CSKA 85-REAL MADRID 71
El CSKA acaba en Mosc¨² con la racha triunfal del Real Madrid
El equipo blanco se repuso de un p¨¦simo primer tiempo y de la mano de Sergio (expulsado al final) apret¨® tras verse 19 abajo. Krstic, decisivo para los de MessinaReal Madrid-Panathinaikos: Euroliga 2018

Eran varias las voces que ped¨ªan un tropiezo a tiempo del Madrid en vez de seguir alimentando al monstruo voraz de la racha. Un traspi¨¦ que aliviara la presi¨®n, incluso una tibia cura de humildad, una derrota que, despu¨¦s del frenes¨ª de tantas victorias, le ayudara a crecer. Pues aqu¨ª la tienen. Fin a la sucesi¨®n de victorias que se hab¨ªa alargado durante 31 partidos y casi cuatro meses. Para a?adirle morbo al asunto, la cort¨® de cuaj¨® Messina. El t¨¦cnico italiano sonre¨ªa satisfecho, le hab¨ªa echado el lazo ¡°al mejor equipo de Europa¡±, a un Madrid tremendo durante la temporada y que en Mosc¨² ofreci¨® su peor versi¨®n en casi todas las facetas del juego.?
Fiasco blanco y gran m¨¦rito del CSKA, de una defensa que ralentiz¨® los ataques rivales. Sus jugadores saltaban como fieras al bloqueo y continuaci¨®n, ahogando a los bases, y ejecutaban con precisi¨®n las ayudas defensivas. Imponentes. El equipo ruso fue una maquina perfecta atr¨¢s (doble m¨¦rito sin Weems y sin Hines, lesionados), lo que le permiti¨® correr. Si no hab¨ªa galopada, empezaba el reto del pase extra. Paciencia y Krstic certero como brazo ejecutor. La ventaja f¨ªsica se hizo m¨¢s evidente con Vorontsevich, un 2,04 m, actuando de alero.?
En la batalla t¨¢ctica, al Madrid le abandon¨® su duende, petrificado en un Mosc¨² de veinte bajo cero. S¨®lo avanz¨® a impulsos de un talento que le permiti¨® driblar el rid¨ªculo: 37-18. Pas¨® de tocar fondo a encender la llama de la esperanza con 8 puntos de Sergio Rodr¨ªguez (que al final fue descalificado por un encontronazo con Teodosic). Los de Laso se pusieron a tiro de tres (46-43), aunque esta vez eran un equipo peor, mucho peor que el CSKA. Sin defensa y sin rebote, sin movimiento de bal¨®n. Apresurado, aislado, en manos del uno contra uno y con Rudy en d¨ªa aciago, Mirotic regular y Bourousis cediendo la pelea con Krstic. Los Sergios anotaban, pero no hac¨ªan jugar y a Reyes le pod¨ªa la ansiedad ante su exjefe. El Madrid est¨¢ en el camino al t¨ªtulo, por supuesto; pero como otros tres o cuatro equipos. La carretera es dura y pica hacia arriba.