Las cuentas de la crisis china de la NBA: 500 millones en p¨¦rdidas

La pretemporada de la NBA en China, donde los Lakers y los Nets han hecho doblete, ha llegado a su fin. Los Rockets jugaron en Jap¨®n, pero su m¨¢nager general, Daryl Morey, desat¨® una crisis sin precedentes con China por un tweet en el que defend¨ªa la libertad en Hong Kong, donde se estaban produciendo violentas revueltas justo cuando la franquicia texana estaba cerca de ese territorio. Lo que acaban de empezar, sin embargo, son las consecuencias de tal patinazo.?

Estados Unidos, a trav¨¦s de pol¨ªticos de todo signo, de miembros de los estratos m¨¢s altos de la sociedad y del ciudadano corriente, se ha puesto a favor de Morey de una u otra forma, aplaudiendo tanto la libertad de expresi¨®n como su condena de estos actos pol¨ªticos. La NBA, no tanto: Tilman Fertitta, el propietario de los Rockets, le reprendi¨® al instante y p¨²blicamente; Adam Silver y la Liga fueron tibios al principio aunque terminaron mostr¨¢ndose m¨¢s claros viendo que su respuesta no hab¨ªa quedado clara; pero el dinero que se mueve es mucho y nadie quiere perder poder. Pocos han sido los jugadores que se han pronunciado en p¨²blico acerca de este desaguisado, pero Rachel Nichols (ESPN) informaba hace unos d¨ªas sobre conversaciones en privado: las ha habido y se le ha trasladado a Silver la preocupaci¨®n por un mercado clave como el chino, fuera ya de todo signo pol¨ªtico y meti¨¦ndose s¨®lo en el terreno econ¨®mico.?

Marc Stein (The New York Times) ha hecho un an¨¢lisis de la situaci¨®n tras la primera tormenta y pone las cifras a lo que se prev¨¦ que ocurra. La estimaci¨®n m¨¢s optimista en los c¨ªrculos de la NBA es que perder¨¢n unos 500 millones de d¨®lares al a?o debido a este conflicto si no se resuelve. S¨®lo los Rockets ya se dejar¨ªan 25 millones cada temporada, lo que es un fracaso para ellos: son el equipo con m¨¢s poder all¨ª por el pasado de Yao Ming, la gran estrella del baloncesto del pa¨ªs, en Houston.

"El 90% de jugadores de la NBA no sab¨ªan ni lo que estaba pasando en Hong Kong hace una semana", dice un jugador que se mantiene en el anonimato. Pese a ello, poco han tardado en levantarse ante la posibilidad de que sus negocios, los de sus patrocinadores y los de sus equipos, se vean afectados en un lugar que se estaba asentando como un mercado muy potente a corto y medio plazo.