Los Clippers someten a la bestia
Tremendo partido en L.A. entre dos equipos que demostraron por qu¨¦ son ahora mismo dos de los m¨¢ximos aspirantes al t¨ªtulo. Se impusieron la fuera y la intensidad de los Clippers.
Baloncesto de playoffs, del bueno. Pesos pesados intercambiando golpes, sensaci¨®n de territorios marcados por lo que pueda venir en el futuro. Y derrota de Utah Jazz, que desde luego es noticia. El equipo de Quin Snyder llevaba 20 victorias en 21 partidos, del 4-4 inicial a un 24-5 que ten¨ªa a la NBA con la boca abierta. Una derrota, contra los Nuggets, desde el 7 de enero, ahora otras nueve victorias seguidas para liderar la Liga y ponerse a la altura de los grandes aspirantes. Desde luego, por sensaciones. Alg¨²n d¨ªa ten¨ªan que perder, claro. Y fue, no por casualidad contra unos Clippers que est¨¢n haciendo mucho menos ruido que la temporada pasada pero son much¨ªsimo mejores. Ahora s¨ª, con aspecto de candidatos al trono. Ahora s¨ª, un peligro para cualquier rival. Tambi¨¦n para estos Jazz hasta ahora pluscuamperfectos.
Es 24-6 para unos y 22-9 para otros, la cabeza de la NBA con Nets y Sixers liderando el Este y los Lakers en medio (22-8) pero en un momento delicado: sin Anthony Davis, sin Dennis Schr?der¡ si parece obvio que el campe¨®n ser¨¢ uno de los grandes favoritos si llega sano a playoffs, tambi¨¦n lo es ahora mismo que all¨ª tendr¨¢n las m¨¢ximas aspiraciones Clippers y Jazz, que jugaron su segundo duelo seguido pero el primero con fuego real. El mi¨¦rcoles no estaban Paul George ni Kawhi Leonard, y el triunfo cay¨® por su propio peso (96-114) incluso sin un Mike Conley que tambi¨¦n volvi¨® para este duelo, que fue lo que parec¨ªa que iba a ser: tremendo. Los Clippers, con sus dos megaestrellas, anotaron 20 puntos m¨¢s que 48 hora antes (116-112). Y ganaron.
Tyronn Lue cambi¨® el ambiente del vestuario, nocivo la pasada temporada, y dio pasos en la formaci¨®n de una cultura que tiene continuaci¨®n en la pista. Con la llegada de Serge Ibaka y Nico Batum, los Clippers son ultra f¨ªsicos, gracias en parte a la versi¨®n m¨¢s explosiva en mucho tiempo de Kwahi Leonard, en nivel de entrar en los debates por el MVP. La tenaza de la defensa h¨ªper musculada de su equipo sec¨® ¨¢reas capitales de los Jazz, que no encontraron v¨ªas c¨®modas al aro ni circularon con la alegr¨ªa habitual (solo 13 asistencias); los triples no llegaron tampoco al rescate (no lo suficiente cuando fall¨® todo lo dem¨¢s) y el rebote pas¨® de punto fuerte a tal¨®n de Aquiles por el que desangraron los de Salt Lake City: 11-6 en ofensivos, con un par definitivos de Kawhi (al final, 29+5+4) y unos cuantos importantes de Zubac.
Incluso as¨ª, los Jazz estuvieron vivos hasta el final, porque son un equipazo. Se agarraron al partido cuando fueron zarandeados de forma ins¨®lita en la primera parte, en la que sobrevivieron (57-49) tras verse con un peligroso -15 (55-40) poco antes. Del vestuario salieron con su versi¨®n infernal y con Donovan Mitchell (35+4+5) empujando para firmar un parcial de 6-19 (63-67) que no desequilibr¨® el partido porque los Clippers pusieron el pie en suelo con firmeza, se agarraron y rascaron por todas partes: defensa, rebote, sangre fr¨ªa en los tiros libres (much¨ªsimos al final) y triples en momentos importantes de Beverley (17 puntos, en un excelente momento) y Marcus Morris (17+7). El goteo de puntos de Lou Williams remat¨® un triunfo que es un golpe encima de la mesa para unos Clippers que est¨¢n haciendo todo lo que hay que hacer para cambiar su destino, y su narrativa, de la pasada temporada.
En inferioridad manifiesta primero, muy agresivos despu¨¦s y finalmente lastrados por una serie de peque?os errores que provocaron diferencias importantes (rebotes mal cerrados, faltas mal hechas¡) los Jazz echaron de menos la versi¨®n h¨ªper productiva de Ingles y Gobert (8 puntos, 15 rebotes, 3 tapones pero menos gobierno de lo habitual en las zonas). Alguna vez hay que perder, claro, y les toc¨® en un partido que no cuestiona sus opciones pero impulsa las de su rival, unos Clippers temibles. Lo prob¨® este choque de pesos pesados, baloncesto del potente.