Los Thunder siguen sumando ante los desmadejados Wizards

Los Thunder siguen a lo suyo. Sin un juego espectacularmente brillante y sin terminar de arrancar en la burbuja, est¨¢n muy cerca de los Rockets en la cuarta posici¨®n del Oeste. Y, si los Jazz lo permiten, podr¨ªan tener ante ellos una de las eliminatorias m¨¢s apasionantes de la primera ronda, con el morbo incluido que supone ver enfrentarse a Chris Paul ante su exequipo, del que sali¨® por la puerta de atr¨¢s y con p¨²blicos y notorios problemas con James Harden, esa estrella que tantas opiniones encontradas genera en el aficionado medio de la Liga.

De momento, la victoria ante los Wizards les pone 3-2 en la burbuja, y sin una actuaci¨®n estelar, Chris Paul ha conseguido guiar a los suyos a una nueva victoria. 13 puntos, 6 rebotes y 9 asistencias para ¨¦l, que adem¨¢s ha anotado 3 de 4 en triples y sigue con una fiabilidad exterior que est¨¢ dando muchos r¨¦ditos a los de Billy Donovan. Ante los Wizards, Gilgeous-Alexander se fue a los 18+6+7, Gallinari a los 20 tantos, Bazley a los 23 y Diallo a los 13, con 14 de Muscala. En total, hasta seis jugadores por encima de los 10 tantos, con Dort sumando 9 y 10 rebotes. Es decir, una nueva exhibici¨®n coral que se ha convertido en el santo y se?a de uno de los equipos m¨¢s peligrosos para los playoffs en el Oeste.

Los Thunder ya mandaban en el primer periodo por 32-23, y ya al descanso ten¨ªan una ventaja lo suficientemente c¨®moda (64-48) que se dedicaron a administrar en lo que quedaba de partido. Sin sufrir, se impusieron a unos desmadejados Wizards (0-6 en la burbuja a falta de enfrentarse con Bucks y Celtics) que ya no se juegan nada y que apenas contaron con los 19 puntos de Jerome Robinson, su hombre m¨¢s destacado. OKC sigue ganando enteros en una temporada en la que est¨¢ns siendo una de las revelaciones, y asustan ante la inc¨®gnita de la burbuja, sin que nadie sepa qu¨¦ va a pasar o c¨®mo va a afectar el par¨®n a la din¨¢mica de las franquicias. Ah¨ª estar¨¢n los Thunder, para aprovechar la m¨¢s m¨ªnima debilidad. Y con Chris Paul a la cabeza, claro.