MUNDIAL 2018 | AUSTRALIA 56 - 73 ESTADOS UNIDOS
Estados Unidos es la Reina: d¨¦cimo Mundial para ellas
El Dream Team confirma su condici¨®n de equipo invencible y, liderado por dos leyendas, Taurasi y Bird; y su heredera, Breanna Stewart, arras¨® en la final a la Australia de Cambage.
El eslogan del Mundial de Tenerife era "un sue?o compartido", pero reina no hay m¨¢s que una y esa es Estados Unidos, que firm¨® ante Australia, como si de una selecci¨®n oficinista, se tratase su d¨¦cimo t¨ªtulo. Hace tiempo que la federaci¨®n estadounidense, USA Basketball, entendi¨® que la desbandada de jugadoras no era lo mejor para su selecci¨®n y que ganar requer¨ªa de un m¨¦todo que necesitar¨ªa cuidados..., y dinero para las jugadoras. Nada mejor que eso para garantizarse fidelidad a una bandera. La ¨²ltima derrota de Estados Unidos en un gran torneo, Mundial o Juegos, se remonta ya a 2006. De la isla, por supuesto, tambi¨¦n se llevaron el oro del tesoro despu¨¦s de derrotar en una final sin historia (56-73) a la Australia de Cambage, esta vez menos Cambage cuando le toc¨® bailar con la tremenda Brittney Griner, que lleg¨® tocada al Mundial pero ha resultado una ayuda fundamental en los ¨²ltimos tres partidos si es que Estados Unidos necesitaba un plus.
El t¨ªtulo consagra a una pareja de leyenda. Sue Bird y Diana Taurasi ya levantaban t¨ªtulos hace 16 a?os juntas en las Huskies de Connecticut. Luego han ganado, tambi¨¦n compartiendo equipo, cinco Euroligas, cuatro oros ol¨ªmpicos y tres mundiales (Bird tiene un Mundial m¨¢s porque particip¨® en el de 2002 en el que no estuvo la estadounidense de madre argentina). Nunca han coincidido, curioso, en la WNBA. De Connecticut tambi¨¦n sale la Heredera, as¨ª con may¨²scula: a Breanna Stewart quer¨ªan hacerla jugar de p¨ªvot cuando apenas era una ni?a porque ya era muy alta. Pero ella ten¨ªa otros planes. Mejor¨® sus habilidades en el bote y su coordinaci¨®n. Ahora es el prototipo de jugadora moderna y a sus 24 a?os, y ya con dos Mundiales y un oro ol¨ªmpico, amenaza con ser la mejor jugadora de siempre.
Griner, Bird, Taurasi, Stewart¡ Una colecci¨®n de estrellas que adem¨¢s han demostrado una profesionalidad intachable y que han jugado como un reloj todo el campeonato. Sin estridencias, sin shows y con un respeto exquisito al rival. Su comportamiento en la pista ha sido ejemplar. No han humillado al rival y han dignificado el juego. Se van dejando huella en esta isla amable. Quien no haya ido a verlas jugar, se lo ha perdido. Tal vez para siempre. Merec¨ªa la pena. Honores a Estados Unidos, reina del baloncesto.