Towns y su amigo invisible, la ¨²nica esperanza de los Wolves

Es dif¨ªcil explicar que los Minnesota Timberwolves sean el quinto peor equipo del Oeste tras ver los poderosos promedios y el abanico de virtudes que ofrece Karl-Anthony Towns. El p¨ªvot dominicano fue drafteado hace cuatro a?os como n¨²mero uno por la franquicia de Minneapolis y a d¨ªa de hoy es el l¨ªder absoluto del equipo.

La pasada jornada ante los Pacers firm¨® uno de los mejores arranques de partido en su carrera. En el primer cuarto sum¨® 23 de los 35 puntos de su equipo (y 7 rebotes). El resto de anotadores de los Wolves, en esos doce primeros minutos, se repartieron los 12 tantos restantes a partes iguales: Wiggins, Saric, Teague, Rose, Gibson y Bates-Diop. Un partido que comenz¨® y acab¨® de forma impoluta para Towns (termin¨® con 42+17+4) pero no para el equipo. Los lobos se marcharon de Indiana con su quinta derrota en las ¨²ltimas nueve jornadas, las mismas en la que Towns ha regalado un promedio de 30,8 puntos y 13,8 rebotes por partido.

A pesar de las cifras del p¨ªvot, el equipo dirigido por Ryan Saunders (29-33) solo tiene a Suns, Memphis, Pelicans y Mavericks por debajo y la losa para alcanzar los playoffs es considerable: est¨¢n a 4,5 partidos de Spurs y Clippers, s¨¦ptimo y octavo respectivamente en su conferencia. Ese objetivo solo lo vio cumplido la pasada temporada y el jugador est¨¢ haciendo m¨¦ritos para volver a asistir, pero el equipo no da con la tecla para mantener la regularidad necesaria que requiere competir en este lado de Norteam¨¦rica. Con el balance que mantienen en este momento estar¨ªan octavos en la Conferencia Este pero la realidad es otra. Ahora solo queda que el resto de la plantilla arrime el hombro junto al de Towns. Un hombro en el que el jugador siempre ha encontrado un apoyo incondicional¡­

Karlito, el amigo invisible de Karl-Anthony Towns

Fue en el verano de 2015,?justo antes de comenzar su andadura en la NBA, cuando el propio jugador revel¨® en una entrevista con Mashable que ten¨ªa un amigo imaginario al que bautiz¨® con el nombre de Karlito. Esta especie de ¡®Mini Yo¡¯ del propio Towns le acompa?a sobre su hombro cuando juega a baloncesto, y quien sabe si lo hace en sus momentos m¨¢s complicados.

A¨²n estaba en los Kentucky Wilcats de la NCAA cuando su entrenador por aquel entonces, John Calipari, se dio cuenta de que su mejor jugador comenzaba a hablar solo. "El entrenador me estaba mirando y llam¨® a los otros entrenadores para asegurarse de que no era el ¨²nico que lo ve¨ªa¡±, confirmaba el actual p¨ªvot de los Wolves.

"Casi siempre me dice que contin¨²e tirando y que siga trabajando duro si cometo un par de errores", comentaba el jugador sobre los consejos de Karlito en esa entrevista de 2015, quien tambi¨¦n afirm¨® que le ayudaba a sobrellevar las cr¨ªticas y la exigencia de sus compa?eros y sus entrenadores. Una v¨ªa de escape que le ha servido para cargar con las expectativas depositadas en ¨¦l, y que hasta el momento le est¨¢ funcionando.