Los nuevos Hawks: de 'pasar' de Doncic a aspirar a ser los Warriors del Este
La franquicia de Atlanta ha juntado uno de los n¨²cleos j¨®venes m¨¢s motivantes de la Liga gracias a Travis Schlenk, antiguo directivo de Golden State.
Pasado el draft mucha gente est¨¢ haciendo las listas de ganadores y perdedores del mismo. En el primer grupo una de las franquicias m¨¢s destacadas son sin duda los Atlanta Hawks, que con sus dos elecciones de top-10 han completado lo que puede ser el n¨²cleo joven m¨¢s prometedor de la NBA a medio plazo. Y todo gracias en gran parte a Travis Schlenk, un hombre que lleg¨® en 2017 procedente de los Warriors, donde en los 13 a?os que trabaj¨®, primero como scouting de v¨ªdeo y despu¨¦s como asistente del general manager, se gan¨® la aprobaci¨®n de todos sus compa?eros de profesi¨®n. Su mayor logro para los que luego ser¨ªan campeones tres veces en cuatro a?os fue el pick 35 del draft de 2012. Fue el principal responsable de identificar el talento escondido en un jovenc¨ªsimo Draymond Green.
Ahora muchos comienzan a ver similitudes entre el actual modelo de juego de los Warriors y estos Hawks a¨²n en pa?ales. Seis jugadores forman un grupo entre 19 y 21 a?os al que se acaban de sumar tres de ellos: De'Andre Hunter, Cameron Reddish y Bruno Fernando. Los otros tres, Trae Young, Kevin Huerter y John Collins, ya demostraron en la segunda parte de la temporada pasada unos mimbres muy positivos, convirti¨¦ndose en uno de los equipos m¨¢s entretenidos de ver y, lo m¨¢s importante, empezando a ganar casi lo mismo que lo que perd¨ªan (10-14 de r¨¦cord desde el All Star).
Schlenk eligi¨® a John Collins en el n¨²mero 19 del draft de 2017. Esa fue su primera aportaci¨®n al proyecto. El ala-p¨ªvot, sin hacer un ruido excesivo, ya est¨¢ en 19,5 puntos y 9,8 rebotes por partido en su segunda temporada en la Liga. El a?o pasado, con dos primeras rondas, lleg¨® la verdadera imitaci¨®n del modelos Warriors, escogiendo a sus particulares Splash Brothers. Trae Young y Kevin Huerter. La elecci¨®n del primero fue m¨¢s que discutida. Los Hawks ten¨ªan el tres, pero llegaron a un acuerdo con los Mavericks, que ten¨ªan el cinco, para intercambiarse los jugadores y, de paso, los texanos les dar¨ªan una primera ronda para este a?os.
En aquel intercambio Young acab¨® en Atlanta y Doncic en Dallas. La temporada del esloveno ha superado todas las expectativas y hoy por hoy es el mejor jugador de la clase de 2018. Pero el final de curso de Young fue de un nivel similar al de Doncic, coloc¨¢ndole a rebufo en la carrera por el rookie del a?o. S¨®lo el tiempo dir¨¢ si el cambio fue acertado, pero los r¨¦ditos que los Hawks consiguieron son indiscutibles. Gracias a eso este a?o han tenido dos elecciones en el top-10. Inicialmente la 8 (suya) y la 10 (la de Dallas). Gracias a ello han podido negociar con m¨¢s libertad ascender puestos, hasta cambiar el 8 por el 4 a los Pelicans, un movimiento clave para el futuro de la franquicia.
Con ese n¨²mero 4 han elegido a De'Andre Hunter, el 3+D m¨¢s claro de todos los jugadores de este a?o. Al parecer, una obsesi¨®n personal de Schlenk, que le quer¨ªa a toda costa. Y a juzgar por las cualidades del propio Hunter y del resto de j¨®venes, la uni¨®n de todos ellos no puede m¨¢s que dar r¨¦ditos. Es justo lo que los Hawks necesitaban, y adem¨¢s en un jugador que parece ya hecho para rendir desde el minuto uno en que est¨¦ en la NBA. Por si esto fuese poco, con el 10 se llevaron lo que con los a?os se puede convertir en el robo de este draft. Cameron Redish comenz¨® el a?o universitario como gran candidato al n¨²mero 1, incluso por encima de sus compa?eros Zion y Barrett. Su temporada ha sido algo decepcionante, superado en protagonismo por ambos y demostrando una deficiente toma de decisiones en varias situaciones de partido. Pero el talento innegable est¨¢ ah¨ª y puede haber ca¨ªdo en el lugar id¨®neo para desarrollarse.
Va a estar en un equipo sin demasiado presi¨®n por ganar, con jugadores de su misma edad pero que van a llevar el peso del equipo (Young, Collins) y que de esta manera le dejar¨¢ todo el tiempo del mundo para aclimatarse al que va a ser su nuevo lugar. Si se queda en un actor secundario, un jugador de apoyo para los grandes espadas, no dejar¨¢ de ser un n¨²mero 10 del draft. No se habr¨¢ perdido nada. Pero si consigue llegar a lo que apunta, los Hawks pueden haber encontrado una estrella m¨¢s abajo de lo habitual. A todos ellos hay que sumarles a Bruno Fernando, que ha pasado m¨¢s desapercibido al caer hasta la 34? posici¨®n. Este interior de 21 a?os es la guinda de un pastel cuyo techo es el cielo.
Lo m¨¢s normal es que no veamos empezar a los Hawks el pr¨®ximo a?o con un quinteto ¨²nicamente formado por los j¨®venes, pero s¨ª que aparecer¨¢n en momentos puntuales de los partidos. Esos ratos habr¨¢ que guardarlos en la memoria, porque podr¨ªan ser los primeros pasos del equipo dominador del futuro. De momento lo que es seguro es que los Hawks ser¨¢n uno de los favoritos de los espectadores. Uno de esos equipos que gustan de ver. Para que los aficionados de todos los equipos menos los suyos se pongan en su contra ya habr¨¢ tiempo. Que se lo digan a los Warriors.