El Bilbao no frena y da un serio aviso para la Copa ante Unicaja

Tal vez Pablo Laso deber¨ªa ir preocup¨¢ndose. Inquietarse por las noches cuando llegue la hora de coger postura en la cama. Porque ese ascendido que pod¨ªa proponer ante su equipo un mero tr¨¢mite en cuartos de final de Copa va como un cohete. Tiene tal nivel de confianza el Bilbao Basket que ya nada le asusta, ni siquiera la idea de seguir con el pleno de Euroligas a los que ha cortado la cabeza (con el Valencia lo ha hecho dos veces). En campo de ataque est¨¢ iluminado como los Warriors; los buenos, no los de ahora. Lanza balones al aire como se propulsa el hombre-bala en los circos, que Lammers ya los recoger¨¢ para guardar en la cesta. Hizo seis canastas de dos, todo mates. Solo fall¨® un tiro, a media distancia, ser¨¢ porque se vio extra?o. Y luego tiene a Bouteille, una de las revelaciones de la ACB, un jugador que no se equivoca casi nunca, que tira como los ¨¢ngeles y marca los pasos en penetraci¨®n con perfecto 'timing', para acabar ayudado en la tabla.

En esta ocasi¨®n sali¨® el mejor Kulboka, espectacular en el disparo lejano. Y Rousselle (?y eso que andaba con fiebre!), para formar un c¨®ctel que explot¨® en las narices de un Unicaja al que cabe reprochar su apat¨ªa del primer tiempo y la blandura en el juego interior, pero se corrigi¨® perfectamente en el segundo. Puso en la balanza 16 triples sobre 30 intentados y parecen argumentos suficientes para opositar al triunfo. Eso s¨ª, fall¨® el decisivo, el que daba la pr¨®rroga. Y en el lado contrario, sacar un encuentro en el que te meten 48 puntos por el camino m¨¢s corto para anotar tiene un m¨¦rito gigantesco.

Los detalles decantaron un partido vibrante en muchos instantes. Una p¨¦rdida, alg¨²n tiro libre, una elecci¨®n a destiempo, el tiro final... eso te determina el 1 o el 2 en la quiniela. Si vas a jugar la Copa, siempre sirve de ejemplo el partido previo. Suele chequear el estado de ¨¢nimo de cada cual. El Bilbao Basket se va cargando a rivales con pedigr¨ª y el Unicaja mantiene sus dudas, esas que han obligado a activar su condici¨®n de organizador para estar en su propia Copa. Los vizca¨ªnos est¨¢n sabiendo jugar los momentos decisivos con aplomo, y eso les hace pensar que no son una comparsa para la cita del Mart¨ªn Carpena, ni mucho menos. Ocho faltas hicieron los costasole?os en el primer tiempo, s¨ªntoma de que algo estaban haciendo mal, que la tensi¨®n no era la adecuada. Cuando te zampas tantos mates del cinco enemigo es que algo chirr¨ªa. Lammers campaba a sus anchas: busca la espalda a Gerun (jugador pretendido por el RETAbet el a?o que descendi¨®) y sobrevolaba el espacio a¨¦reo de Miribilla sin ning¨²n radar a la vista. Cuatro mates tras 'alley oop' y otros dos despu¨¦s de una conexi¨®n que empieza a ser conocida en la ACB: el 'pick and roll' con Rousselle. El rebote ofensivo manten¨ªa con vida a los pupilos de Casimiro, que estaban sin balance defensivo.

El RETAbet no se mueve un ¨¢pice de su mentalidad como equipo, sin individualidades que hagan la guerra por su cuenta. Por eso no extra?a que su jugador con m¨¢s nombre Rafa Mart¨ªnez, fuera en los doce primeros minutos el ¨²nico que no hab¨ªa anotado junto con el reci¨¦n aterrizado Haws. La distancia se ensanch¨® al 53-38. Los cuatro p¨ªvots del Bilbao Basket completaron el mejor partido de los altos esta temporada de largo. Y Rousselle dirig¨ªa la orquesta con ese aire jovial que contagia a la grada. Pero el choque cambi¨® tras el descanso. Fue m¨¢s por acierto del Unicaja que por desconexi¨®n local. Casimiro puso a tres peque?os para tener m¨¢s viveza. Las esquinas, all¨¢ donde nunca llega la defensa, eran suyas en el ataque y los triples empezaron a arreciar. La presi¨®n sobre las l¨ªneas de pase no valen para nada cuando el campo se hace tan grande. La zona 2-3 era dinamitada por el enorme acierto de los verdes: 7 de 8 en canastas desde el arco en un tercer cuarto, que depar¨® para los costasole?os tan s¨®lo un punto menos que todo el primer tiempo (35).