BARCELONA - REAL MADRID 2-1
Paliza del Barcelona, que puede ser campe車n este jueves
Exhibici車n de Navarro. Los de Pascual acribillaron desde la l赤nea de tres a un Madrid sin capacidad de reacci車n. El cuarto partido ser芍 otra vez en el Palau.

En una batalla a cinco duelos, como es este playoff final, el factor mental pesa mucho. A veces tanto como el talento. No da igual empezar ganando el primer partido que perdi谷ndolo, aunque luego haya empate a uno. El elemento an赤mico de los duelos impares deja siempre su sello. La historia es reincidente. El Bar?a gan車 el primero y repiti車 este martes en el tercero. Marca el ritmo y manda en el pulso. Tiene el t赤tulo a tiro de uno.
Primero recuper車 el factor cancha y ahora ha hecho un movimiento de gran maestro. Jaque. Aunque no mate; no todav赤a. El Madrid a迆n puede levantarse, como hizo en M芍laga. Pero le va a costar hasta la 迆ltima gota de su reserva energ谷tica. Hasta el 迆ltimo gramo de dureza mental que le quede en el cuerpo, en el del colectivo y en el de cada uno de sus jugadores. Vivir o morir, cerrar con nota una temporada de ensue?o o emborronar todo lo anterior, que s車lo quede en la memoria de los m芍s fieles. Justo el camino opuesto emprendido por el Bar?a, que enterrar赤a sus padecimientos. Aquellos pa?uelos blancos de hace s車lo dos semanas en el Palau tras perder con el Valencia en el cuarto duelo de semifinales. Deporte.
Y volvi車 a pasar que el primer golpe del combate result車 el m芍s importante. Y lo dio el Bar?a con una fuerza y un ansia que hubiera mandado a la lona a cualquier rival a este lado de la NBA. Exaltaci車n del juego ofensivo. Como sol赤a hacer el Madrid de la ilusi車n y la confianza, el Madrid al que le aguantaban las piernas. El que defend赤a tan bien. No es que el Bar?a se entregara al contraataque, pero mostr車 una velocidad endiablada en la circulaci車n del bal車n y un acierto en el tiro de otro planeta. Marciano.?
El primer cuarto acab車 31-20 y es posible que no fuera el peor de los blancos en ataque. Los azulgrana encadenaron cinco triples sin fallo, dieron siete asistencias y dejaron a cero el casillero enemigo de los rebotes ofensivos. Llull empujaba con sus penetraciones y Bourousis era la 迆nica boya a flote. Para recibir y aliviar a sus compa?eros, para anotar (9 puntos en 9 minutos). En el segundo parcial sigui車 la brega de Llull, se le uni車 Carroll# S車lo arrebatos individuales, aislados y predecibles. En suma, neutralizables.
Imposible remontar as赤, imposible si la defensa segu赤a haciendo agua, directa a pique. Imposible si el Bar?a se manten赤a en estado de gracia, meti谷ndolo TO-DO. Al descanso, 10 de 18 en triples y 16 de 28 para cerrar el choque (57%). Una barbaridad y r谷cord en un playoff final. Pura est谷tica en movimiento con Navarro de MVP (19 puntos y, m芍s all芍, una sensaci車n de control total), Nachbar y Oleson clav芍ndolas y Huertas en la batuta. Muchos brazos a ayudar. Como los de Papanikolaou y sus 11 tantos del tir車n en el tercer cuarto.
Enfrente, justo lo contrario. Lo m芍ximo a lo que alcanz車 el Madrid fue a reducir la desventaja a seis puntos: 42-36 tras dos galopadas y una defensa mixta. Entonces apareci車 la mano de Lampe, dos triples, y la brecha se reabri車. No par車 ya de ensancharse. Sergio Rodr赤guez perd赤a cinco balones, como si las piernas no le acompa?aran y nublaran su mente. Rudy no estaba, quiz芍# el tobillo derecho lesionado. Mirotic tampoco, otra vez (lo mejor, su intento de sumar desde la personal en la reanudaci車n), y Reyes no cambi車 la inercia. Ni Slaughter. Sin ala-p赤vots, en realidad sin p赤vots, porque no vimos esta vez el efecto Mejri. Equipo a la baja, ?descompuesto? En dos d赤as, este jueves, a迆n puede sacar su orgullo, si las fuerzas no le fallan, y forzar el quinto. De lo contrario, el Bar?a ganar芍 la Liga Endesa al sprint tras meses tapado en el pelot車n. Estrategia. El playoff.