Dino Radja: "Nunca compar¨¦is a nadie con Drazen Petrovic"
El legendario p¨ªvot croata visit¨® AS para repasar su carrera. Hablamos con ¨¦l de la Jugoplastika, los Celtics, el Dream Team, su frustrado fichaje por el Real Madrid en 2005...

Dino Radja (Split, 24-4-1967) estuvo en la redacci¨®n de AS durante su reciente visita a Espa?a para presentar el JrNBA Gigantes Camp de Estepona (M¨¢laga). El p¨ªvot croata repas¨® su exitosa carrera a ambos lados del Atl¨¢ntico (visti¨® la camiseta de equipos legendarios como la m¨ªtica Jugoplastika o los Boston Celtics y se enfrent¨® con su selecci¨®n al Dream Team en la final de los Juegos de Barcelona 1992). Sus reflexiones como sus an¨¦cdotas no tienen desperdicio.
?Qu¨¦ recuerda de aquella Jugoplastika (el equipo de Split que gan¨® las Copas de Europa de 1989, 90 y 91)?
?ramos unos ni?os. Ten¨ªamos 20 a?os y no nos d¨¢bamos cuenta de lo buenos que ¨¦ramos. A la generaci¨®n que form¨¢bamos con Toni (Kukoc), se unieron jugadores que vinieron de fuera con la llegada de Maljkovic. Empezamos a jugar bien y ganamos el campeonato de Yugoslavia al Partiz¨¢n. Luego conseguimos la primera Copa de Europa (M¨²nich, 1989). Fue algo incre¨ªble. Por aquel entonces s¨®lo hab¨ªa dos extranjeros por equipo y los que hab¨ªa eran jugadores realmente muy buenos. No como hoy. En aquella ¨¦poca llegaron grand¨ªsimos jugadores como Audie Norris, Kevin Magee, Bob McAdoo¡ Grandes nombres. Cuando nos clasificamos para la Final Four todo el mundo dec¨ªa que no merec¨ªamos estar all¨ª. Hasta el punto que llegar a decir: ¡®Ok, no perdamos por mucho, peleemos hasta el final¡¡¯. No s¨¦ explicar muy bien c¨®mo conseguimos ganar aquel a?o. La temporada siguiente en Zaragoza ya cre¨ªamos en nosotros. Como tambi¨¦n lo hicieron en Par¨ªs (en 1991 Radja ya no formaba parte del grupo). Pero de ese primer a?o no olvido el regreso a Split, una ciudad peque?a en la que la mitad de su gente hab¨ªa salido a la calle. 100.000 personas nos acomp?aron desde el aeropuerto hasta el pabell¨®n, que estaba a rebosar. Ese d¨ªa sent¨ª una de las mejores sensaciones de mi vida.
?El mejor equipo de la historia en Europa?
Creo que s¨ª. Si hubi¨¦semos estado juntos 10 a?os habr¨ªamos sido campeones con facilidad los 10 a?os. Es duro decirlo, pero ¨¦ramos muy buenos y ten¨ªamos una gran confianza. No creo que nadie nos hubiese podido vencer.
Ya que ha mencionado a Kukoc, ?c¨®mo era jugar con ¨¦l?
Empezamos a entrenar juntos a los 15-16 a?os. Pod¨ªamos tener los ojos cerrados y seguir jugando: ¨¦l sab¨ªa lo que yo iba a hacer y viceversa. Una mirada bastaba para hacer cosas. No necesit¨¢bamos hablar.
Se present¨® al draft de 1989, donde fue seleccionado en segunda ronda (n¨²mero 40). Pero no recal¨® en Boston hasta 1993.
Fui drafteado en el 89, pero el equipo no me dej¨® salir a la NBA ese a?o. En 1990 consegu¨ª arreglar mis papeles, pero la diferencia entre las ofertas de Boston y el Virtus Roma era muy grande. As¨ª que acept¨¦ la segunda. No creo que fuera una mala decisi¨®n. Hoy veo a jugadores j¨®venes que se marchan muy pronto y est¨¢n sentados en el banquillo¡ S¨ª, definitivamente fue una gran decisi¨®n. Pas¨¦ tres a?os como profesional en Italia, donde aprend¨ª much¨ªsimo. Adem¨¢s, en aquella ¨¦poca la liga italiana era muy fuerte: la mejor de Europa. Adem¨¢s, al llegar a Boston pas¨¦ de ser uno de los mejores jugadores en el Viejo Continente a empezar de cero. Ese crecimiento previo me result¨® de gran ayuda.
