Real Madrid - CAI
El rodillo blanco ante el gran sue?o de gloria copero del CAI
El CAI gan¨® dos Copas (1984 y 1990), jug¨® otra final en 1995 y desapareci¨®. En 2002 volvi¨® a empezar de cero y hoy sue?a (19:10, La 1) con ligar su presente a aquel pasado glorioso.
A veces uno alza la vista y s¨®lo con ver el camino se fatiga. Pongan al CAI como el que mira al horizonte y al Madrid como la monta?a inexpugnable, una de 22 partidos de altura, las victorias consecutivas que acumula en la ACB (el ¨²ltimo duelo de la pasada final liguera, los dos de la Supercopa, 18 de Liga y uno de Copa). Otras veces, en cambio, el trayecto no se antoja tan duro, pero la dificultad sobreviene de golpe. El que caminar¨ªa ahora ser¨ªa el Madrid, y el CAI se le abalanzar¨ªa. Dos maneras de ver una semifinal y s¨®lo un favorito: el Real Madrid.
El equipo ma?o viene de chocar repetidamente contra los blancos, hasta seis veces la campa?a pasada y otra m¨¢s en esta. Pero no desfallece. ¡°No son de otro planeta, son jugadores y todo lo que sucede en la cancha es baloncesto ¡ªdice Sanikidze¡ª. Competiremos. No son imbatibles. Hace un mes en Zaragoza luchamos durante 39 minutos¡±. Fe ciega la de un CAI que quiere ligar su historia reciente, la del club creado en 2002, con la del glorioso equipo que logr¨® dos Copas con Kevin Magee en 1984 y Mark Davis y sus 44 puntos en 1990. Tambi¨¦n con los Arcega, finalistas en la edici¨®n de 1995.
Roll. La mala noticia para Ab¨®s es la lesi¨®n de Roll. Tirador. Sufri¨® una dolorosa luxaci¨®n en un dedo de la mano izquierda y, si no se recupera, le dejar¨ªa el puesto al p¨ªvot Norel, que vuelve de una grave lesi¨®n. ¡°Me preocupa su l¨ªnea exterior ¡ªdice Laso¡ª. Son un equipo ordenado y s¨®lo con trabajo y esfuerzo les sacaremos de ese orden¡±. Apunten a otra defensa del per¨ªmetro como ante el Granca, aunque Shermadini, referente interior, podr¨ªa emular a Tavares. El Madrid tiene hambre de t¨ªtulo y va en apisonadora; pero el CAI sue?a con la gloria. El premio, la final.