El Bilbao castiga por dentro al Fuenla y vuelve a zona playoff

Tres p¨ªvots se colaron en la fiesta de Marko Todorovic. Bogris y Begic, los que supone que le cierran la puerta del cinco. Y Hervelle, que se acerca a su techo como baloncestista profesional. El p¨ªvot griego no entr¨® el a?o pasado en el cinco ideal de la ACB ni su salario se acerca, ni de lejos, al contrato gal¨¢ctico por tres a?os del montenegrino en el Khimki. Y el esloveno se pega por destacar estos meses para rebuscar una oferta potente el curso pr¨®ximo. La llegada de otro poste, el cuarto de la plantilla, ha activado lo que Sito Alonso denomin¨® ¡°alarmas¡± entre todos los grandes de Bilbao. La sirena que despierta a los aletargados. Pues su estridente ruido debi¨® escucharse hasta en el pa¨ªs de la Acr¨®polis. El juego interior del Dominion, el de siempre, el que ya estaba en casa, resolvi¨® la papeleta ante el Fuenlabrada, que cedi¨® hasta el ¡®average¡¯ (+4) en un partido en el que nunca pudo igualar la agresividad que exhibe ahora el anfitri¨®n de Miribilla y, por tanto, no se crey¨® con opciones de ganar a un equipo que, ahora s¨ª, se ha hecho fuerte en casa. Los vizca¨ªnos regresan a la zona playoff y se ponen a un triunfo, con el ¡®average¡¯ a favor, del Montakit.

En la presentaci¨®n de Marko, la platea cerr¨® filas para tributar una calurosa ovaci¨®n. Lo curioso es que luego el Todorovic que sali¨® de inicio fue el otro, Dejan, con la idea de tener m¨¢s piernas en defensa y con la consigna de castigar por dentro, principalmente con situaciones de Begic al poste. As¨ª, 26 de los 43 puntos de los locales al descanso los hab¨ªan facturado entre Bogris, Begic y Hervelle. El alero cedido por el Unicaja figur¨® de inicio por las molestias musculares de Bertans y lo hizo muy bien, metiendo el f¨ªsico y el ritmo que hac¨ªan falta. La tercera falta de Tabu en el Fuenla a los 15 minutos (la segunda lleg¨® nada m¨¢s salir a pista y cort¨® el ritmo fuenlabre?o) desnort¨® un tanto a un equipo al que le fall¨® el punto de mira y le hizo ir a contracorriente toda la velada. Fue un encuentro pl¨¢cido, agradecido, para una Miribilla entregada, aunque los ¨¢rbitros se empe?aron en interferencias inexplicables con pasos por doquier y decisiones que nadie ve¨ªa. A Sacrist¨¢n le pudo un extra?o af¨¢n de protagonismo. Bertans, que no estaba bien f¨ªsicamente y apenas encontr¨® la br¨²jula: fue castigado con una t¨¦cnica a falta de ocho segundos del final del primer tiempo.

El Bilbao hizo la primera parte del plan: sacar del campo al rival con su impecable agresividad defensiva, llevando las penetraciones a un callej¨®n sin salida para luego robar la bola cuando sal¨ªa a la periferia del aro. Los tiros eran un carrusel de errores en el Fuenla y s¨®lo faltaba por saber si se har¨ªa muy largo otra vez el partido al Bilbao. Porque el grupo de Cuspinera recuper¨® un poco el estilo con el regreso de una pieza fundamental como Popovic; a falta de 8:49 se puso a ocho (63-55) y tuvo opciones de entrar en el debate. ?lex Urtasun encontr¨® buenas posiciones de tiro. Pero Ra¨²l reuni¨® al grupo, que le rode¨® y puso las cosas en su sitio de nuevo. Marko Todorovic, inscrito ayer casi sobre la bocina, presenci¨® el espect¨¢culo sentado durante 24 minutos. Estaba pasando el esc¨¢ner sobre los v¨¦rtices de un juego que le suena mucho. Sito Alonso aludi¨® a que lo puso en pista (con 50-35) ¡°para que el p¨²blico reconociera lo que hizo el a?o pasado, porque con la eliminatoria del Valencia casi ni se pudo¡±. El caso es que con aire despistado, le cay¨® un rebote de esos de im¨¢n en las manos en la zona visitante y firm¨® en seis minutos dos puntos y tres rechaces para seis de valoraci¨®n. Pero en su fiesta los que se llevaron los flashes fueron otros.