Mavericks: una ¨²ltima copa a la salud de Dirk Nowitzki
Los Mavs saben que el tiempo de su estrella se acaba y le siguen regalando temporadas de alto nivel competitivo... pero sin aspiraci¨®n de anillo.

Tim Duncan, Kobe Bryant, Kevin Garnett, ahora Paul Pierce, muy probablemente Manu Ginobili¡ ?notas algo en especial, Dirk Nowitzki?
Es muy dif¨ªcil tener m¨¢s cari?o y respeto por un jugador que el que se tiene por el alem¨¢n de los Mavericks en esta liga. No conozco a un solo aficionado al que le caiga mal, que quiera que le vaya de pena o que desee que pierda con todas su fuerzas. Es el prototipo de individuo que es gracioso, inteligente, educado, querible¡ ah, s¨ª, y un fascinante jugador de baloncesto que ha marcado a toda una generaci¨®n de espectadores. Am¨¦n de un asesino inmisericorde.
Antes de Dirk no exist¨ªan los cuatro como ¨¦l. Despu¨¦s, tampoco. No se trata s¨®lo de estar en una posici¨®n interior en la que la amenaza m¨¢s importante es el tiro exterior, no, que de eso s¨ª que hemos tenido, y tendremos, en abundancia. Se trata de sus incre¨ªbles habilidades desde la altura que las ejecuta y como cre¨® un tiro indefendible: el fade away con la pierna levantada.
Ese tiro, esa se?a de identidad, entra o no entra, pero rara vez tiene nada que ver con la oposici¨®n. En ese sentido, se parece al sky hook de Kareem Abdul Jabbar, sin duda el lanzamiento m¨¢s indefendible de la historia del baloncesto. Cuando creas tu propio tiro, cuando en todas las canchas del mundo cuando alguien lo imita todo el mundo exclama ¡°?Dirk!¡± es que has ganado. Por completo. Has ganado el baloncesto.
Pero todo se acaba, y nuestro Nowitzki se acaba.
Hay que aplaudir a Mark Cuban que durante los ¨²ltimos a?os no haya arrojado la toalla. Sabiendo que la mayor estrella que ha tenido jam¨¢s su equipo se va apagando ha querido regalarle unas ¨²ltimas temporadas en las que competir y estar arriba, en las que ser alguien relevante. Por eso se ha pasado los veranos persiguiendo grandes agentes libres. Pero, por desgracia para ellos, fallando una vez tras otra. No tanto como para ser irrelevantes, correcto, aunque sin en el punch necesario para ser aspirantes a anillo. Ni siquiera a poner en apuros a los grandes.
Este verano ha vuelto a suceder, y se han llevado piezas nada desde?ables, as¨ª que volveremos a ver a los Mavs de las ¨²ltimas campa?as: decentes, dignos, con victorias, probablemente en playoffs, pero sin nada que hacer ante los grandes equipos. Que sea una m¨¢s, que sea una m¨¢s antes de pensar en la reconstrucci¨®n, que lo sea por Dirk Nowitzki.