Entre pol谷micas y talento: Houston cree en Kevin Porter Jr.
Los Cavs se desprendieron del joven jugador, que agot車 su paciencia. Tras arrasar en la G League, el escolta ilusiona, pero no se aleja de los problemas.
"?Alguna vez hab谷is querido ver el final de vuestra vida?". Kevin Porter Jr. hizo saltar las alarmas hace poco m芍s de un a?o. Su mensaje, publicado en su cuenta personal de Instagram junto a una foto completamente en negro, vaticinaba lo peor. "Mantente fuerte, hermano, y borra esto de las redes", "la gente te quiere, aunque t迆 no lo creas, y no quieren ver esto, estoy aqu赤 contigo, aunque no me conozcas", "borra esto, te queremos, eres demasiado importante para esta mierda", se pod赤a leer en sus comentarios. Las oficinas de Cleveland, su equipo por aquel entonces, tampoco se quedaron quietas. Pocos instantes despu谷s de la publicaci車n, el joven escolta, de 20 a?os, recibi車 la llamada del general manager de la franquicia, Koby Altman, el entrenador, J.G. Bickerstaff, y la asistente Lindsay Gottlieb. Al colgar, el mensaje ser赤a borrado. En su lugar, aparecer赤a el siguiente: "Son lo peor. Amo a los que me rodean y me siguen cada d赤a. Agradezco las oraciones y su preocupaci車n, pero no se trata en absoluto de todo esto. Estoy bien. Ya he pasado mis peores 谷pocas, nada puede ser peor. Os amo, y gracias".
Sus peores 谷pocas han sido muchas. Esta temporada, los Cavaliers le apartaron del equipo tras un accidente de coche. En el interior del veh赤culo, marihuana y armas de fuego por las que fue arrestado. Todos los cargos fueron desestimados cuando se determin車 que, tanto el coche como el arma, no estaban resigtrados a su nombre. Sin embargo, tuvo que pagar una fianza de 4.000 d車lares. Ya en la universidad, sus problemas extradeportivos tomaron serias alturas. Siendo jugador del USC Trojans, fue suspendido indefinidamente en su primer a?o por problemas de conducta. Finalmente, le acarrear赤a solamente dos partidos, aunque se perder赤a otros nueve por lesi車n. Cuestiones similares fueron las que llevaron en Cleveland a prescindir de 谷l. La llegada de Taurean Prince, efecto colateral del megatrespaso que llev車 a James Harden hasta Brooklyn, hizo que su taquilla fuera cambiada de sitio. Se sinti車 se?alado y, fruto de su cabreo, se gener車 un clima de tensi車n amamantado en episodios anteriores. Hasta l赤mites insostenibles.
Tanto que le regalaron. Literalmente. Ha llegado a los Rockets por una segunda ronda de draft. Una miseria. Muy por debajo de su talento, conocido por todo el mundo, hasta por Altman o Bickerstaff; pero insuficiente, seg迆n su criterio, para compensar todo lo que el jugador ha supuesto, y puede suponer, extradeportivamente. Fue seleccionado en 30? posici車n por Milwaukee Bucks en 2019 para ser inmediatamente traspasado a Detroit y, sin respiro, a Cleveland. Siempre ha sido, y por aquel entonces marc車 su posici車n, una inc車gnita. Destac車 desde temprana edad. En el instituto, en el Rainier Beach High School de Seattle, promedi車 27 puntos, 14 rebotes y 5 asistencias. Con ese cartel lleg車 a la educaci車n superior para, con todo lo explicado anteriormente, terminar jugando 21 partidos y promediar 9,5 puntos, 1,4 asistencias y 4 rebotes. La nebulosa del robo siempre impregn車 su figura, dif赤cil de interpretar y, por eso mismo, tachada como uno de esos talentos an芍rquicos, impredecibles y, a veces, fugaces.