Justo lo contrario que su compatriota Mario Hezonja (Orlando Magic)...
Es un chico que tiene mucho talento, pero se precipitado un poco. En el Barcelona hac¨ªa buenos partidos espor¨¢dicamente. Nunca jug¨® con consistencia diez encuentros seguidos. Le falta experiencia. All¨ª esperan que hagas algo? y si no la tienes resulta muy duro. Habr¨ªa necesitado uno o dos a?os m¨¢s en Europa al m¨¢s alto nivel antes de ir marchar a la NBA y poder rendir desde el primer momento.
Hay quien le define como el pr¨®ximo Drazen Petrovic. ?Comparte usted esta afirmaci¨®n?
Nunca compar¨¦is a nadie con Drazen Petrovic. Era un jugador ¨²nico.
Cu¨¦ntenos, ?c¨®mo era?
Estaba loco. Cuando ¨ªbamos concentrados y no hab¨ªa una sala para ejrcitarse entraba en combusti¨®n y dec¨ªa: ¡®No me importa. B¨²scame una¡¯. Era el primero en llegar a entrenar y el ¨²ltimo en irse. As¨ª es como lleg¨® a ser quien fue. No porque fuera un buen tirador, sino porque trabajaba para serlo. Entrenaba a todas horas: por la ma?ana, antes del colegio, despu¨¦s del colegio¡ Su ¨¦tica de trabajo era enorme.
Volvamos a la NBA. ?Qu¨¦ nos puede contar se sus cuatro temporadas en los Celtics?
La primera temporada pude coincidir con Chief (Robert Parish). Un gran tipo y muy divertido. Me ayud¨® mucho. Estar en el Boston Garden fue incre¨ªble. Con toda su historia, el mismo escenario donde John Havlicek rob¨® aquel bal¨®n (en la ¨²ltima posesi¨®n del s¨¦ptimo partido de la final del Este de 1965 ante los Sixers) y con todas las estrellas que all¨ª viste jugar una y otra vez por la tele... Y entoncesm en tu primer partido, el entrenador te dice que vas a salir y t¨² te quedas como ?wow! Ya no quedan sitios as¨ª. Los pabellones ahora son modernos y la gran mayor¨ªa no tienen historia. Cuando construyen uno nuevo lo hacen al lado del viejo y trasladan hasta el parqu¨¦. Jugu¨¦ dos a?os en el Boston Garden y otros dos en el nuevo pabell¨®n (el TD Garden). El primero, pese a ser una cancha sin aire acondicionado, sin sitios suficientes para aparcar, con unos vestuarios terribles¡, ten¨ªa un poder especial.
?Y qu¨¦ hay de Larry Bird y Kevin McHale, coincidi¨® con ellos?
Ven¨ªan a los entrenamientos. Sobre todo Larry, quien se pon¨ªa a trabajar con nosotros cuando est¨¢bamos cortos de efectivos. Nos ayudaban.
Una pena no haber podido compartir vestuario con ellos. ?Podr¨ªan haberle convertido en un jugador a¨²n mejor?
Ahora es dif¨ªcil decirlo. La NBA tiene un sistema estrictamente profesional. Piensas en ella como algo grande. Es estupenda si eres un buen jugador. Pero si necesitas desarrollar tu juego, no tienes tiempo para entrenar. Y uno es bueno por c¨®mo se entrene. la manera en que lo hace. Y en la NBA s¨®lo se entrena la primera semana. Luego llega la pretemporada, los viajes y los partidos. Y si no juegas una media de 20 o m¨¢s minutos, mentalmente resulta complicado.
Un par¨¦ntesis. Recientemente, en su lista de los mejores aleros de la historia, la 'ESPN' coloc¨® a LeBron James por delante de Bird. ?Est¨¢ de acuerdo?
Lo he visto, pero nunca ser¨¢ as¨ª. No saben de lo que hablan. LeBron se esconde en los ¨²ltimos cuartos y es s¨®lo energ¨ªa, energ¨ªa y energ¨ªa. Larry es todo cerebro.
Usted no tuvo ese problema (promedi¨® 16,7 puntos y 8,4 rebotes en 224 encuentros NBA), pero si el de estar en un equipo perdedor al que se le sum¨® el fallecimiento de su gran esperanza: Reggie Lewis.
