Chicago Bulls, en estado cr¨ªtico
Derrota dur¨ªsima contra Orlando Magic, el equipo desde el que lleg¨® un Vucevic con el que los Bulls est¨¢n 3-8, con ya cuatro derrotas seguidas. Los j¨®venes, adem¨¢s, no levantan cabeza.
El traspaso por Nikola Vucevic se celebr¨® en Chicago como un paso en la direcci¨®n correcta, un punto de inflexi¨®n en el regreso a la relevancia de una franquicia metida en una reconstrucci¨®n desde la que intentaba pegar un estir¨®n en este Este que invita, tan flojo m¨¢s all¨¢ de la cabeza (Sixers, Nets, Bucks¡). Pero los Bulls est¨¢n metidos en un momento horrible, fe¨ªsimo, casi dram¨¢tico: desde que lleg¨® Vucevic, han perdido ocho partidos de once totales, ahora cuatro consecutivos incluidos duelos contra unos Hawks en cuadro y dos de los peores equipos de la NBA, los Timberwolves y los Magic, que se dieron un gusto (106-115) en el primer partido contra Vuvecic despu¨¦s de contar con el p¨ªvot durante ocho temporadas y media.
Marcado en el calendario como un partido perfecto para recuperar sensaciones, fue (es el riesgo siempre en la NBA) todo lo contrario: una invitaci¨®n a la depresi¨®n. Los Bulls, otra vez, no jugaron a nada, dependieron en ataque de rachas en el tiro exterior y no defendieron ni poco ni mucho, concediendo vuelo al pen¨²ltimo peor ataque de la Liga. Los Magic aceptaron la invitaci¨®n y abrieron brecha con un escandaloso 19-39 en el tercer cuarto que convirti¨® el 53-54 del descanso en un 72-93. Despu¨¦s los Bulls reaccionaron, y a lomos de un intento heroico de LaVine (21 puntos en el periodo final) firmaron un 21-5 que los puso a 6 (98-104). Ah¨ª volvieron a fallar, incluida una p¨¦rdida tras tiempo muerto. Y as¨ª se acabaron sus opciones y se consum¨® una derrota terrible. Los Bulls quedan con un 22-32 que habla por s¨ª solo. Son d¨¦cimos y ni siquiera tienen amarrado el barat¨ªsimo play in del Este: los Raptors, con constantes problemas y bajas, est¨¢n a un partido. Tampoco est¨¢n lejos los Wizards, ni siquiera los Cavaliers. Un espanto en la ciudad del viento, donde las expectativas iban por otro lado.
En este tramo con LaVine y Vucevic como nueva pareja de estrellas, el ataque se ha ralentizado y la defensa es todav¨ªa m¨¢s porosa. LaVine tira peor, menos c¨®modo, y los j¨®venes est¨¢n en un bache abismal: Lauri Markkanen y Coby White con sensaciones preocupantes y sin punter¨ªa, Patrick Williams (un rookie brillante) algo menos negativo pero tambi¨¦n en un tramo delicado. Otro de los j¨®venes era Wendell Carter Jr, que se fue a Orlando en el trade por Vucevic e hizo da?o de verdad en su primer regreso a Chicago. Lo que faltaba: 19 puntos, 12 rebotes y 4 asistencias para un jugador que est¨¢ dejando sensaciones prometedoras en los Magic despu¨¦s de dejar claro en Chicago que necesitaba un reinicio. Adem¨¢s, James Ennis sac¨® el f¨²sil (con todo lo que eso dice de la defensa de los Bulls): 22 puntos, 5/6 en triples, y Gary Harris sum¨® 15 puntos, como Michael Carter-Williams. Facilidades contra una defensa de mantequilla.
Vucevic brill¨® en el segundo cuarto y termin¨® con 29 puntos y 11 rebotes. LaVine intent¨® la reacci¨®n final para acabar con 30+5 y 7 asistencias. Entre los dos anotaron 11 triples de 20 intentados. Pero el equipo no muestra, ni con ellos a buen nivel, trazos de ir a alg¨²n sitio. Thad Young y Satoransky van a menos, y Markkanen y White se quedaron en 8 puntos con un 3/10 entre los dos. De poco sirvi¨® el trabajo, garantizado, de Theis desde el banqullo (16+6). Los Bulls est¨¢n en plena crisis de identidad justo cuando parec¨ªa que el futuro se abr¨ªa de par en par. A ver c¨®mo lo resuelven.