El Madrid recupera su esencia y se divierte en el Palacio

No hay nada como el hogar. Que se lo digan al Madrid. Despu¨¦s de vivir dos semanas on the road, pasando las de Ca¨ªn en Barcelona, M¨¢laga, Belgrado y Andorra (dos derrotas y dos victorias en ese orden), la vuelta al Palacio tuvo un efecto bals¨¢mico para los blancos. Al calorcito de su cancha, destaparon el tarro de las esencias, el de sus mejores virtudes. Y as¨ª ofrecieron un espect¨¢culo m¨¢s que digno a su afici¨®n, como hace mucho que no consegu¨ªan, para ganar al inquietante e intenso Galatasaray.

El bal¨®n, con menos bote, volvi¨® a circular a toda velocidad, al galope de Llull y Sergio Rodr¨ªguez. Apareci¨® esa defensa de anticipaci¨®n en el exterior e intimidaci¨®n en la zona (muy bien Ay¨®n) unida al dominio del rebote, los ingredientes de la receta que permite correr. Hubo un mont¨®n de tiros abiertos con pases extra, atrevimiento, fantas¨ªa... Y un nombre propio que sobresali¨® por encima de un notable colectivo: Felipe Reyes. Felizmente instalado en su rol de titular, tuvo tres momentos decisivos en el partido. Con ocho puntos en su inicio mantuvo vivo al Madrid (25-24 al final del primer cuarto) y con otros siete tras el descanso dio un golpe que ser¨ªa definitivo (62-46, minuto 25). Para rematar se cobr¨® un 2+1 que ya dej¨® sin respuesta al equipo turco, donde hab¨ªan dado guerra Erceg, ese cuatro abierto tan inc¨®modo, Arroyo, Arslan y Guler (86-71, minuto 37).

Eterno. Felipe acab¨® con un doble-doble de 22 tantos y 11 rebotes para 29 de valoraci¨®n. Con 34 a?os sigue haciendo las cosas tan bien como cuando rondaba los 20. Se salta a la torera el scouting de los rivales, que no pueden pararle ni adivinar por d¨®nde va a birlarles los rebotes por muchos v¨ªdeos que estudien. Tambi¨¦n se not¨® el talante de Slaughter, cuyas apariciones en la Euroliga ¡ªfue baja Maciulis¡ª, con su defensa y sus a?orados alley-oops, traen esa alegr¨ªa que beneficia al Madrid. Al final lo dijo Rudy, otro de los destacados: ¡°Nos hemos divertido¡±.