CHARLOTTE HORNETS 114-SAN ANTONIO SPURS 119
Los Spurs de Pau Gasol igualan su mejor inicio hist¨®rico fuera de casa: 8-0
El imparable rodillo sigue sumando. Kawhi, 'el cirujano', se fue hasta los 30 puntos. Tony Parker fue clave en el final. Cavaliers vs Warriors: 4? partido Final NBA
Es dif¨ªcil explicar c¨®mo ganan los Spurs a quien no ha visto el partido. Ganan como siempre y como nunca. Como viene siendo habitual este a?o, los de Popovich perdieron un buen n¨²mero de estad¨ªsticas que suelen decantar partidos (porcentaje desde el triple, -10 en los rebotes y -20 en puntos en la pintura). Pero como siempre en las ¨²ltimas 20 temporadas, terminaron llev¨¢ndose la victoria. Porque eso son los Spurs desde que el t¨¦cnico nacido en East Chicago lleg¨® a la franquicia: un equipo que evoluciona, que muda de piel, pero siempre con el triunfo entre ceja y ceja. Con el triunfo como forma de vida. Es algo cultural ya en San Antonio: sales ah¨ª fuera y ganas. Punto.
Los Hornets no cayeron sin luchar (ocho puntos de m¨¢xima diferencia, 16 empates, 32 cambios de liderato). Kemba Walker, que hab¨ªa tenido un partido discreto durante los tres primeros cuartos perseguido por Danny Green (Popovich escondi¨® a Parker y a Mills bajo la sombra ofensiva de Michael Kidd-Gilchrist), se solt¨® la inexistente melena en el ¨²ltimo tramo, encadenando canastas para mantener a su equipo en la pugna e incendiando a la grada con una jugada de cuatro puntos. Pero, como casi siempre contra los hombres de negro, no fue suficiente. Como tampoco lo fueron los siete Hornets en dobles d¨ªgitos.
No lo fue porque?Pau Gasol estuvo muy serio (sin errores, distribuyendo: siempre inteligente), porque LaMarcus Aldridge?se dio cuenta de que si bajaba la cabeza contra los 'cuatros' bajitos anotaba, porque Danny Green meti¨® sus dos tiros m¨¢s importantes del partido, porque Tony Parker es un gran veterano (un par de robos clave y siete puntos para sentenciar el choque en los ¨²ltimos segundos) y, sobre todo, porque un tipo llamado Kawhi Leonard juega muy bien al baloncesto.
El alero, que pese a las barbaridades num¨¦ricas de otros deber¨ªa ser considerado como uno de los grandes candidatos al MVP, no falla nunca. Quiero decir: lo hace todo bien. Puede fallar en la ejecuci¨®n (no suele), pero el proceso es perfecto. Ni un tiro malo, ni un mal pase, ni un despiste en defensa. Cuando ¨¦l coge el bal¨®n hay dos velocidades, la real y la de su cabeza. Lo ve todo claro, sin prisas. Juega con la calma y la compostura del m¨¢s inteligente y ejecuta con la precisi¨®n del mejor cirujano. Te mide con la cadera, saca espacio con sus hombros (suficiente) y te mata desde seis metros sin que puedas hacer absolutamente nada. Al final, 30 puntos de superestrella, que es lo que es.
Kawhi, los tiros libres (mejor porcentaje de la Liga) y la ejecuci¨®n en los momentos clave son las grandes bazas de unos Spurs que cada vez se encuentran m¨¢s c¨®modos en su nueva piel. Los problemas en defensa siguen siendo evidentes (114 puntos encajados...), pero con 12-3 y 8-0 fuera de casa (igualan su mejor inicio hist¨®rico a domicilio), algo me dice que no andar¨¢n muy preocupados por ahora. Cambiar¨¢n, ajustar¨¢n y seguir¨¢n ganando. Al fin y al cabo, eso son los Spurs. Lo llevan en el ADN.?