Tanking: ha llegado la hora de empezar a perder partidos
La conveniencia de sumar derrotas con el draft en mente sigue centrando debates en la NBA. Pero ni todos los que pierden lo practican ni los resultados est¨¢n garantizados... </br><a title="Warriors vs Cavs" href="https://us.as.com/us/2018/06/08/masdeporte/1528491887_299349.html">Final NBA: Warriors vs Cavs, juego 4</a>


En el diccionario de la NBA, aunque sea filos¨®ficamente reprobable y todos se pasen la vida diciendo que no lo hacen mientras lo hacen, nunca deber¨ªa faltar el t¨¦rmino tanking: perder a prop¨®sito en versi¨®n cruda, no hacer todo lo que se podr¨ªa hacer para ganar en una m¨¢s edulcorada. El reverso tenebroso de un sistema de competici¨®n en muchas cosas m¨¢s equitativo que el europeo, una mancha fea en la imagen de la liga o un fraude imposible de combatir mientras las soluciones (las hay: se plantean en goteo constante) no mejoren de forma evidente el entramado actual por el que los peores equipos eligen a los mejores jugadores del siguiente draft: los catorce que no entran en playoffs van a la loter¨ªa y eligen en funci¨®n de un sorteo en el que se tiene m¨¢s opciones de llevarse el n¨²mero 1 cuantos m¨¢s partidos se hayan perdido. Despu¨¦s se ordenan los otros 16 equipos de forma descendente (el mejor para el final) hasta completar los 30 que eligen en dos rondas.
El tanking existe. Los equipos tantean aunque est¨¦ feo. Los equipos: no los jugadores. Las franquicias. Los jugadores juegan para ganar pero son las franquicias las que llevan al proyecto deportivo a situaci¨®n de no ganar. A veces desde el arranque de la temporada con la planificaci¨®n en los despachos. Otras sobre la marcha y con la aquiescencia del cuerpo t¨¦cnico. Si hace falta, en partidos puntuales. Traspasos sospechosos, rotaciones condicionadas, bajas por lesi¨®n que se alargan demasiado, finales de partido con decisiones estramb¨®ticas¡ porque es lo mejor para la reconstrucci¨®n, porque todo sale mal y a la temporada no le queda nada m¨¢s que rescatar, porque desde la Universidad asoman jugadores generacionales, simplemente buen¨ªsimos o que encajan como un guante en eso que necesitas y que no hay maldita manera de conseguir en el mercado. Porque se opera desde un mercado peque?o o porque las estrellas cambian de aires y rompen corazones¡ el tanking existe. Y estos son algunos de los ejemplos m¨¢s significativos de la historia de la NBA, por escandalosos o por eficaces:
-El draft de 1984 fue el ¨²ltimo sin loter¨ªa. Una moneda al aire decid¨ªa qui¨¦n eleg¨ªa primero entre los dos peores equipos de la Temporada Regular y Houston Rockets se dej¨® ir descaradamente porque daba igual ser primero que segundo: estaban por ah¨ª Olajuwon y Michael Jordan. El caso es que, ya se sabe, los Blazers le dieron el dos a Sam Bowie y envolvieron en papel de regalo a Michael Jordan con destino Chicago.
-Sobre la temporada 1996-97 se alarg¨® la sombra de Tim Duncan. Tras una grave lesi¨®n de David Robinson, los Spurs se quedaron en manos de un Dominique Wilkins veteran¨ªsimo y se llevaron el 1 y al ala-p¨ªvot. El resto es historia. Otros equipos lo intentaron con menos suerte. Los Celtics, por ejemplo. De hecho ten¨ªan dos picks que acabaron siendo el 3 y el 6. Pero se los dieron a Chauncey Billups, que triunf¨® mucho despu¨¦s fuera de Boston, y Ron Mercer. El n¨²mero 9 fue Tracy McGrady.
-En 2003 todo el mundo quer¨ªa a LeBron James. Especialemente el equipo de su Cleveland natal, unos Cavaliers que adem¨¢s rumiaban el cambio de due?o que sobrevino despu¨¦s. El que era propietario, Gordon Gund, lo neg¨®. Pero el entrenador John Lucas dijo esto: ¡°Hicieron traspasos para dejarnos solo con los jugadores j¨®venes. Se trataba de vender el equipo y hacerse con LeBron¡ y no puedes culpar a la franquicia por tener ese plan¡±.
