delicados con los problemas f¨ªsicos (Markelle Fultz, Zion Williamson), con cuestiones sociales (Kyrie Irving), con asuntos contractuales (Ben Simmons). Hay un caso de chasco deportivo tan grande que ni siquiera dur¨® en la gran Liga (Anthony Bennett), algo que en un perfil m¨¢s bajo de lo previsto, mucho m¨¢s, s¨ª ha hecho Andrew Wiggins. El sexto es John Wall, que marca esa barrera con el pick 1 de 2010, una sensaci¨®n universitaria en Raleigh que pas¨® luego un a?o en Kentucky y sali¨® propulsado a la NBA, por delante de un buen pu?ado de jugadores a los que tampoco les fue bien: Evan Turner, Derrick Favors (otro que, al menos, ha hecho una carrera larga en la NBA, Wesley Johnson, ese DeMarcus Cousins que pas¨® de 100 a 0 y al que nadie ha firmado en este curso, Ekpe Udoh, Greg Monroe, Al-Farouq Aminu¡ lo mejor llega en los puestos 9 y 10: Gordon Hayward y Paul George.
Wall sigue siendo jugador de Houston Rockets, pero el gran p¨²blico se ha olvidado totalmente de ¨¦l. Antes de esta temporada, acord¨® con la franquicia texana que no jugar¨ªa en espera de un traspaso que a ¨¦l le permitiera ir a un destino de m¨¢s aspiraciones y a los Rockets, obtener algo a cambio. Por poco que fuera, si acaso un par de assets en forma de picks de draft. Claro que el pensamiento era voluntarista: han pasado las semanas y no se ha movido ni un folio. Nadie ha llamado a los Rockets, y lo normal ahora es que John Wall siga as¨ª toda la temporada 2021-22. Lo confirm¨® Adrian Wojnarowski, que casi dio oficialidad a lo que era un secreto a voces: ¡°Cada vez parece m¨¢s claro que no jugar¨¢. En los Rockets seguro, y nadie quiere hacer un traspaso porque su contrato es prohibitivo¡±.
Lo normal. Solo Stephen Curry (45,7 millones de d¨®lares para un aspirante perenne al MVP) cobra en esta temporada m¨¢s que Wall, que se lleva 44,3 millones. Los mismos que James Harden y un poco m¨¢s que Russell Westbrook (44,2). Ese jugador, esa inversi¨®n de m¨¢s de 44 millones (m¨¢s que el salary cap de una franquicia en la temporada 2004-05) no est¨¢ con el equipo. No interesa que est¨¦ en pista y ¨¦l no parece tener tampoco ganas de jugar. Para el pr¨®ximo curso tiene una player option de m¨¢s de 47 millones que evidentemente va a ejecutar. Y el buyout, la soluci¨®n habitual a este tipo de enredos, no se contempla por parte de un Wall que no quiere renunciar a nada de su dinero para poder quedar libre. No negociar¨¢. Acepta seguir as¨ª. La situaci¨®n es un bochorno en una NBA en la que son m¨¢s medi¨¢ticos otros casos (Simmons, Kyrie¡) pero en la que todos (jugadores, propietarios) toman notas (de esto y de todo: Simmons, Kyrie...) para las negociaciones de un pr¨®ximo convenio colectivo que ya est¨¢n cerca.
Wall, que ha ganado m¨¢s de 188 millones solo en contratos NBA, tiene 31 a?os. Hace no mucho, aunque lo parezca, era una de las grandes estrellas de la Liga. Fue all star cinco a?os seguidos (2014-18), segundo en el Rookie del A?o solo porque Blake Griffin coincidi¨® con ¨¦l tras no pisar las pistas en su primera temporada. Y en la temporada 2016-17 toc¨® techo: 23,1 puntos, 4,2 rebotes y 10,7 asistencias la tercera temporada seguida por encima del 17+10. Y unas cuantas heroicidades en playoffs para llevar a los Wizards al s¨¦ptimo partido de las semifinales del Este (4-3 contra los Celtics). Con 27 a?os y en un momento fabuloso dentro de un equipo en ascenso, la extensi¨®n era una cuesti¨®n de l¨®gica: 170 millones por cuatro a?os extra. Antes, en 2013, hab¨ªa firmado su extensi¨®n rookie por 80 millones.
Pero, claro, llegaron las lesiones. A unos problemas de rodilla que acabaron siendo cr¨®nicos se sum¨® un trance extra?o y fatal: lesi¨®n en un tal¨®n, infecci¨®n derivada de la operaci¨®n y fractura del tend¨®n de Aquiles por una ca¨ªda en su casa. En la temporada 2017-18 jug¨® 41 partidos, en la siguiente 32, la 2019-20 se la pas¨® en blanco y as¨ª, sin haber vuelto a las pistas, fue traspasado por los Wizards, la franquicia en la que tiene los r¨¦cords de asistencias y robos y es cuarto en puntos. Con una primera ronda condicionada atada a su contrato, se fue a los Rockets a cambio de Russell Westbrook. Un problema por otro¡ aunque no un problema igual que el otro. Por eso la ronda para los de Texas.
Wall consigui¨® volver y jug¨® 40 partidos la temporada pasada. Promedi¨® m¨¢s de 20 puntos y casi 7 asistencias, con muy malos porcentajes y mucha bola en las manos. Era un jugador, siempre lo fue, de poco tiro y mucha velocidad, primer paso explosivo y visi¨®n de juego. En todo eso, los a?os y las lesiones hab¨ªan pasado factura. Los Rockets, que tambi¨¦n se deshicieron de James Harden, entraron en reconstrucci¨®n y dejaron de necesitar sus servicios. Y si hay alg¨²n equipo con aspiraciones que crea que Wall podr¨ªa serle de utilidad, desde luego no valora su actual capacidad en esos 92 millones que tiene garantizados hasta el verano de 2023. Y como el buyout no est¨¢ sobre la mesa, no hay salida. Una situaci¨®n fea, por mucho que pas¨® de puntillas por una Liga que genera tanta actualidad d¨ªa s¨ª y d¨ªa tambi¨¦n.