Hay vida sin Campazzo
El Madrid tuvo minutos brillantes en la primera parte y resisti¨® en la segunda. Un triple de Thompkins le daba la victoria... hasta que apareci¨®n Mike James con un 3+1. Llull, de base.

Aunque cueste creerlo, hay vida m¨¢s all¨¢ de Campazzo. El Madrid lo demostr¨® ante el CSKA pese a la derrota, una m¨¢s frente al ogro ruso (33 en 53 partidos), de nuevo en Mosc¨², donde los blancos no vencen desde hace 12 a?os. Rebobinen la era Laso completa y algo m¨¢s. Va para cancha maldita, la de un equipazo donde los arbitrajes amables para los visitantes son una utop¨ªa. Esta vez, sin embargo, cayeron por no cerrar y atrapar el ¨²ltimo rebote y porque el equipo del Ej¨¦rcito Rojo tiene un genio anotador, Mike James, que mantuvo el muro en pie. Indomable, irreverente y, a menudo, demasiado individualista, pero un jugadorazo de enorme talento.
A falta de cinco segundos le lleg¨® el rechace de su error previo (v¨ªa Hackett y Clyburn) y emboc¨® limpio el triple de la victoria con falta se?alada a Abalde: 3+1. Atr¨¢s quedaba el tiro frontal presuntamente ganador de Thompkins despu¨¦s de una doble finta, atr¨¢s quedaba una primera parte muy buena del Madrid y una segunda en la que resisti¨® en un Mega Sport Arena con exceso de espectadores (3.103) y demasiados con la mascarilla mal puesta. Aguant¨® tanto que casi triunfa, y aguant¨® sin Campazzo. Pero los genios aparecen cuando parece imposible: Mike James, 28 puntos, 14 en los ¨²ltimos 6 minutos. Da igual que su equipo diera solo 4 asistencias, da igual que el rival repartiera 18 y perdiera apenas 6 balones. El dominio del rebote (44 a 34) y la haza?a individual de un tipo de 1,85 m con dos ca?ones por piernas decidieron.
El plan para suplir a Campazzo
Hab¨ªa expectaci¨®n por comprobar el plan para suplir a Campazzo. De salida, Laprovittola titular con Abalde a su lado, que sujet¨® al agente James (arranc¨® en el banquillo) en sus primeras carreras en pista. Poco despu¨¦s entr¨® Taylor, que se ocup¨® del marcaje, y luego agarr¨® el doble testigo Aloc¨¦n, el de la direcci¨®n y el de echarle el lazo a la estrella roja. A su vera, un Llull acertado en la larga distancia y sereno que en los ataques de cinco contra cinco recuperaba galones y descargaba de responsabilidad al ma?o. Y, justo antes del descanso, la entrada de Carroll por Aloc¨¦n situ¨® a Llull como ¨²nico timonel. Tarea de grupo para suplir al Facu, una labor perfecta que llev¨® a los blancos a viajar 11 arriba mediado el segundo cuarto: 25-36. De ah¨ª al intermedio, un momento de apag¨®n. Cinco minutos con una sola canasta, un matazo de Tavares al que Llull trataba de involucrar para superar el bache (35-38).
Antes, mucho Thompkins y mucho Randolph, que coincid¨ªan en escena para abrir el campo hasta el l¨ªmite frente a Shengelia y Milutinov, una pareja bastante m¨¢s interior. Ataques de balonmano, en los que Laprovittola pisaba la zona y distribu¨ªa o en los que Deck contaba con espacio para moverse al poste o penetrar. Sac¨® r¨¦ditos de esa disposici¨®n. A la novedad de Laprovittola en el cinco se uni¨® la ausencia de Tavares, reservado para cuando tocara llamar a la caballer¨ªa.
En la reanudaci¨®n, el CSKA ley¨® mejor d¨®nde se hallaba la fortaleza del enemigo y apret¨® al Real, que empeor¨® sus porcentajes poco a poco, mientras que en ataque se solt¨® con los arreones de Mikes James, que iba a dejar lo mejor para el final. Por momentos, los de Itoudis parec¨ªan un combinado hist¨®rico del Baskonia. De un tiempo a esta parte han pagado por el buen ojo de la direcci¨®n t¨¦cnica vitoriana: adem¨¢s de James, estaban Hilliard, Shengelia y Voigtmann. Despu¨¦s de siete alternancias consecutiva en el marcador, el Ej¨¦rcito se desataba, Tavares era el pilar (10 capturas y 4 tapones) que aguantaba la estructura y evitaba el colapso. Carroll embocaba un 2+1 antes de torcerse el tobillo y marcharse al vestuario.
Llull de base y el despiste de Tavares
Los de Laso consiguieron resistir con el pu?o en alto, atar en corto al rival, al que solo le aupaban los arreones de James. ?Pero qu¨¦ arreones! Hasta 14 puntos en los ¨²ltimos 6 minutos. Triplazo de Llull para replicar, por entonces y desde hac¨ªa un buen rato base a tiempo completo, aunque a falta de 1:43 marraba dos tiros libres. El CSKA se pas¨® m¨¢s de tres minutos sin encestar y Thompkins, con una diana de tres despu¨¦s de una doble finta, gritaba "ganan blancos".
Quedaba un ataque, James fallaba precipitado desde el 6,75 y ni Deck ni Tavares atrapaban el bal¨®n¡ El rechace largo le volv¨ªa a Mike James, que desde la esquina la clavaba limpia al tiempo que los ¨¢rbitros cargaban con la falta a Abalde (justita, pero parece que le roza): 3+1. Restaban 2,5 segundos, saque de campo a campo que recepciona Tavares y, en vez de buscar el pase fuera para el triple y la pr¨®rroga, suma la canasta f¨¢cil bajo el aro: 74-73 con la bocina aullando. Hab¨ªa perdido la cuenta del marcador, error de principiante. El Madrid ca¨ªa de pie en Mosc¨². Igual que hace diez meses, adi¨®s a la racha, ahora tras once victorias seguidas, cinco en la Euroliga.