-A nivel de partido, el epitome seguramente sea el Minnesota Timberwolves-Memphis Grizzlies que cerr¨® la temporada 2005-06. Los Wolves necesitaban perder porque su pick en el draft se iba a ir a los Clippers si ca¨ªa por debajo del top 10. Los Grizzlies tampoco ten¨ªan mayor inter¨¦s en ganar y los Wolves pudieron perder pero tras dos pr¨®rrogas, sin poner en pista a Kevin Garnett y Ricky Davis y despu¨¦s de basar su ataque en triples de Mark Madsen, que llevaba un 1/9 en seis a?os y firm¨® ese d¨ªa un 0/7.
Y despu¨¦s est¨¢n los actuales Sixers, claro. Una planificaci¨®n del fracaso tan obvia y meticulosa que ha hecho falta usar un eufemismo (el proceso, the process) para evitar hablar de tanking a todas horas. En las dos ¨²ltimas temporadas, 19-63 y 18-64. En la actual, 8-46, una tonelada de r¨¦cords negativos y un tir¨®n de orejas que aconsej¨® la llegada de nombres respetables a los despachos (Jerry Colangelo), al banquillo (Mike D¡¯Antoni) y a la pista (Ish Smith, Carl Landry¡). Lo que ha hecho Sam Hinkie es la industrializaci¨®n sin complejos y a largo plazo de lo que hasta ahora era ese asunto que se intentaba que pareciera que no estaba all¨ª a base de no hablar de ¨¦l. Pero que siempre ha estado, aunque haya propietarios que siempre hayan escapado de ¨¦l y que siempre parezcan encontrar formas de que su equipo sea, en mayor o menor medida, competitivo. Uno de ellos es Mark Cuban: ¡°Cuando entras en fase de reconstrucci¨®n el objetivo es hacerse con una gran estrella. Y no hay una f¨®rmula clara para eso. Algunos se obsesiones en lograrla en el draft¡ pero todos los equipos vamos al draft todos los a?os y al final solo ha habido unos siete campeones distintos en m¨¢s de 20 a?os. El draft no te garantiza conseguir una s¨²per estrella, tampoco hacer grandes traspasos o ir al mercado de agentes libres. Est¨¢n las tres f¨®rmulas y todas tienen sus propios riesgos¡±.
Pero el tanking siempre est¨¢, casi en cada temporada y casi siempre con especial crudeza despu¨¦s del All Star Weekend, cuando se entra en rampa de despegue hacia los playoffs o las vacaciones. Equipos a los que se les han ido torciendo las cosas, estrellas universitarias demasiado tentadoras y hasta la alargada sombra de equipos imbatibles. Ese efecto psicol¨®gico lo estamos viendo ahora con los Warriors y en menor medida con los Spurs y los Cavaliers. Los rivales se han movido muy poco en el cierre del mercado en parte porque asumen que ning¨²n cambio les dar¨¢ m¨¢s opciones contra semejantes gigantes. Llevado al extremo, a veces para un equipo ni siquiera es beneficioso jugar playoffs si le env¨ªa al matadero en primera ronda y adem¨¢s le trae consecuencias negativas de cara al draft. Esos pensamientos, y una extra?a sensaci¨®n de culpabilidad, forman parte de la ingenier¨ªa de despachos de la NBA: ahora mismo, los Blazers y los Rockets perder¨¢n su primer pick si no es de loter¨ªa (top 14). Es decir, si entran en playoffs.
En el estado general del tanking hay que considerar que no todos los equipos malos tankean y no todos los equipos que son susceptibles de tankear son (muy) malos. As¨ª est¨¢n las cosas camino de marzo, entre los casos m¨¢s claros, los que est¨¢n en el filo y los que se alejan. En esta lista no est¨¢n los mejores equipos de la NBA, que a estas alturas de la temporada est¨¢n (por suerte) a otras cosas:
-PHILADELPHIA 76ERS: Los Sixers son el tanking y no intentan disimularlo demasiado. A Noel y Okafor tienen que sumar a Embiid, que todav¨ªa no ha debutado, a Saric, su propio pick (que ser¨¢ uno de los mejores) y unos cuantos m¨¢s. Uno muy goloso: si el de los Lakers no es uno de los tres primeros, se ir¨¢ a Philadelphia v¨ªa Phoenix (en una operaci¨®n que comenz¨® con el paso de Steve Nash a Los Angeles). Es un equipo perfectamente dise?ado para ganar muy pocos partidos, incluidos no pocos en los que compite pero no le alcanza en los instantes decisivos.
