Antetokounmpo silencia el Garden y los Bucks mandan (2-1)

Cay¨® el Garden y cay¨® la ventaja, pr¨¢ctica y emocional, que hab¨ªan amasado en su tremendo primer partido los Celtics. El factor cancha le dur¨® un suspiro a los de Stevens, para los que definitivamente nada puede ser f¨¢cil en esta temporada, acabe como acabe. Tampoco han sostenido la sensaci¨®n sobre un rival que, al fin y al cabo, gan¨® 60 partidos en temporada regular y tiene a un jugador, Giannis Antetokounmpo, que probablemente va a ganarle el MVP a una versi¨®n flam¨ªgera de James Harden. En el Este vamos a pasar de LeBron James y los Cavaliers a Giannis y los Bucks, Kyrie Irving y los Celtics, Kawhi Leonard y los Raptors o Joel Embiid y los Sixers. En las semifinales, una colisi¨®n del big four que llev¨¢bamos toda la temporada esperando (a?o I sin LeBron, el Este busca rey), Raptors y Celtics golpearon muy fuerte de salida pero han rrecibido da?os muy severos en el contrataque de sus rivales.

Los Celtics han perdido la inercia en el juego y la mano en la partida: los terceros partidos son as¨ª de importantes. Si el 1-2 les habr¨ªa permitido jugar con las inseguridades de unos Bucks con poca experiencia, el 1-2 les convierte en el jugador al borde del tablero, obligado a no fallar en el cuarto, que se juega el lunes (01:00, hora espa?ola). Lo peor de la derrota para ellos fue que no lleg¨® en una noche negra ni en un partido inclinado muy r¨¢pido a favor de unos Bucks que, ya se sabe, no corren: en cuanto aceleran, vuelan. No, casi a mitad del tercer cuarto el marcador era 69-69, Kyrie y Giannis llevaban 17 puntos cada uno y ambos equipos sumaban un id¨¦ntico 26/52 en tiros. A partir de ah¨ª, cuando m¨¢s ten¨ªan que pesar el Garden, la experiencia, Kyrie y Stevens, fueron los Bucks los que ganaron el partido gracias a un apabullante final de tercer cuarto en el que convirtieron un 82-81 en un 82-93 con George Hill (11 de sus 21 puntos ah¨ª) como ejecutor y Antetokounmpo como constante MVP. En una sucesi¨®n de tiros libres visitantes que sac¨® del partido a unos Celtics extremedamente nerviosos, las ventajas volaron (94-111 a mitad del cuarto, una canasta en juego local en seis minutos) y se llevaron el factor cancha de vuelta a Milwaukee. All¨ª los Celtics tendr¨¢n que volver a ganar, como m¨ªnimo y por ahora, un partido m¨¢s.

En el ¨²ltimo cuarto los Celtics anotaron 16 tiros libres (29 puntos totales) e igualaron (32 por 36) la estad¨ªstica de viajes a la l¨ªnea de personal que hab¨ªa reventado Antetokounmpo (16/22). Antes, frustrados, empezaron a pasar menos a medida que protestaban m¨¢s y acabaron entrando de lleno, un pecado en su pista, en el tipo de partido que quer¨ªa su rival: 17 asistencias en el primer tiempo, solo siete en el segundo, una sucesi¨®n de penetraciones y botes hacia ninguna parte que facilitaron las llegadas en transici¨®n y los tiros abiertos de unos Bucks que concedieron m¨¢s en sus esquinas para colapsar totalmente la zona, donde Giannis anot¨® m¨¢s que todos los Celtics y el marcador global fue de 24-52. Si se suma un 16-42 en puntos de banquillo, el resultado es unos problemas mucho mayores que el arbitraje para los de Stevens, a los que se le ha ido descosiendo su excelente plan anti Giannis del pasado domingo, que de repente queda muy lejos. El griego (32 puntos, 13 rebotes, 8 asistencias) jug¨® c¨®modo, anot¨® todos sus puntos en la pintura o desde la l¨ªnea de personal (la d¨¦cima que lo hace para m¨¢s de 30 en esta temporada, un dato estremecedor) y encontr¨® siempre a sus compa?eros en buenas posiciones. En un d¨ªa gris de Lopez y Bledsoe (siempre en un v¨ªa crucis contra este rival), respondieron Middleton (20 puntos, 3/6 en triples), el decisivo Hill (21 y 9/12 en tiros totales) y Connaughton (14 y 4/9 de tres). Mirotic volvi¨® a ser titular y acab¨® con 13 puntos, 3 rebotes y 3 triples (3/7) en el que puede ser, otra excelente noticia para Budenholzer, el ¨²ltimo partido de la serie sin Malcolm Brogdon.

Los Celtics volvieron a tener mand¨ªbula de cristal, algo nada inhabitual esta temporada y que resultaba impensable la pasada. Cuando desapareci¨® el juego colectivo, solo parec¨ªa pensar en los dem¨¢s un Hayward que sin embargo no era capaz de cocinarse nada para s¨ª mismo (2/8 en tiros, 10 puntos y 5 asistencias). Giannis condiciona una rotaci¨®n en la que Baynes se queda fuera y Ojeleye da buenos minutos en defensa pero complicados en ataque. Kyrie Irving se quej¨® del arbitraje ("lo de los tiros libres empieza a ser rid¨ªculo, est¨¢n ralentizando toltamente el juego") pero tambi¨¦n de su falta de eficiencia ("no podemos fallar bandejas, protestar tanto....") acab¨® con 29 puntos y 6 asistencias pero un 8/22 en tiros que es un 12/40 en los dos ¨²ltimos partidos, en los que ha estado muy lejos de lo que necesita de ¨¦l su equipo para ventilar a los Bucks, algo que en todo caso quiz¨¢ no vuelvan a hacer si a Al Horford (17+8+5) le sigue sin funcionar el cepo sobre Antetokounmpo, que vuelve a condicionar todo lo que pasa en la pista (tremendo trabajo de intimidaci¨®n defensiva en su aro), como fue durante toda la Regular Season y como no fue en el primer partido de esta serie, que va virando hacia el verde mucho m¨¢s oscuro de Wisconsin.

Para los Celtics es tan sencillo (y tan complicado) como que esta vez no son el mejor equipo de la eliminatoria si no hacen partidos perfectos... o casi perfectos. Y llevan dos seguidos jugando unas muy malas segundas partes en las que los cortocircuitos ofensivos hacen que les salten tambi¨¦n los plomos en defensa. Por primera despu¨¦s de casi una semana de eliminatoria, son ellos los que van a remolque y los que jugar¨¢n ahora sin margen de error ante unos Bucks que han dado en los ¨²ltimos dos partido una tremenda lecci¨®n de cohesi¨®n, energ¨ªa y confianza. Son, al fin y al cabo, un equipo que viene de ganar 60 partidos. Y, despu¨¦s de un arranque de pesadilla, es obvio que vuelven a creer que es as¨ª: un problema gigante para los Celtics.