El "4", en honor a su padre
Poco despu谷s de llegar a los Trojans, uno de los entrenadores asistentes, Martin Bahar, se refiri車 a 谷l simplemente como "Kevin Porter". "Porter Junior", replic車, inmediatamente, Kevin, tal y como relata Dustin Watson en The Ringer. Hubo un Kevin Porter antes que 谷l y tambi谷n fue baloncestista, hasta que las calles de Seattle le engulleron. Porter Jr. le recuerda a menudo en sus redes sociales. Creci車 sin su figura paterna desde los cuatro a?os, n迆mero que ha serigrafiado su espalda durante toda su carrera (en Houston no ha sido posible), y a la vera de una madre, Ayanna, que tuvo que multiplicarse para sostener econ車micamente el hogar.
"Aqu赤, si no juegas al baloncesto, est芍s en peleas entre pandillas, porque necesitas esa protecci車n", explica Oliver para el propio Watson. Conoci車 a Kevin en una organizaci車n sin 芍nimo de lucro para j車venes en riesgo de Seattle y fue uno de los tantos que le acompa?aron durante su infancia y juventud. Uno de los tantos que luch車 por alejarle de aquello que hab赤a arrastrado a su padre hasta la tragedia. Porter Sr. creci車 en unas calles, seguramente, a迆n m芍s duras. En 1993, cuando ten赤a 19 a?os, fue acusado de asesinato por la muerte a quemarropa de una ni?a de 14. El 迆nico testigo, que primero declar車 en su contra, termin車 retract芍ndose para terminar describiendo un tiroteo no intencionado. La sentencia fue de cuatro a?os y medio de prisi車n por homicidio involuntario. Tras cumplirla en su totalidad, se convirti車 en padre joven e intent車 reconducir su vida. Hasta 2004. Seg迆n Ayanna, Porter Sr. estaba tratando de ayudar a alguien que estaba siendo golpeado en un bar cuando le dispararon cinco veces y lo asesinaron.
Terremoto en la G League y esperanza en Houston
Y la anarqu赤a tom車 el poder. En su primera temporada en la NBA, Porter Jr. no firm車 grandes n迆meros, aunque dio muestras de lo especial que es la idiosincrasia de su juego. 10 puntos, 3,2 rebotes y 2,2 asistencias que se han desencorsetado este a?o, dando uno de esos pasitos atr芍s que permiten coger impulso. Y, sobre la pista, Kevin cambia de ritmo como pocos. "Necesitaba ponerse en forma", declar車 el general manager de Rockets, Rafael Stone, tras el buen debut del escolta con la franquicia. El pasado 11 de marzo, un mes y medio despu谷s de su fichaje. Entre una cosa y la otra, un transbordo en la liga de desarrollo de la NBA, la G League, que se qued車 muy peque?o. "No hab赤a estado entrenando y lo necesitaba. La semana que ya estuvo con nosotros fue muy buena. Inteligente. Trabaj車 duro. Hicimos todo lo que le pedimos que hiciera, hasta hoy. Hubiera sido un proceso mucho m芍s largo sin la G League. Fue una excelente manera de ponerlo al d赤a, algo que discutimos con 谷l y estuvo a favor ", explic車 Stone.
L赤der en puntos (24,1) y segundo en asistencias (7,3). Inapelable. A la pregunta de si ser赤a capaz de trasladarlo a la NBA, respuesta contundente: en su segundo partido, frente a Utah Jazz, la franquicia con el mejor r谷cord de la competici車n, 27 puntos y 8 asistencias. Actualmente, un 15,5+3,8+6,2 de promedio que se ha visto menguado por dos actuaciones, de 2 y 4 puntos, acometidas con problemas f赤sicos. Despu谷s de tres partidos parado para recuperarse, 25 puntos frente a Minnesota Timberwolves y media de 16,5. Todo en orden en lo deportivo. Junto al rookie Jae'Sean Tate y, por supuesto, Christian Wood, se ha convertido en parte de la 赤nfima esperanza que le queda a una franquicia, ahora mismo, a la deriva. Hu谷rfana de James Harden, ha podido recuperar en Porter Jr., al menos, la esencia de su juego. Obviamente, a a?os luz de sus resultados. "Es mi hermano mayor", confiesa Kevin. "Le admiro miro mucho. Hablamos mucho. Me da consejos para que pueda tener ventajas. Siento que jugamos de manera similar. Creo que es porque los dos somos zurdos y a los dos nos gusta ese paso atr芍s. Sin embargo, soy mucho m芍s atl谷tico. Me impregnar谷 de James ".
