NBA | NUGGETS 96-SPURS 101 (0-1)
Primer bombazo en el Oeste: los Spurs se imponen en Denver
Los Nuggets, el mejor equipo en su pista de la temporada, perdi¨® el factor cancha a la primera. Excelente planteamiento de Gregg Popovich.
Primera noche de playoffs... y tres victorias a domicilio, tres eliminatorias con el factor cancha reventado y solo un equipo, c¨®mo no los Warriors, tan tranquilo de entre los te¨®ricos favoritos. Nunca en la historia de la NBA los dos s¨¦ptimos (de Este y Oeste) hab¨ªan comenzando ganandos a los dos segundos. M¨¢s all¨¢ del bochorno inicial de los Sixers ante los Nets, esas son dos series que se han puesto tremendamente interesantes. Pero si no parece a priori (a priori) que los fantasmas de los Raptors vayan a llevarles a un costalazo en primera ronda, y si en todo caso la apuesta m¨¢s f¨¢cil sigue siendo el talento en el Sixers-Nets... hay algo especialmente peligroso, carn¨ªvoro, en la victoria (96-101) de los Spurs en Denver.
Porque el partido fue, casi paso a paso, lo que hab¨ªan dibujado los que dudaban de los Nuggets a pesar de su excelente temporada. Falta de oficio, un pecado mortal en su primer partido de playoffs desde 2013 contra unos Spurs que llevan jug¨¢ndolos desde 1998. Falta de instinto, o de jerarqu¨ªa, y manos temblorosas cuando quem¨® el bal¨®n. Que quem¨® mucho. La cosa se pone fea para unos Nuggets que no ganaron en San Antonio en Regular Season (claro que los Spurs tampoco hab¨ªan ganado en las Rocosas) y que han sido el mejor equipo local de la temporada (34-7). Jugaban, adem¨¢s, contra un rival tambi¨¦n temible en su pista (32-9) pero muy d¨¦bil fuera de ella (16-25). Es decir: para los Nuggets era fundamental mantener el factor cancha ante un enemigo curtido, inteligente, ultra agresivo ante su p¨²blico y extraordinariamente bien entrenado. As¨ª que s¨ª: los Nuggets tienen un problema. Del que todav¨ªa pueden salir, desde luego, pero problema.
Los Spurs sab¨ªan, y se not¨® desde el salto inicial, que ten¨ªan que aprovechar cualquier oportunidad para robar ese factor pista. No les val¨ªa un partido igualado y una derrota con buenas sensaciones. Se trataba de cambiar la temperatura, poner el veredicto en su cubil de Texas y llenar de sombras la mente de un rival que lleg¨® a playoffs tirando en un 32% de tres en los ¨²ltimos 15 partidos y se qued¨® en un 21% despu¨¦s de arrancar en un terrible 1/9. Buenas situaciones de tiro pero demasiados fallos. Por eso Malone puede pensar que el plan de partido era bueno. Y por eso Popovich tiene ya la certeza de que puede llevar a segunda ronda a un equipo que es una de sus obras maestras, y eso es mucho decir para el t¨¦cnico con m¨¢s victorias ya totales entre Regular Season y playoffs (1.413 por las 1.412 de Lenny Wilkens). Era imposible no pensarlo viendo a Bryn Forbes (15 puntos) cargar con el peso del equipo o a Derrick White, su ¨²ltimo invento, abrasar a los Nuggets con una determinaci¨®n a prueba de bombas, 16 puntos, 5 asistencias y una defensa impresionante sellada con un robo final a Jamal Murray que dej¨® sin ¨²ltimo ataque a los Nuggets, que llevaban toda la noche con cara de mal jugador de p¨®ker: si a los cinco minutos no sabes qui¨¦n es el primo, es que el primo eres t¨².
Entre LaMarcus Aldridge y DeMar DeRozan (gan¨® y los Raptors perdieron: cosas) sumaron 33 puntos con 36 tiros. Ni Belinelli ni Mills entraron en racha ni Bertans aprovech¨® los desajustes contra quintetos de su rival con dos interiores puros. No pasa nada excepcional, nada que inclinara las cosas del lado de los Spurs por sorpresa: fue cosa de plan de trabajo, inercia y acierto. Los Nuggets jugaron bien pero fallaron mucho, cada vez m¨¢s inseguros. Su mal inicio en el tiro les puso por detr¨¢s desde el primer cuarto (25-30) y el partido fue ya una tortura constante, siempre a tiro pero nunca por delante. Cada posible punto de inflexi¨®n encontraba respuesta de un rival consciente de sus recursos, colectivo y mucho m¨¢s seguro de sus fuerzas, aunque en total estas puedan ser menos. Quienes pensaban que Jamal Murray dif¨ªcilmente estar¨ªa en nivel de estrella en playoffs, se llenaron de razones (17 puntos pero 8/24 en tiros y 0/6 en triples, ninguna asistencia) aunque el canadiense, eso s¨ª, lo intent¨® todo, alternando canastas corajudas y errores groseros en los ¨²ltimos minutos. Quienes pensaban que los rivales podr¨ªan minimizar a Jokic se quedaran con sus 10 puntos y sus solo 9 tiros (solo tres tiros libres entre ¨¦l y Murray) y no con sus 14 rebotes y 14 asistencias, un triple-doble gestado en pases inteligentes contra una presi¨®n de los Spurs que intent¨® que el bal¨®n estuviera en sus manos lo menos posible.
Todo lo que sucedi¨® estaba dentro de lo que todo el mundo sab¨ªa que pod¨ªa pasar, tambi¨¦n los que menos confiaban en la sorpresa. Ahora a los Nuggets, a los que no les sobra ni un ¨¢pice de confianza, les toca pasar una prueba de verdad seria: sortear ante todo el segundo partido, donde otra derrota ser¨ªa dram¨¢tica, y cazar despu¨¦s al menos un triunfo en San Antonio, el patio de recreo de ese Popovich de sonrisa afilada, casi sarc¨¢stica, que se meti¨® el primer asalto en el bolsillo con el partido jugado de cabo a rabo seg¨²n sus reglas. Y si eso suena a algo que ya hemos visto muchas veces, muchisimas, es sencillamente porque es as¨ª.