Detroit Pistons: las prisas por ganar de Stan Van Gundy
Los Pistons de Stan Van Gundy ya se han cansado de esperar mejores tiempos y, mezclando j¨®venes y veteranos, han hecho una plantilla para ser competitivos.

Para un equipo que lleva tanto tiempo sin meterse en playoffs, en concreto desde el a?o 2009, los Pistons viven en una extra?a calma. Para un equipo que vive en una extra?a calma, las prisas por ganar ya resultan sorprendentes.
El anterior p¨¢rrafo puede parecer incoherente as¨ª que voy a tratar de explicarme. El a?o pasado comenz¨® una nueva era en los Pistons. Siempre lo parece cuando se cambia de entrenador, y as¨ª sucedi¨® con el fichaje de Stan Van Gundy. Pero en la franquicia los cambios fueron m¨¢s profundos que eso. Al gran bigot¨®n se le ofrecieron las llaves del reino sin cortapisas. Adem¨¢s de entrenador se le nombr¨® m¨¢nager general, con un enorme contrato de siete millones de d¨®lares anuales por un lustro. Eso fue lo que se necesit¨® para convencer a un hombre famoso por haber dicho que no quer¨ªa trabajar en el medioeste americano porque ¨¦l viv¨ªa en Orlando y era capaz de leer, con soltura, un parte meteor¨®logico. Meterle en Detroit, con esa plantilla que hab¨ªa, y con el fr¨ªo que hace, necesito de ese esfuerzo. Y al aceptar el cargo todo cambi¨®: el equipo era de ¨¦l para hacer y deshacer. Para lo bueno y para lo malo.
Eso implica que no hay prisa. No puede haberla al apostar tan fuerte y a tan largo plazo. Nadie va a pedir su cabeza si el equipo vuelve a perder muchos partidos.
Y, sin embargo, ha sido el propio Van Gundy, el m¨¢nager general y no el entrenador, el que ha decidido que no se puede esperar m¨¢s y que es hora de poner n¨²meros debajo de la columna de las victorias aunque sea a costa de no tener ese brillante futuro, esa Arcadia, que espera a los equipos que son muy malos en la NBA y que sue?an con rondas del draft como t¨² sue?as con Scarlett Johansson. Por ejemplo.
Por eso ha llenado la plantilla de veteranos. Suele pasarse por alto al analizar equipos de NBA su importancia. Ir fichando por un salario medio a jornaleros cl¨¢sicos de la Liga puede acabar d¨¢ndote una plantilla de profesionales que en las largas noches de invierno te ganen en ciudades inh¨®spitas con mitad de entrada en el pabell¨®n y s¨®lo la televisi¨®n regional haci¨¦ndote caso, esos partidos en los que las j¨®venes promesas se aburren de su profesi¨®n.
No parece el mejor plan posible para aspirar al anillo, pero es una aproximaci¨®n diferente al resto y, visto lo visto, en Detroit ya se iba necesitando pasar p¨¢gina de tanta espera. El hecho de perder a Greg Monroe en la agencia libre seguro que ha tenido que ver con esta apuesta porque ?para qu¨¦ esperar a que se desarrollen los jugadores drafteados si luego se te acaban marchando?
Juego exterior
El principal problema de la estructura del equipo es que cuenta con dos bases que en teor¨ªa parecen incompatibles. Reggie Jackson lleg¨® en la fecha del l¨ªmite de traspasos del a?o pasado porque Brandon Jennings estaba lesionado y el equipo andaba desnortado. Pero en esta offseason se le ha renovado por un buen dinero y, ahora ambos conviven y pelear¨¢n por la bola. Para el juego que pretende hacer Van Gundy, de uso intensivo de la pintura, es probable que Jackson, en teor¨ªa mejor tirador pero menos creativo, pudiera parecer la mejor opci¨®n, pero si Jennings sigue en la plantilla es porque tiene opciones. Los puestos de escolta y alero van a depender de como evolucionen dos j¨®venes jugadores: Kentavious Caldwell-Pope y el rookie Stanley Johnson, sobre el que se tiene gran fe. Jodie Meeks tendr¨¢ el rol de tirador puro por el que tanto suspiraba el entrenador la pasada campa?a, cuando la sobredosis de cent¨ªmetros en el interior ahogaba todo el juego del equipo; de hecho, est¨¢ por ver cu¨¢l es el uso que se le da a Marcus Morris, si como jugador exterior o interior, tras el notable fracaso de otro alto con querencia al tiro lejano como Josh Smith, al que est¨¢ prohibido nombrar en el estado de Michigan. Otra de las inc¨®gnitas es el nivel f¨ªsico de Danny Granger y saber si le queda algo de valor para la NBA; es muy probable que est¨¦ ante su ¨²ltima oportunidad, caso de no aprovecharla.
