Un Salgado genial fue el verdugo de su 'querido' Estudiantes
Su direcci¨®n y el entusiasmo de Thomas desatascaron un pulso que domin¨® el cuadro colegial 30 minutos, pero las faltas de Landesberg y el ¨²nico argumento del triple le condenaron.


La garra de un jugador de bajo perfil como Thomas, que casi justific¨® el fichaje, y la direcci¨®n de un Salgado que volvi¨® a ser el chaval de 10 a?os atr¨¢s, superaron un partidazo de Landesberg. Cuatro faltas de ¨¦ste cuando se coc¨ªa el choque condenaron a un Estudiantes que no estuvo entero en la resoluci¨®n tras 35 minutos de dominio. Es curioso, un director de juego al que muchos daban por acabado y un p¨ªvot que no lo parece se llevaron los honores. El orgullo del equipo, oculto durante semanas, encandil¨® y Miribilla se pareci¨® de nuevo a Miriilla (segundo triunfo en casa este a?o, que es una locura, y primero en Liga desde octubre). Gan¨® el Betis y para el Bilbao Basket era cuesti¨®n de vida o muerte. Encadena dos triunfos, uno de ellos europeo, y ve algo de luz m¨¢s all¨¢ el t¨²nel en el drama del descenso. Otro compromiso cl¨¢sico en el que deciden los detalles y estos fueron vizca¨ªnos. Y eso que las bajas de Tabu y Pere Tom¨¤s son mucha ausencia.
Ambos contendientes son transparentes en cuanto al estilo: el Bilbao Basket juega ahora a estudiar durante 23 segundos en campo enemigo y resolver al filo de la guillotina del bocinazo. Por eso cuando sali¨® Salgado, maestro del funambulismo con el crono, el equipo dio el estir¨®n, en el segundo cuarto; y ya nada le detuvo: con su luminosa presencia en pista +24. Tambi¨¦n cogi¨® la batuta un Fischer en buena anotaci¨®n. Sigue teniendo tal irregularidad este equipo que entra y sale de la v¨ªa buena y amaga con descarrilar al pensar en la mochila que lleva encima. Pero en el momento actual acumula soluciones. Como Todorovic en balones calientes (13 puntos plenos de decisi¨®n en el cuarto final). O los rebotes de Hervelle, que recobra f¨ªsico (a todos se les ve otro brillo). Ya no solo se depende de Mumbr¨², que deshizo el empate con Herreros y se coloc¨® como el sexto jugador que m¨¢s partidos ha disputado en la Liga ACB: 655. Mientras, el Estudiantes tiene criterio a la hora de mover el bal¨®n y llevarlo al rinc¨®n preciso, sus jugadores se mueven bien y buscan la espalda de la defensa; pero lo principal es llegar y buscar el triple. Es su se?a de identidad y a veces les condena, porque en baloncesto es muy dif¨ªcil ganar solo con un arma. Lo que nadie contaba es con el desplome final, como los castellers mal encajados (hubo una exhibici¨®n en el descanso, por cierto). Y el debate entre los rasgos de uno y los del otro se mantuvo hasta los cinco minutos finales, en los que no hubo discusi¨®n, con el drama de que el derrotado sentir¨ªa un poco m¨¢s cerca el precipicio de la clasificaci¨®n.?
Al Estu le hicieron sentirse c¨®modo las p¨¦rdidas del Bilbao: cinco en cinco minutos. Un RETAbet que estaba agarrotado de saque, aunque ven¨ªa con el alivio de un triunfo en Belgrado que rompi¨® una racha de nueve derrotas consecutivas. Una jugada visitante pas¨® por las manos de cuatro jugadores en un santiam¨¦n, con Cook cediendo al 'cinco' Savan¨¦, que de primeras entreg¨® a Caner-Medley y ¨¦ste a Vicedo: 13-24 a falta de 1:39 para cerrar el primer acto. Una delicia. Con Salgado lleg¨® el baloncesto al l¨ªmite. Dos canastas tripes al filo del final de posesi¨®n m¨¢s otra de dos de Redivo en penetraci¨®n iluminaron un parcial de 13-2. As¨ª que la m¨¢xima ventaja madrile?a de 11 puntos se ahog¨® con el empate a 28 a 4:13 para el descanso.
La salida del Bilbao tras el descanso fue a fuego. Con antorchas y dinamita. Un dos m¨¢s uno de Fischer y una penetraci¨®n de Redivo le dieron la primera ventaja del partido con un minuto absorbido en ese acto: 41-39. Pero el Estu se recompuso como si tal cosa y en tres minutos y medio meti¨® diez puntos para dejar el asunto bajo su gobierno nuevamente, de la mano de un Landesberg que es un lujo para esta Liga: 14 tantos empaquet¨® en el tercer cuarto. La cuarta personal del alero con nacionalidad israel¨ª a falta de 8:27 cambi¨® el panorama. Al Estu se le fue la luz. Otra vez volvi¨® el Bilbao Basket y lider¨® el partido a falta de 5:55 con un tiro de Hervelle a media distancia: 68-67. Caner-Medley tom¨® las riendas de su amigo Landesberg, pero no es lo mismo, mientras Thomas, un p¨ªvot bajito de perfil modesto pero bullicioso, ofrec¨ªa detalles y garra contagiosos a dos metros del aro. Tiene ah¨ª mejores recursos que Gladness (solo un tiro y su presencia fue testimonial en el segundo tiempo). Vamos, que deja el bal¨®n con m¨¢s suavidad. El final era un cara o cruz. Maldonado puso a Landesberg para los tres minutos finales. Pero el Bilbao se hab¨ªa proyectado con p¨®lvora suficiente, la de Salgado, rey de Miribilla. "Los ex siempre est¨¢n esperando a su equipo para reivindicarse", explic¨® el t¨¦cnico colegial. Desde luego. En esta era del m¨²sculo, el talento demuestra que no tiene fecha de caducidad. El Consejo de Administraci¨®n tendr¨¢ ma?ana (19:00 horas, hotel Ercilla) una Junta m¨¢s dulce.