Revoluci¨®n verde: Dragic, Doncic y Eslovenia, campeones

El cuento de hadas de Eslovenia tuvo final feliz. La selecci¨®n a la que nadie esperaba en este Eurobasket y que apareci¨® de puntillas por Helsinki se proclam¨® campeona por primera vez en su historia en Estambul al vencer a Serbia en un desenlace sorprendente de la final, con sus dos estrellas en el banquillo. Doncic estaba KO, lesionado en un tobillo. Dragic, un cicl¨®n en la primera parte, hab¨ªa pasado de ¨¢ngel a demonio. Estaba exhausto y cegado. Su t¨¦cnico, Igor Kokoskov, demostr¨® una personalidad tremenda, sent¨® al jugador de los Heat y apoyado en Randdolph y Prepelic contuvo una remontada Serbia que parec¨ªa inevitable. No fue as¨ª. Eslovenia, el pa¨ªs de los dos millones de habitantes, consum¨® la revoluci¨®n verde y es la nueva reina de Europa con baloncesto trepidante.

Kokoskov le ha quitado las cadenas a un grupo que durante a?os vivi¨® acomplejado y al que se acus¨® de falta de car¨¢cter. Aquello ha virado en un grupo valiente hasta el extremo que ni siquiera se asust¨® cuando el ogro serbio llam¨® a su puerta y se adelant¨® en el ¨²ltimo cuarto. La obra de Djordjevic, que acab¨® el partido persiguiendo a los ¨¢rbitros por la l¨ªnea de banda, completamente fuera de s¨ª, permanece incompleta. Subcampeona mundial, ol¨ªmpica y europea, perdi¨® su tercera final en cuatro a?os. Pero hay que poner en valor un trabajo realizado sin estrellas de la talla de Teodosic, Jokic, Raduljica, Nedovic o Bjelica. Fue una final bell¨ªsima que termin¨® con Doncic cojo pero en campe¨®n. Con 18 a?os, asoma un monstruo del baloncesto.

Pasaron much¨ªsimas cosas en la primera parte pero todas se las llev¨® por delante el tornado Goran Dragic. Encendido, desatado, sin defensa posible, anot¨® 26 puntos para Eslovenia ante el delirio del respetable, que lo acompa?aba con gritos de ¡°MVP, MVP¡± cada vez que se acercaba a la l¨ªnea de tiro libres. Eslovenia hizo 56 puntos en la primera parte. Eso de la especializaci¨®n de t¨¦cnicos en la NBA no debe ser nada superficial. Igor Kokoskov, serbio que jugaba contra sus ra¨ªces, es uno de los ayudantes m¨¢s respetados de toda la liga profesional estadounidense. Por algo, sin duda.

Para llegar a los 56 puntos hizo falta algo m¨¢s que la mu?eca angelical de Dragic. Klemen Prepelic result¨® providencial con sus triples en momentos claves y Doncic se marc¨® una de las jugadas del campeonato con un coast to coast m¨¢gico que remat¨® con un mate devastador que puso en pie a su padre, que ve¨ªa el partido de inc¨®gnito en la segunda fila de la tribuna de periodistas. No se puede decir que Serbia no probase cosas. Para empezar, jug¨® con uno menos. Jovic no estaba en plenitud. Luego, intent¨® hacer da?o con sus interiores, Marjanovic y Kuzmic. Bogdanovic estuvo a tono y Lucic, Bircevic, Macvan y Guduric se fajaron. Djordjevic miraba con cara de pocos amigos a Patrick Baumann, secretario general de la FIBA, por las decisiones de Maranho, Sahin y el espa?ol Conde, lo mejorcito que ten¨ªa el organismo despu¨¦s de vetar a los ¨¢rbitros de Euroliga. Eslovenia se march¨® al descanso 56-47. Si manten¨ªa ese caudal anotador, ten¨ªa el t¨ªtulo en el bolsillo.

Aparecen Prepelic y Randolph

La temperatura subi¨® en el tercer cuarto. El Sinan Erdem Spor Salonum recalentado. Los jugadores, a tope de revoluciones. El padre de Doncic ya no soportaba ni un segundo m¨¢s en la tribuna de prensa y, cuando m¨¢s espeso estaba el partido, vio c¨®mo su hijo Luka se lastimaba el tobillo despu¨¦s de ir a taponar un tiro de Macvan. Para entonces, Eslovenia ganaba 63-55 (minuto 25). En dos minutos y medio, y con Djordjevic metiendo a Stimac para encender a¨²n m¨¢s los ¨¢nimos, Serbia se acerc¨® a s¨®lo dos puntos (63-61). Kokoskov pidi¨® un tiempo muerto adecuado y fren¨® la sangr¨ªa. Sin Doncic ya fuera de la pista, con la zapatilla quitada, la final del Eurobasket se fue al final del tercer cuarto 71-67. Ganar¨ªa el coraz¨®n.

A falta de Doncic y con Dragic m¨¢s controlado, a Eslovenia ni siquiera le fallaron los jugadores de rotaci¨®n. Blazic y Nikolic lideraron en el principio del cuarto su anotaci¨®n. Dragic, cansado, empez¨® a fallar. Punto a punto, Serbia estaba creciendo. 77-76 en el minuto 35 y dio el sorpasso poco despu¨¦s con Macvan crecido (77-78). Eslovenia estaba confundida. Entonces Kokoskov hizo su jugada maestra del campeonato. Mand¨® a Dragic al banquillo y se puso en manos de Prepelic y Randolph. Se hab¨ªa consumado la revoluci¨®n verde.