En su af¨¢n por conseguir agentes libres de gran nivel, los de Mark Cuban han cazado dos nombres de importancia este a?o con Harrison Barnes y Andrew Bogut. Ambos ser¨¢n titulares indiscutibles desde el principio, pero ambos presentan una serie de dudas razonables que ponen todo el equipo en entredicho. Por parte de Barnes, se ha llevado 94 millones de d¨®lares por los pr¨®ximos cuatro a?os. El precio es desorbitado incluso en el contexto de la hiperinflaci¨®n actual. Se le ha pagado por potencial mucho m¨¢s que por realidad y lo cierto es que en la situaci¨®n en la que est¨¢n los Mavs ahora mismo, sin atractivo competitivo, es una apuesta que deben hacer porque las grandes estrellas de verdad no van a acudir a la llamada.
Barnes cargar¨¢ sobre sus hombros no s¨®lo una muy necesaria mejora defensiva del grupo, con un Nowitzki que siempre fue una calamidad en ese aspecto pero que ahora ya resulta hasta bochornoso, sino que tambi¨¦n tendr¨¢ que aportar en ataque. El caso de Bogut nos remite a problemas f¨ªsicos. No tengo ninguna duda de que sano y al 100% estamos hablando de una suma monumental para este equipo. Su capacidad para proteger el aro y para mover el bal¨®n admite pocas comparaciones. Pero es que es muy dif¨ªcil imaginarle sin problemas f¨ªsicos, porque no lo ha estado casi nunca y seg¨²n avanza su edad, mucho menos.
Los bases tampoco ofrecen garant¨ªas. Deron Williams, Devin Harris y J.J. Barea son veteranos, est¨¢n lejos de su mejor nivel y tendr¨¢n que andar persiguiendo a toda la chavalada que pulula por la liga en la posici¨®n y que son absolutas centellas. Wesley Matthews les acompa?ar¨¢ en el exterior. En general, se trata de una plantilla con boquetes notables, sobre todo en defensa, y que depende de jugadores veteranos con problemas recurrentes de lesiones. Mala mezcla.
Carlisle es uno de los mejores entrenadores de la NBA. Tanto su gesti¨®n del vestuario como su direcci¨®n t¨¢ctica son de sobresaliente. M¨¢s a¨²n en partidos igualados o en series de playoffs aunque, por desgracia para ellos, es algo que de poco les vale en la actualidad.
La estrella: Dirk Nowitzki
El extraordinario jugador alem¨¢n se va a apagando y con ¨¦l una racha fant¨¢stica de un equipo perenne en los playoffs del Oeste y en la parte alta de las clasificaciones. S¨®lo nos queda seguir disfrutando de su enorme talento el tiempo que podamos.