Fue algo muy desafortunado. Estaban construyendo el equipo en torno a ¨¦l y de repente tu mejor jugador muere en la cancha (mientras se ejercitaba en julio de 1993). Tu sistema se colapsa por completo. Yo tuve la mala suerte de aterrizar cuando el equipo era bastante malo y no pudimos competir al m¨¢s alto nivel. Pero, pese a ello, fue una gran experiencia. Yo quer¨ªa ir all¨ª y dar todo lo que ten¨ªa para ver mi nivel real. Ese es un proceso que lleva unos cuantos a?os. Fue bueno comprobar que pod¨ªa enfrentarme con Barkley, Olajuwon, Shaquille... Cuando lo supe decid¨ª regresar porque odiaba perder y que al equipo no le importase. En el autocar se jugaba a las cartas, se hac¨ªan bromas mientras segu¨ªamos sin ganar partido. Era algo que mi mente no pod¨ªa aguantar. Intent¨¦ que me traspasaran a alg¨²n buen equipo para luchar por el anillo. Y me enviaron a Philadelphia, que entonces incluso era peor. No pude aceptarlo y decid¨ª regresar a Europa y firmar? por el Panathinaikos. Necesitaba poder pelear por un campeonato.

Como por ejemplo una medalla de oro ol¨ªmpica. Usted form¨® parte de aquella Croacia que disput¨® la final de los Juegos del 92 ante el Dream Team (un equipo cuyos nombres repas¨® con admiraci¨®n en la ficha publicada en la edici¨®n de AS del domingo 9 de agosto de aquel a?o).
Fue el partido m¨¢s importante que he jugado. No s¨¦ cu¨¢nta gente lo vio, pero todo el mundo estaba pendiente. Era la primera vez Estados Unidos ven¨ªa a un campeonato con aquellos nombres incomparables. Estar en la final y jugar contra ellos fue algo fant¨¢stico. Michael Jordan es el m¨¢s grande de siempre y estabas jugando contra ¨¦l en una final ol¨ªmpica. ?Qu¨¦ m¨¢s se puede pedir?
?Una Yugoslavia unida hubiese podido competir contra aquel equipo?
Lo hubi¨¦semos hecho mejor as¨ª. Aunque no creo que les hubi¨¦semos ganado. Eso s¨ª, habr¨ªamos vencido a cualquier otro equipo de los que formaron tras ese Dream Team.
?C¨®mo vivi¨® aquella etapa de guerras fratricidas y desintegraci¨®n?
Es algo en lo que no puedes hacer nada para cambiarlo. Tienes toda aquella gran lista de amigos y buenos jugadores con los que jugabas todos los veranos y¡ No s¨¦ muy bien qu¨¦ decir. Fue una desgracia. Probablemente hubi¨¦semos sido la selecci¨®n europea m¨¢s exitosa de la historia. Ganamos nueve medallas de forma consecutiva.
Como nos ha comentado, es la primera vez que pisa Madrid en casi 16 a?os. En la anterior ocasi¨®n anot¨® con el Olympiacos la primera canasta en la historia de la Euroliga.
Me acuerdo c¨®mo la consegu¨ª. Tambi¨¦n que perdimos aquel partido por unos 10 o 12 puntos (75-73 fue el resultado final de un encuentro en el que Dino sum¨® 13 tantos y 17 rebotes para 33 de valoraci¨®n). Fue bonito compartir vestuario con I?aki de Miguel (su entonces compa?ero) en aquel primer partido de la Euroliga (r¨ªe).
Se retir¨® en 2003, pero ?c¨®mo de cerca estuvo de fichar por el Madrid en el verano de 2005?
Exacto. Llevaba dos a?os retirado, pero Maljkovic entrenaba al Madrid y me dijo: 'Est¨¢s loco. Tienes que seguir jugando. Eres mejor que cualquiera de los que tengo aqu¨ª¡¯. Le ped¨ª dos meses y empec¨¦ a entrenarme seriamente. No quer¨ªa enga?ar a nadie ni quedarme con el dinero de otros. Cuando estuve disputeso, le llam¨¦ para darle el s¨ª y organizar la firma del contrato. Pero entonces me coment¨® que el club dudaba y quer¨ªa rebajar la oferta. Le respond¨ª: 'Venga Boza. No lo hago por dinero, si no por ayudarte. Si ellos no tienen fe en m¨ª, lo mejor es que no hagas nada'.