-LOS ANGELES LAKERS: Asumido que casi todo ha ido mal en lo deportivo, los Lakers son uno de los equipos con m¨¢s motivos para dejarse ir. Tienen la coartada, en ese sentido una bendita cortina de humo, del constante despiste que aporta el tour de despedida de Kobe Bryant. Y las malas lenguas apuntan a que ese deseo de no ir a mejor mantiene en su puesto a Byron Scott. Pero los Lakers necesitan m¨¢s talento joven pero sumarlo a los Russell, Randle, Nance, Clarkson y Brown. Y necesitan que su pick sea Top 3 o se ir¨¢ a Philadelphia. Un caso claro de que hay que hacer lo que conviene: o se hacen con una joya universitaria o se quedan sin nada.
-PHOENIX SUNS: Si todo hubiera ido bien los Suns podr¨ªan estar luchando por el octavo puesto del Oeste. Pero todo ha ido mal. Lesiones (crucial la de Bledsoe), cambio de entrenador y finalmente traspaso del fallido Markieff Morris. A la temporada negra de los Suns solo le queda el draft.
-BROOKLYN NETS: Uno de los equipos que m¨¢s claramente necesita talento y que m¨¢s f¨¢cil tiene perder mucho... quiera o no. Pero el caso es que ni quiere porque sus rondas de draft volaron de forma masiva (y poco responsable) en la primera etapa de la locura Prokhorov. Su primera ronda del pr¨®ximo draft pertenece a los Celtics (desde la salida de Garnett, Pierce, Terry¡), as¨ª que su afici¨®n ni siquiera se consuela con unas derrotas que, en cambio, son muy celebradas en Boston.
-NEW YORK KNICKS: Otro equipo en el que nada va demasiado bien, a un lado Porzingis, pero que tampoco tiene el draft como b¨¢lsamo: los Nuggets tienen la opci¨®n de intercambiar su primera ronda con los neoyorquinos, rescoldos del traspaso de Carmelo Anthony. As¨ª que si los Knicks caen hasta conseguir una de las primeras elecciones, desde Denver les llamar¨¢n y les dir¨¢n: ¡°gracias, ah¨ª va la nuestra¡±.
-MINNESOTA TIMBERWOLVES: Los Wolves se debaten entre las bondades de volver a ir muy arriba al draft (tienen en plantilla a los dos ¨²ltimos n¨²meros 1, aunque Wiggins lleg¨® en el traspaso de Kevin Love) o crear un boceto de cultura ganadora que impulse el desarrollo del proyecto Wiggins-Towns. Son un claro ejemplo de que, en versi¨®n coloquial, lo poco gusta y lo mucho cansa: no juegan playoffs desde 2004, todav¨ªa en la primera ¨¦poca de Kevin Garnett.
A partir de aqu¨ª, hay equipos que apuntaban alto y que se est¨¢n viendo cerca de los bajos fondos, con las consiguientes tentaciones, como Milwaukee Bucks. Otros en el alambre pero con tantas ganas de jugar playoffs que no piensan en otra cosa; Como Sacramento Kings, que saben que los Sixers (no pod¨ªa ser otro) puede intercambiarle el pick salvo que sea top 10. En el mercado, los Pelicans no han traspasado el expiring contract de Ryan Anderson y los Magic se han hecho con veteranos de rendimiento te¨®ricamente inmediato. Una se?al en ambos casos de que, aunque las victorias no llegan en cascada, todav¨ªa no se piensa en el draft. Al menos no ¨²nicamente. Los Wizards se han hecho con Markieff Morris dando a los Suns su primera ronda con protecci¨®n top 9. As¨ª que prefieren arriesgar con un jugador que parece incapaz de explotar su potencial que fiarse de una elecci¨®n templada, en el mejor de los casos, del draft.
As¨ª que el tanking existe pero sus caminos son inescrutables (salvo en el caso de los Sixers). Ni son todos los que est¨¢n ni est¨¢n todos los que son. La ¨²nica certeza es que seguir¨¢ ah¨ª mientra no se transforme radicalmente un sistema con suficientes ventajas como para que se acabe yendo m¨¢s al matiz que a la revoluci¨®n. Pero por ahora, y para ciertos equipos, seguir¨¢ llegando ese momento en el que no ganar se convierte en un alivio, un placer culpable o un objetivo di¨¢fano. Va en el sistema.