Un triple ag¨®nico de Satoransky da un triunfo de oro al Cajasol

Satoransky tiene el descaro de los genios que apuntan alto. A¨ªto ha plagado a su Cajasol de gente con mucho futuro que combina pecados de juventud con reacciones inesperadas. A falta de cinco segundos, con empate (despu¨¦s de que Grimau fallase uno de sus dos tiros libres), el base checo cogi¨® la bola y emprendi¨® un furioso camino hacia la victoria. Agarr¨® la calle dos, nadie sali¨® decidido a su paso, se plant¨® en el arco triple y con esa suspensi¨®n suya tan pl¨¢stica y eterna, emboc¨® la canasta ganadora.

Hasta ah¨ª, poco importa lo ocurrido, que fue mucho y enrevesado. Desde un inicio fulgurante de Bamforth con 11 puntos en un pesta?eo (no sum¨® ya nada m¨¢s que dos tiros libres), hasta exhibiciones por las alturas de los angelitos del Cajasol (siete mates y dos tapones). Alberto D¨ªaz se estren¨® y la orquesta toc¨® m¨¢s afinada, aunque los ¨¢rbitros le pitaron como a un reci¨¦n llegado al cielo ACB. La acumulaci¨®n de faltas y el cansancio maniat¨® a los locales, que centraron su defensa sobre el bloqueo directo del cuadro sevillano y A¨ªto opt¨® por actuar sin los cincos Hernang¨®mez y Balvin. Los visitantes pasaron de un 12/19 en tiros de campo en el primer cuarto a un 3/13 en el segundo.

El Cajasol fall¨® cuatro tiros libres en un momento decisivo (a falta de un minuto Landry lanz¨® uno que no toc¨® ni aro y el otro se le sali¨®). El Bilbao se fue al 54-39 y lo ve¨ªa medio hecho, pero dej¨® de leer la partitura sobre la madera. En el ¨²ltimo cuarto los locales viajaban con trece arriba y recibieron un 1-15. Lo curioso es que jugadores muy expertos como los hombres de negro se vieron envueltos en la tensi¨®n y la falta de ideas en el momento de la verdad. As¨ª, Grimau dividi¨® y dio una asistencia a Mumbr¨² en l¨ªnea de 6,75, que fall¨®. Algunas selecciones de tiro del capit¨¢n, por su ¨ªmpetu de ayudar, rozaron la precipitaci¨®n.

Con este resultado, el Cajasol mira a los ojos al playoff y el Bilbao se resigna a sentir en la nuca los que vienen desde el infierno. Pueyo lanz¨® una queja al arbitraje al enterarse de que A¨ªto hab¨ªa tratado de forma somera sobre los colegiados: ¡°No pensaba, pero como se ha hablado aqu¨ª del arbitraje, yo tambi¨¦n lo voy a hacer: tras el descanso no me parece que el criterio haya sido como en la primera parte. Han metido en cuatro faltas a Diaz y Grimau. Han sido muy rigurosas, muy injustas y en el otro lado se han dejado de pitar, probablemente porque ha habido quejas desde el otro banquillo¡±. Fue la despedida de Arrinda al frente de la franquicia, en la que Grimau lleg¨® a confesar en Radio Bilbao que los reiterados retrasos en los pagos han creado incluso fricciones en el vestuario.