Reyes, el mejor del Madrid en otro susto ante un buen Zalgiris
El equipo lituano mand¨® en el primer tiempo y no se descolg¨® nunca. Partido discreto del Madrid, aunque supo cambiar el ritmo en el tercer cuarto. Jug¨® Slaughter.


Hace seis meses, en el cierre del Top-16, el Madrid ca¨ªa en Kaunas (87-80) y algunas voces afirmaban que la derrota era para elegir rival, para enfrentarse en cuartos al Olympiacos, entonces vigente campe¨®n de Europa, y esquivar al Panathinaikos (?). Ahora, recib¨ªa al Zalgiris para abrir la Euroliga y la sombra de la derrota persigui¨® de nuevo a los blancos. Pero esta vez no hab¨ªa rival que elegir. Entonces, tampoco. Esa es la realidad. Todo es m¨¢s simple: en la ¨¦lite, la falta de tensi¨®n, concentraci¨®n y un mal d¨ªa te pone a los pies de los caballos frente a cualquiera. Tambi¨¦n frente al Zalgiris, que es un grande aunque ande en etapa valle y tiene callo de ganar, al menos en su pa¨ªs.
Como quien dice, el campe¨®n lituano hab¨ªa aterrizado en Barajas at¨¢ndose las zapatillas. Un aver¨ªa en su avi¨®n le oblig¨® a retrasar el viaje, a dormir en Lituania y a llegar horas antes del encuentro a Madrid. En la pista vimos m¨¢s adrenalina por el ca¨®tico desplazamiento que cansancio. Mucha energ¨ªa y mucho protagonismo de los j¨®venes, de los bases, de Lekavicius y de Kariniauskas, que causaron una gran impresi¨®n (el timonel titular, Wayns, ha rescindido el contrato por lesi¨®n). Y protagonismo de un James Anderson que puede ponerse las botas en esta Euroliga (19 puntos). Viene de promediar 14,1 en los Sixers y a este lado del Atl¨¢ntico ya acapara focos.
El plan del Zalgiris, de sus t¨¦cnicos (Krapikas y Jasikevicius), era sencillo: que el Madrid no corriera. No perder balones, sobre todo, y ponerle las cosas dif¨ªciles atr¨¢s, rebotear. Y en ataque, al aro con decisi¨®n moviendo a Ay¨®n y a Bourousis, que salieron de inicio. Mala actuaci¨®n general del Madrid y peor primera parte: 8-13, 20-24 y 32-35 al descanso con charla larga de Pablo Laso incluida. La renta a¨²n se estir¨® hasta el 34-39. Pero el Madrid, repitiendo su quinteto de salida (Llull, Rudy, Rivers, Ay¨®n y Bourousis), empez¨® a corregir el desaguisado. Otra actitud defensiva, mucho m¨¢s incisivo en la primera l¨ªnea.
El adversario pas¨® de extraviar cinco balones en 20 minutos a seis en s¨®lo diez. Ay¨®n sum¨® cuatro robos y anot¨® (10), aunque el m¨¢s efectivo fue Felipe Reyes (11 tantos y 17 de valoraci¨®n). Si el partido se pone feo, cuenten con ¨¦l. El primer voluntario para tirarse al barro. Luego, Campazzo a?adi¨® otra marcha al contragolpe blanco. La entrada del argentino, que se llev¨® una t¨¦cnica tras una falta dudosa, dej¨® a Sergio Rodr¨ªguez en el banco durante la segunda parte hasta ya entrado el ¨²ltimo cuarto. Ese br¨ªo del tercer parcial dio un respiro a los locales (59-49). Bast¨® para amarrar el triunfo en un mal partido en el que Slaughter se estren¨® oficialmente (Mejri, con fiebre, fue baja). Maciulis ayud¨® a cerrar el choque con dos triples. Algo de lucimiento ante su exequipo, ante sus compatriotas. Y poco m¨¢s. Es probable que lleguen d¨ªas para recordar; no ser¨¢ este.
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