Cambage, portavoz de la mujer y amante de Barcelona y Gaud¨ª

Elizabeth, Liz, Cambage (Londres, 1991, padre nigeriano y madre australiana) aparece con sus imponentes 2,03 metros por la zona mixta del Quico Cabrera. ¡°Libert¨¦¡±, se lee en el tatuaje que luce en la parte derecha de su cuello (¡°del franc¨¦s libertad¡±), matiza. Otro, con mil traducciones, destaca en su brazo: ¡°God is greater than highs and lows¡± (algo as¨ª como que Dios est¨¢ por encima de todo).

Cambage, arrollador baloncesto y arrolladora personalidad, ha metido 58 puntos en dos partidos del Mundial. ¡°Siento que nac¨ª para jugar al baloncesto. Cuando juego no soy yo, es otra persona. Desconecto¡±. Eso es porque la mente de Liz Cambage va muy r¨¢pido y es capaz de hacer muchas cosas a la vez. Viajera empedernida, conoce Mykhonos o la Gruta Azul en la bah¨ªa de Balun, Croacia. ¡°Aqu¨ª en Tenerife estoy disfrutando del oc¨¦ano, aunque tambi¨¦n quiero ir al volc¨¢n (Teide). Tal vez en alg¨²n d¨ªa de descanso¡­¡±.

Su pasi¨®n por la m¨²sica le ha llevado a conciertos en el desierto de Nevada. Con diez a?os ya tocaba el piano y el viol¨ªn, aunque su debilidad es el rap (su padre, que se separ¨® de su madre antes de que ella naciese, era rapero). Mezcla su propia m¨²sica y ha tenido el honor de que uno de los m¨¢s grandes, Drake, le mencionase en una de sus canciones del ¨¢lbum Astroworld.

Cambage tiene su propia l¨ªnea de moda. Lectura, m¨²sica y moda ocupan, pues, su tiempo fuera del baloncesto: ¡°Me inspiran¡±. Cambage nos descubre otras dos pasiones: el arte y Barcelona: ¡°He estado varias veces all¨ª. Barcelona es una ciudad alucinante. Me encanta su arquitectura, especialmente la de Gaud¨ª. He ido tambi¨¦n al museo de Dal¨ª (en Figueras). Amo Barcelona, es una de las mejores ciudades en las que he estado¡±.

La vida de Cambage no fue sencilla. Separados sus padres, su madre Julia volvi¨® a Australia. Durante unos a?os vivi¨® con su abuela Aileen pero luego su madre volvi¨® a mudarse a Melbourne. All¨ª vivi¨® en el suburbio de Abbotsford y sufri¨® ser una de los dos ¨²nicos chicos de color de su escuela. Llegaba llorando a casa. Ahora confiesa que eso le hizo m¨¢s fuerte.

Cambage, la primera mujer que hizo un mate en unos Juegos Ol¨ªmpicos, admiti¨® vivir episodios de depresi¨®n y ansiedad entre 2011 y 2017 y no encontr¨® la ayuda que necesitaba hasta 2015. Despu¨¦s de a?os en los que renunci¨® voluntariamente a la WNBA, ahora es una de sus grandes figuras. Este curso ha estado en el cinco ideal y ha establecido un r¨¦cord de anotaci¨®n en la competici¨®n: 53 puntos. Convertida ya en estrella, est¨¢ dispuesta incluso a renunciar a patrocinios millonarios en Australia para reivindicar la mejora de las condiciones de la mujer en la WNBA.

Cambage ha denunciado que el salario m¨¢ximo sea s¨®lo de 113.000 d¨®lares cuando suplentes en plantillas de la NBA cobran cifras de siete y hasta ocho d¨ªgitos. Pide que las condiciones en los viajes sean mejores y que la competici¨®n se alargue para evitar la fatiga y las lesiones. Pero todo eso ser¨¢ despu¨¦s de este Mundial: ¡°Uno de mis mejores recuerdos es el bronce en Londres. Por eso quiero m¨¢s medallas. ?Ganar a Estados Unidos? Cualquier cosa es posible en un d¨ªa determinado. Espa?a tambi¨¦n tiene una gran selecci¨®n. Torrens, Marta (por Xargay) son grandes jugadoras. Y conozco al entrenador, estuvo en China como yo. Es realmente bueno y nos pueden ganar¡±. Terremoto Cambage es arrolladora.