Juego interior
No existen dudas al respecto: el centro del juego del equipo es Andre Drummond. El a?o pasado, a¨²n con Greg Monroe en plantilla, ya era muy evidente esta querencia. De hecho, es probable que la misma ayudase a que Monroe ni escuchase la oferta que le prepar¨® Van Gundy y huyese lo antes que pudo de Detroit. Ya sea por este motivo, o porque de verdad el entrenador as¨ª lo cree, Drummond ha pasado a ser el punto de inicio y final del grupo. Para ayudarle en su desarrollo, para hacerle la vida m¨¢s f¨¢cil, se le ha rodeado de un mont¨®n de gente en la pintura que puede, y debe, hacer lo que ¨¦l no hace, que no es otra cosa que intentar anotar con mayor facilidad a algunos metros del aro. Ersan Ilyasova, Aaron Baynes y Marcus Morris han llegado con esa clara misi¨®n de complementar a la bestia de los rebotes y los tapones, al dominador de la zona en el que quieren convertir a Andre. Un veteranazo como Joel Anthony le servir¨¢ como reserva los minutos en los que necesite descansar que, visto lo visto, no van a a ser muchos. Se ha dicho, y tiene pinta de ser verdad, que Van Gundy quiere replicar el ¨¦xito que tuvo en los Magic cuando Howard dominaba la Liga; es obvio que Drummond no tiene ese nivel, pero s¨ª el potencial para ser una fuerza diferencial en el Este aunque s¨®lo sea por la diferente aproximaci¨®n al juego que van a tener estos Pistons con respecto a los equipos m¨¢s ligeros y tiradores de la actualidad.
Claves
1. El juego centrado en un p¨ªvot puro es una rareza en la actual NBA, y m¨¢s a¨²n si el jugador en cuesti¨®n es de corte defensivo. Ver hasta qu¨¦ punto este modelo puede funcionar es la principal clave para saber si la temporada de los Pistons es exitosa o no pues el bal¨®n pasar¨¢ mucho por sus manos.
2. La coexistencia de Jackson y Jennings. Ambos necesitan el bal¨®n para lucirse y para ser la mejor versi¨®n de s¨ª mismos. Pero parece ser que se seguir¨¢ jugando con una sola pelota por lo que tarde o temprano aparecer¨¢n los roces. La gesti¨®n de sus egos, clave para una temporada tranquila.
3. La aportaci¨®n de los buenos profesionales que se han a?adido a la plantilla. Los equipos en construcci¨®n suelen estar faltos de referencias sensatas y que sepan vivir en el d¨ªa a d¨ªa de la NBA. Eso no ocurrir¨¢ este a?o en los Pistons con un roster equilibrado en cuanto a veteran¨ªa y juventud.
Entrenador: Stan Van Gundy
Stan Van Gundy tiene muy claro lo que quiere para su equipo: rodear a Andre Drummond de tiradores que espacien el campo y llenar el vestuario de figuras veteranas y profesionales que le aseguren un rendimiento estable cada noche. No ha dudado a la hora de, probablemente, sobrepagar para tener a su disposici¨®n a tipos como Aaron Baynes o Ersan Ilyasova, pero eso indica a las claras la direcci¨®n que persigue. Tras el mal final de su experiencia en Orlando, as¨ª como el mal final de su experiencia en Miami, superado por las figuras de superioridad de Dwight Howard y Pat Riley, respectivamente, se ha metido en esta aventura con los Pistons porque tiene total libertad y la total confianza del organigrama de la franquicia para hacer y deshacer a su gusto. Todo apunta a que estar¨¢ muchos a?os en Detroit.
Estrella: Andre Drummond
Primero remarquemos que tiene 22 a?os y ahora qu¨¦dense asombrados con su papel la pasada temporada: segundo m¨¢ximo reboteador del campeonato con 13,5 capturas por noche y plata, tambi¨¦n, en dobles-dobles tras Pau Gasol al llegar a los 48. Casi nada.