En lo extradeportivo, todo lo estaba, hasta ahora. "Hace jugadas para los dem芍s. Es un aprendiz dispuesto, un gran chico. Es agradable estar cerca de 谷l", declar車 Stephen Silas tras su debut como jugador de Houston. Tras otro par de partidos, incidi車 en ello: "Nos preocupamos por 谷l como jugador de baloncesto, pero tambi谷n nos preocupamos por 谷l como persona. Es un proceso diario. La confianza no se construye en solo un d赤a o una semana. Se construye d赤a tras d赤a, semana tras semana y mes tras mes. Parece que va en una direcci車n bastante buena. Y Kevin lo percibe. Y lo agradece: "Se aseguraron de que estuviera en un buen estado mental y en una buena situaci車n fuera del baloncesto. Siempre nos cuidan. John, Silas y Stone se aseguraron de que me estaba preparando para volver a ser parte de ellos ". Porque lo necesita. Despu谷s de un mes y medio en la disciplina de los Rockets, ninguna pol谷mica hab赤a vuelto a salpicar su nombre. La metamorfosis parec赤a real, pero demasiado sencilla. Kevin es un tipo complejo. Estuvo presente en la pelea de su compa?ero de equipo, Sterling Brown, que termin車 con el jugador de los Rockets en el hospital, gravemente herido; ahora, se encuentra en los protocolos de salud y seguridad de la NBA. No ten赤a permiso para estar donde estaba, en un club de estriptis; pero, de momento, Silas no parece que vaya a tomar cartas en el asunto en forma de castigo. Pondera m芍s el talento y sigue confiando en 谷l. "Es un gran chico".
Est芍 donde debe estar. Metaf車rica y literalmente hablando. Y no es casualidad que John sea el primer nombre que mencione en su lista. A John Lucas, se refiere. Actualmente, entrenador asistente de la franquicia, aunque lleg車, incluso, a sonar para ocupar la posici車n actual de Silas, con una aprobaci車n generalizada del vestuario. De Harden incluido. En el pasado, baloncestista profesional, con promedios de 10,7+2,3+7, All Rookie en la 1976-77 y un peculiar recuerdo en Texas: firm車 un encuentro de 0 puntos... y 24 asistencias, el r谷cord de la franquicia. Y super車 su adicci車n a las drogas, haciendo p迆blico su caso y, posteriormente, ayudando a m迆ltiples jugadores en situaciones similares a la suya.
Pas車 de ser suspendido por los propios Rockets por consumo de coca赤na a comprar un equipo para ofrecer formaci車n y alternativas a j車venes en situaciones de riesgo. Bajo su tutela,?Keith Closs, p赤vot de los a?os 90, dej車 atr芍s una situaci車n extrema: "Beb赤a en el banquillo durante los partidos y fumaba marihuana a escondidas en los descansos". O Lloyd Daniels, otro genio de esp赤ritu libre cuya adicci車n al crack le atrap車 en los ambientes m芍s hostiles: sobrevivi車 a tres tiros en una reyerta relacionada con las drogas, pero los trozos de metal que le quedaron en el hombro no le impidieron pasar por varios equipos de la NBA en la misma d谷cada que Closs. "John es un gran hombre y estoy feliz de que est谷 a m赤 lado", dice ahora Porter Jr. Y el mundo del baloncesto, Kevin.