Jeremy Lin, harto de recibir insultos racistas: "Me llaman 'coronavirus' en la pista"

El 8 de mayo de 2020, el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, advert¨ªa de una situaci¨®n que, colateralmente, hab¨ªa sido catalizada por la crisis sanitaria del coronavirus: "La pandemia sigue desatando una oleada de odio y xenofobia, buscando chivos expiatorios y fomentando el miedo". Al mismo tiempo, instaba a los gobiernos a tomar medidas y "fortalecer la inmunidad de nuestras sociedades contra el virus del odio". A finales de abril, una coalici¨®n de grupos asi¨¢tico-estadounidenses, a trav¨¦s de la organizaci¨®n STOP AAPI HATE, publicaba casi 1.500 denuncias relativas a incidentes racistas. De ellas, 125 hac¨ªan referencia a agresiones f¨ªsicas. A d¨ªa de hoy, siguen llegando a centenares. La ubicaci¨®n del foco de la pandemia, la ciudad de Wuhan (China), ha catapultado un trato xen¨®fobo que ya exist¨ªa, pero que se ha multiplicado.?

Jeremy Lin, campe¨®n de la NBA en 2019 con Toronto Raptors y, actualmente, en los Santa Cruz Warriors de la liga de desarrollo de la NBA (G-League), harto de la situaci¨®n, ha alzado la voz. En un escrito a trav¨¦s de su cuenta de Facebook, ha explicado una situaci¨®n personal que, lejos de quedarse ah¨ª, esconde una realidad estructural que castiga diariamente a la poblaci¨®n asi¨¢tica y asi¨¢tico-estadounidense: "Algo est¨¢ cambiando en esta generaci¨®n de asi¨¢ticos americanos. Estamos cansados de que nos digan que no experimentamos racismo, estamos cansados de agachar la cabeza y no decir nada. Estamos cansados de que los ni?os asi¨¢ticos crezcan y se les pregunte de d¨®nde son 'realmente', de que se burlen de nuestros ojos, de que nos consideren ex¨®ticos o que nos digan que somos inherentemente poco atractivos", empieza relatando. Lin naci¨® en California, en 1988, pero sus padres emigraron de Taiw¨¢n a Estados Unidos a mediados de los 70. Desde su irrupci¨®n en el baloncesto profesional, la denuncia de comportamientos xen¨®fobos hacia su persona ha sido una constante.

Despu¨¦s de quedarse fuera de las posiciones del Draft en 2010, firm¨® un contrato con Golden State Warriors; aunque su nombre empezar¨ªa a resonar, y muy fuerte, en la siguiente temporada, con los Knicks. En la Gran Manzana, promedi¨® 14,6 puntos, 6,2 asistencias y 3,1 rebotes. En la propia ciudad de Nueva York, durante 2020, se registr¨® un aumento del 867% en las denuncias por racismo hacia la poblaci¨®n con rasgos asi¨¢ticos, seg¨²n datos de CBS News. "Estamos cansados de que los estereotipos en Hollywood afecten a nuestra psiquis y limiten lo que creemos que podemos ser. Estamos cansados de ser invisibles, de equivocarnos con nuestro compa?ero o decir que nuestras luchas no son tan reales", contin¨²a en su perfil de la red social.

Jeremy Lin, que en su carrera NBA ostenta una media de 11,6 puntos, 4,3 asistencias y 2,8 rebotes, no tard¨® en inscribir su nombre en la memoria de cualquier aficionado de la mejor liga del mundo. En su primera temporada con los Knicks, ante Los Angeles Lakers de Kobe Bryant y Pau Gasol, en el?Madison Square Garden, consigui¨® anotar 38 puntos. La actuaci¨®n desatar¨ªa la locura en el pabell¨®n y supondr¨ªa el nacimiento del fen¨®meno "Linsanity". Seg¨²n explica el base, ni su larga, y recordada, trayectoria le ha librado de ser una v¨ªctima m¨¢s:?"Ser veterano de la NBA no me protege de que me llamen ¡äcoronavirus' en la cancha", confiesa. Un episodio tan triste como bochornoso que hace p¨²blico con la intenci¨®n de promover un cambio en la sociedad: "Quiero algo mejor para mis mayores que trabajaron tan duro y sacrificaron tanto para hacer una vida por s¨ª mismos aqu¨ª. Quiero algo mejor para mi sobrina y sobrino y futuros hijos. Quiero algo mejor para la pr¨®xima generaci¨®n de atletas. As¨ª que aqu¨ª estamos de nuevo, compartiendo c¨®mo nos sentimos. ?Alguien est¨¢ escuchando?", concluye.