Plata dulc¨ªsima para Espa?a

Como avanz¨® Laura Nicholls el jueves, la Selecci¨®n espa?ola de baloncesto firm¨® en el ya inolvidable Carioca Arena la medalla de plata m¨¢s dulce de unos Juegos Ol¨ªmpicos. Podr¨¢ haber platas igual de felices, pero no m¨¢s. Espa?a entr¨® en la historia y, una vez acabada la final en la que disfrut¨® y compiti¨® hasta donde pudo con la inalcanzable Estados Unidos (72-101), entr¨® oficialmente en el libro de historia ol¨ªmpica como medalla de plata de baloncesto femenino en R¨ªo de Janeiro 2016. Leticia Romero, Laura Nicholls, Silvia Dom¨ªnguez, Alba Torrens, Laia Palau, Marta Xargay, Leonor Rodr¨ªguez, Luci Pascua, Anna Cruz, Laura Quevedo, Laura Gil y Astou Ndour. Las doce chicas que, junto a Lucas Mondelo y su grupo de ayudantes, deben quedar registradas con merecimiento para que, cuando los a?os nos lleven a otras glorias ol¨ªmpicas si es que llegan, ojal¨¢, nadie olvide lo que hizo este grupo fabuloso que ha tocado el cielo.

Estados Unidos, como defini¨® sencillamente Lucas Mondelo, ten¨ªa a las doce mejoras jugadoras del mundo. Ninguna de las grandes estrellas de la WNBA, al contrario que en alg¨²n caso de los chicos, desert¨® de la cita de R¨ªo. Todas quisieron estar para firmar el sexto oro ol¨ªmpico consecutivo de su pa¨ªs. El octavo en su historia. Estados Unidos, la selecci¨®n de ensue?o de Geno Auriemma, lleva 49 partidos ol¨ªmpicos sin perder. Para que se hagan una idea del gigante al que llegaron a medirse las chicas de Mondelo, su r¨¦cord ol¨ªmpico es de 66 victorias y s¨®lo tres derrotas.

Espa?a, mientras, ya saboreaba la plata desde el jueves, cuando se emocionaron en el vestuario, cantaron al ritmo de Skap ¡°El vals del obrero¡± y se fueron a cenar y celebrarlo y animar a los chicos en su compromiso con Estados Unidos. Sin embargo, quisieron competir. Alba Torrens confirm¨® en el primer cuarto su condici¨®n de estrella europea con un recital de canastas que tuvo a Espa?a unos minutos por delante. Hasta el minuto 10 (19-17), Estados Unidos no tom¨® la iniciativa definitiva en el marcador. Ndour, un diamante, tambi¨¦n mantuvo a la selecci¨®n en el partido y sorprendi¨® incluso con triples. Era la consigna de Mondelo: jugar a atacar a Estados Unidos. Pero fue imposible. Las rotaciones estadounidenses rompieron el partido antes del descanso (49-32) y hubo que rendirse a las Taurasi, Bird, Whalen, Moore. Espa?a estaba a otra cosa. Y a otra fiesta. Fue la plata m¨¢s dulce que probar¨¢n en sus vidas. ?