Carroll, Ay¨®n, Doncic, Llull¡­ el Madrid se levanta a lo grande

No hubo tercer taz¨®n de sopa agria. Los blancos hab¨ªan bebido caldo avinagrado en la derrota del viernes, pero tambi¨¦n en el primer partido, donde ganaron. Esta vez el Madrid sali¨® con todo (Doncic junto a Llull en el quinteto) y a por todas. Centrad¨ªsimo, equipado incluso con mirada asesina, la de Randolph. Fue como si viera a la Final Four escaparse por la ventana tras un curso inmaculado en Europa y reaccionara. Se lanz¨® para agarrarla al vuelo y¡­ la enganch¨® a tiempo. De momento, y no sin sufrir.

Todas las manos posibles hacia el mismo objetivo. Un gran equipo. Recupera el factor cancha y se guarda as¨ª el comod¨ªn de un quinto duelo en Madrid como mal menor. Dej¨® tocado al Darussafaka, a su gente, y tiene este viernes una gran ocasi¨®n de adelantar los deberes, de ahorrarse disgustos. Pero tendr¨¢ que repetir actuaci¨®n mod¨¦lica, la de la primera parte, donde movi¨® la batalla de escenario. El Darussafaka pen¨® en ataque ante una fant¨¢stica defensa, incluida una zona 1-2-2 que mutaba luego en individual con cambios continuos si hab¨ªa bloqueos. Todo para asfixiar su venenoso uno contra uno. Doncic agarr¨® las emociones del ¨²ltimo d¨ªa y se levant¨® a lo grande. El Real circul¨® bien el bal¨®n y lanz¨® mejor. Randolph completaba junto a Llull el tri¨¢ngulo letal y Ay¨®n hac¨ªa una buena labor. El rebote era blanco y lo fue toda la noche.

Pero se sentaron, y los refuerzos no bajaron el nivel. A su modo. El list¨®n de la defensa segu¨ªa alt¨ªsimo, aunque con el bal¨®n en las manos lleg¨® el atasco. Lo desatranc¨® el mejor Carroll. Tres triples en el segundo cuarto, y dos m¨¢s en el tercero. La brecha toc¨® los 18 puntos (37-55) y un tit¨¢nico Ay¨®n fren¨® el primer arre¨®n de los de Blatt. Y ya eran +19: 49-68. Parec¨ªa hecho; solo lo parec¨ªa.

El p¨²blico calmado rugi¨®, casi se met¨ªa en la pista, Kutluay el primero (ca?onero de lujo y actual directivo del Darussafaka). La presi¨®n ambiental, ahora s¨ª una cancha turca en toda regla, se colg¨® de la chepa de los ¨¢rbitros. Nos record¨® a la final ante el Olympiacos de 2013. Pero este Madrid es m¨¢s maduro, ya est¨¢ hecho, y respondi¨®. Padeci¨®, pero gan¨®. Lo hizo ante Zizic, baluarte local al que se le a?adieron en el ¨²ltimo acto Wilbekin y un Wanamaker que sumaba falta tras falta. Desatados casi obran el milagro: 74-77. Un 2+1 providencial de Doncic, m¨¢s la brega de Ay¨®n y dos tiros libres de Carroll sacaron el abanico. No corr¨ªa una gota de aire. Llull sentenci¨®. Dos canastones y hasta pasado ma?ana. El Madrid campe¨®n frente a un rival enorme.