Los 76ers sobreviven a la gresca con Embiid y dos triples decisivos

Gran batalla en el Barclays Center en un partido precioso que tuvo de casi todo y se cerr¨® con una serie de triples, uno de Redick y otro de Scott que decidieron en duelo para unos 76ers que, curiosamente, terminaron con 8/26 (30%) en esa faceta.

Fue agitado y no mezclado, como si James Bond lo hubiera pedido, desde bien empezado el encuentro. Desde la previa, como el anterior y el anterior. Toda esta serie es una cadena de sucesos que mantienen al espectador pegado al asiento?frente a otras con menos historia o m¨¢s decididas: aqu¨ª hay carnaza.

Caris LeVert empez¨® dominando y mostr¨¢ndose como un pu?al en los primeros minutos, donde ya superaba la decena de puntuaci¨®n y vest¨ªa de luto la defensa de los de Brett Brown, que ten¨ªan que sacar la cabeza con acciones cerca del aro de ataque para equipararse. Cuando parec¨ªa que los visitantes cortaban el bacalao, apareci¨® el 'enforcer' Jared Dudley: anotaba un triple y lo celebraba imitando un gesto de?Ben Simmons, con quien ha cruzado unas palabras en d¨ªas anteriores, lo que hac¨ªa levantarse a la grada y pon¨ªa a sus compa?eros sobre la pista de una posible grieta en la mente de los de Philly. El papel de Dudley iba a incrementarse al inicio del tercer cuarto, cuando empuj¨® a Embiid (al que se le se?al¨® una flagrante de tipo 1 por un falt¨®n a Allen) y provoc¨® una pelea que les llev¨® a Jimmy Butler y a ¨¦l a ser expulsados. Estaba medido, Dudley tiene cabeza. Eso volvi¨® a ser un impulso emocional para grada y jugadores, que vieron al mejor defensor de los rivales irse por el t¨²nel de vestuarios para no volver.

Simmons era el enemigo mayor, pero el peligro estaba en muchos m¨¢s sitios. Tobias Harris sali¨® y dio razones para que se le considere como uno del quinteto mortal, que s¨ª lo es pese a las dudas, de estos Sixers; Boban Marjanovic cubr¨ªa expediente; Joel Embiid estaba extramotivado tras perderse el tercer partido, terminando con 31+16+7+6 y con la sonrisa ir¨®nica en la cara.

LeVert era una m¨¢quina de hacer todo bien, no s¨®lo anotando y dejando jugadones sino metiendo manos, tir¨¢ndose al suelo a por todo, cambiando bien en los bloqueos... No fue s¨®lo ¨¦l el que batall¨® hasta el final: D'Angelo Russell, m¨¢s desconectado que en otras ocasiones en el c¨®mputo global del d¨ªa, acudi¨® a la cita con su "hielo en las venas" cuando el tiempo acuciaba: un triple y una asistencia pon¨ªan muy dentro a los Nets. Los dos triples, con el punto de exclamaci¨®n final en el de Mike Scott desde la esquina izquierda, acabaron con todo lo trabajado por los de Kenny Atkinson y llevaron el 3-1 al casillero de esta eliminatoria del Este.