LOS ESPA?OLES Y EL NUEVO CURSO
Marc quiere ser el nuevo Elvis con la agresividad por bandera
En Memphis le reclaman que d¨¦ un paso al frente y mire m¨¢s a canasta. El p¨ªvot afronta un a?o clave en su carrera: renovar con los Grizzlies o convertirse en agente libre en 2015.

No es f¨¢cil aterrizar en la NBA si te apellidas Gasol y tu hermano es Pau. La presi¨®n que recae sobre tus hombros se duplica. Por mucho que seas todo un campe¨®n del mundo y aterrices con el MVP de la ACB bajo el brazo, tienes que tener una fuerte personalidad y confianza en ti mismo para poder superar esa losa y abrirte tu propio camino en la mejor Liga de baloncesto del mundo. Y esto es precisamente lo que ha hecho Marc Gasol a lo largo de sus seis a?os en la NBA. Ahora, en v¨ªsperas de arrancar su s¨¦ptima y m¨¢s decisiva temporada, el reto se incrementa: certificar su bien merecida condici¨®n de estrella para lograr firmar el verano pr¨®ximo su gran contrato profesional.
Tras renovar con Memphis en diciembre de 2011 a raz¨®n de 58 millones de d¨®lares a percibir en las siguientes cuatro campa?as, el p¨ªvot espa?ol ser¨¢ agente libre sin restricciones a partir de julio de 2015. A buen seguro que su futuro ser¨¢ uno de los temas principales de conversaci¨®n en torno a los Grizzlies en los pr¨®ximos meses. Pese a que los osos har¨¢n todo en cuanto est¨¦ en su mano para retenerle (ya se habla de una oferta de 55 kilos por los tres pr¨®ximos cursos), el hecho de que pueda decidir libremente su propio destino har¨¢ que pretendientes no le falten. Por el momento aparca la decisi¨®n hasta que concluya la temporada: ¡°Amo a este equipo y es algo que no ha cambiado, pero veremos c¨®mo me siento cuando termine, habr¨¢ que ir poco a poco¡±. Unas declaraciones que contrastan con las emitidas al poco de regresar a Espa?a este pasado junio, en las que se?alaba que Memphis es su ¡°hogar fuera de casa¡±. ¡°No me veo en ning¨²n otro lugar¡±, reiteraba. Este cambio de parecer no obedece a otra cosa que no regirse por las reglas sobre las que este negocio subyace.
Sin embargo, ya habr¨¢ tiempo suficiente para hacer las pertinentes c¨¢balas sobre su futuro. Por el momento, el mediano de los Gasol afronta el curso baloncest¨ªstico 2014-15 con el objetivo de cumplir la nueva tarea que le han encomendado: mirar m¨¢s el aro en ataque. En Memphis quieren que deje de ejercer de l¨ªder en la sombra y d¨¦ un pu?etazo encima de la mesa. El t¨¦cnico David Joerger, quien estuvo muy cerca de marcharse este verano a los Bucks, lo dej¨® muy claro durante el Media Day del equipo. Marc recoge el guante: ¡°Ser¨¦ m¨¢s agresivo. No s¨¦ cu¨¢ntos puntos anotar¨¦ por partido, pero si que promedie 22 significa que los Grizzlies ganen, tirar¨¦ cada bal¨®n que me llegue¡±.
Esto no significa que el catal¨¢n abandone su tan distintiva manera de jugar. Ser¨ªa todo un error. Hay pocos p¨ªvots (y jugadores en general) con su inteligencia y capacidad de lectura. Sus asistencias son ya un sello propio. Pese a ello, en ocasiones llega a pecar de generoso al buscar antes a alg¨²n compa?ero abierto que a mirar el aro. ¡°Le hemos aconsejado que a veces la mejor decisi¨®n es que tire en primer lugar¡±, desvelaba Mike Conley, junto con Zach Randolph y el propio Marc, los tres grandes pilares de los de Tennessee.
Pero si alguien tiene claro lo que significa esta transformaci¨®n es el protagonista. ¡°S¨¦ lo que significa ser m¨¢s agresivo y no es ocupar siempre el asiento del copiloto. Puedo cambiar mi chip en ataque, pero eso no quiere decir que tire cada vez. Es m¨¢s una cuesti¨®n de actividad en ambos aros: esa es la mejor descripci¨®n para m¨ª. Ser mucho m¨¢s agresivo¡±, resume el Mejor Defensor en 2013.
Y as¨ª llegamos a la cualidad que, junto a su capacidad para el pase, mejor le define. El ex de Barcelona y Girona es el mejor ejemplo de c¨®mo un jugador puede ganar partidos con el trabajo en su propio aro. Rebotea, tapona, obliga a cambiar la trayectoria de muchos lanzamientos. Pero no es s¨®lo eso. Una vez m¨¢s, su privilegiada cabeza y exquisito sentido t¨¢ctico le permiten anticipar los movimientos del ataque llegando puntual como un clavo a la cita con las ayudas. Lo que dec¨ªamos antes: liderazgo en la sombra.
Si alguien tiene dudas a estas alturas con respecto a su rendimiento (hay quien le achaca, y puede que raz¨®n no le falte, que con la Selecci¨®n no ha brillado como se espera de un 2,15 con su cartel) basta echar una mirada al curso pasado. Una esguince en la rodilla izquierda le tuvo un mes y medio de baja en los primeros compases, coincidiendo con el hundimiento de un equipo que ven¨ªa de jugar la ¨²ltima final de su Conferencia. Los Playoffs parec¨ªan insalvables, pero su regreso le cambi¨® el aire a los de Joerger (y la mejora en defensa: pasaron de encajar 97,2 puntos por noche a 92,8), que in extremis se hicieron con el ¨²ltimo billete para la postemporada en Oeste m¨¢s salvaje que nunca.
Ahora, y con paternidad reci¨¦n estrenada a sus 29 a?os, Marc seguir¨¢ haciendo estragos en las zonas rivales en compa?¨ªa de su compa?ero de baile: Randolph. Ambos se han compenetrado a la perfecci¨®n los ¨²ltimos a?os, haciendo el estadounidense de martillo pil¨®n bajo los aros mientras que el espa?ol iba abriendo su posici¨®n para ejercer de director de orquesta junto con su aseado y eficaz tiro de media distancia. Ahora, este reparto de papeles puede variar con la ¡°agresividad¡± por bandera que en los Grizzlies reclaman en Marc. Una nueva misi¨®n que de sacarla adelante quiz¨¢ haga que en Estados Unidos ya no le se?alen como el segundo mejor p¨ªvot del campeonato (s¨®lo Dwight Howard le supera en la ¨²ltima encuesta realizada entre los general managers), sino como el mejor. Y en el horizonte la decisi¨®n sobre su futuro. Phil Jackson, alguien que sabe mucho de esto, cruza los dedos por reunirle junto con Carmelo en la Gran Manzana. Pero mientras tanto, aspira a ser el nuevo monarca en la ciudad del verdadero Rey: Elvis Presley.