Carlson: llegar y besar el santo con el triple de la victoria
Quedaba un segundo y medio, el norteamericano, sustituto de Echenique, recibi¨® un pase de Oroz y lanz¨® punteado por Doornekamp. Partidazo de Shermadini en un Tenerife muy confiado.


Si un jugador de baloncesto frota una l¨¢mpara m¨¢gica y sale un genio otorgando tres deseos, el primero seguro que es este: llegar a un equipo y meter el triple de la victoria, con solo un segundo y medio por jugar, recibiendo desde la banda de un compa?ero (Oroz) y con el punteo de un adversario (Doornekamp). Ese es el prodigio que ha patentado Carlson, al que el baloncesto le deb¨ªa una. A veces el deporte, centr¨¦monos en el baloncesto, tiene este tipo de historias conmovedoras. Llevaba tiempo entrenando con el Gipuzkoa y al fin, por la desgraciada lesi¨®n de la figura del equipo Echenique, pudo hacerse un sitio. Ya en 2016 le empez¨® a asolar el t¨²nel de la desgracia. Estaba fichado por el Palma Air Europa, pero una sanci¨®n impuesta al conjunto balear no le permit¨ªa incorporar a ning¨²n extracomunitario hasta el 1 de diciembre. Ello propici¨® que Mike firmara por el Gipuzkoa Basket. Aqu¨ª, tras un gran a?o, logr¨® el ascenso en 2017, casi como jugador estelar en LEB Oro. Pero en verano sufri¨® una grave lesi¨®n meniscal que le impidi¨® competir durante gran parte de la temporada. Se le cerr¨® la puerta de la ACB.?Hasta marzo de 2018 no pudo volver a una pista, en el Uni¨®n FInanciera Baloncesto Oviedo.
La locura del final del partido escribe un momento que jam¨¢s olvidar¨¢ el p¨ªvot norteamericano. Fall¨® una canasta de dos y meti¨® los tres triples que lanz¨®, uno para la posteridad. Es curioso, tres tiros ag¨®nicos en Miribilla para ganar se fueron al limbo y este cay¨® dentro. El GBC ya tiene tres victorias, a una de la zona de salvaci¨®n, y su fe es infinita. Ojo: s¨®lo perdi¨® un cuarto ante uno de los mejores de la Liga.?El Tenerife lider¨® el marcador durante 31 minutos, a lomos de un Shermadini imparable, lleg¨® a tener 13 de ventaja, y se vio ganador de sobra sobre un pobre colista sin su estrella, un equipo con un 2-15. Fue a lo m¨¢s f¨¢cil, a lo c¨®modo, y eso era alimentar y alimentar con balones al p¨ªvot georgiano, que hac¨ªa lo que le daba la gana. Pero los donostiarras, que tambi¨¦n estaban sin su entrenador Nicola por un contagio por coronavirus y siguen sin emplear a Francis, se supone que una de las referencias, estuvieron muy bien dirigidos por I?aki Mart¨ªn. Son un equipo tan honrado que provocan el afecto sobre el espectador neutral. Ellos nunca se van, siguen hasta donde puedan nadar. El improvisado t¨¦cnico orden¨® a los tres peque?os transiciones r¨¢pidas tras recuperaci¨®n, rebote o saque de fondo, y la flecha de la victoria empez¨® a girar.
Una zona 1-3-1, que iba mudando a 2-3 o se ajustaba en los cortes, empez¨® a romper el ritmo amarillo. Olaizola, otra vez ¨¦l, sali¨® con el cuchillo entre los dientes y protagoniz¨® una jugada que firmar¨ªa el mism¨ªsimo LeBron. Una finta en el arco del triple haciendo volar a Shermadini, para luego marcar los pasos dar un amago de pase, esquivar a Doornekamp, al que dej¨® con dos palmos de narices, y acabar con una canasta espectacular. Se re¨ªa incr¨¦dulo el banquillo. Fue impagable su labor en el cinco. El Acunsa empez¨® a distribuir muy bien la pelota, con hombres en las esquinas y el pistolero Dee d¨¢ndole al gatillo de forma magistral. Span se solt¨® la coleta y tambi¨¦n meti¨® unos puntos muy necesarios. Empataron a cinco minutos para acabar y se abri¨® el grifo de la esperanza. A falta de 1:54 ten¨ªan su m¨¢xima diferencia: 86-80. El Tenerife, el mejor equipo en porcentaje de triples (44%) muri¨® precisamente desde esa l¨ªnea: se qued¨® en un 30 por ciento, ante un GBC que es el tercero peor en esa faceta (tiene un 32,5% y firm¨® un 57%). El banquillo donostiarra hizo 50 puntos, una muestra m¨¢s de la ley del sacrificio que impera en las filas de Nicola.??
Okouo, un jugador muy limitado que viv¨ªa a la sombra de la estrella m¨¢s brillante de Illunbe, Echenique, fue el resumen de lo que supone dar todo lo que se lleva dentro en un equipo que se niega a la rendici¨®n. Se desgat¨® con Shermadini, al que conoce de M¨¢laga. Y Pere Tom¨¤s fue el otro factor clave, con ¨¦l empez¨® todo. No solo emboc¨® un triple desde su casa, meti¨® canastas claves para seguir creyendo en el triunfo. Su error del final no empa?a un partidazo. A falta de dos segundos y medio, en un saque de banda insular, se qued¨® emparejado con Shermadini, pero abandon¨® la vigilancia para seguir a Fitipaldo, al que ten¨ªa a buen recaudo Motos. La cogi¨® Gio y la hundi¨® a placer, medio alucinado por estar tan libre. Pero en el segundo y medio final, le quit¨® el protagonismo Carlson. Con un triple desde algo m¨¢s de siete metros. El debut so?ado. Acab¨® manteado tras la algarab¨ªa general. No es para menos.