El Real Madrid sigue en pie

N¨²meros: 17, 3, 3, -2 y 21. No es la combinaci¨®n que abre la caja fuerte de la final pero s¨ª la que explica mucho de lo que ha sucedido en una serie que ha sido puro playoff, un saludo para los que desconf¨ªan de este sistema de competici¨®n que es puro baloncesto. Los n¨²meros, vuelvo a ellos, responden a las cifras de valoraci¨®n de Felipe Reyes en los cinco partidos de la final. En los cuatro primeros partidos sum¨® 21 en total, la misma cifra que en el quinto (12 puntos, 9 rebotes, 7 faltas recibidas). Se trata por lo tanto de profundidad de plantilla, del volumen de infanter¨ªa e intendencia que se puede lanzar sobre el rival. El Real Madrid tuvo mucho m¨¢s y as¨ª encontr¨® la escapatoria al laberinto que hab¨ªa planteado Ivanovic. Felipe no fue fundamental otros d¨ªas, hoy s¨ª. Carroll acab¨® siendo importante en la mano final de la ¨²ltima partida. Mirotic apareci¨® a tiempo y hasta Pocius aport¨® minutos de especialista. Velickovic, h¨¦roe de la serie (hoy m¨¢s puntos trascendentales) vio el tramo decisivo en el banquillo. S¨ª: el Real Madrid ten¨ªa mucho m¨¢s.

Sigamos con el juego de espejos de los n¨²meros: 20 es la valoraci¨®n total de San Emeterio en toda la serie. De h¨¦roe habitual a sospechoso por culpa de un precario estado f¨ªsico. Teletovic, otro que era necesario en esta ¨²ltima instancia, s¨®lo dio su nivel en el primer cuarto. Despu¨¦s nada, bien defendido por... Felipe Reyes. Caja Laboral muri¨® con las botas puestas y dej¨® la sensaci¨®n de que ten¨ªa un plan y unos mimbres... que no daban para 40 minutos. En el quinto partido cerr¨® el rebote y corrigi¨® su ataque mientras form¨® con la guardia pretoriana (Prigioni, Nocioni, Lampe...). Pero volvi¨® a perder el hilo con Heurtel (calamitosa semifinal) al tim¨®n y volvi¨® a terminar desfondado. Cuando perdi¨® la paciencia dej¨® correr al Real Madrid. Y entonces baj¨® su eficacia defensiva y a continuaci¨®n comenz¨® a fallar demasiados tiros... todo cuando se rompi¨® el gui¨®n que Ivanovic dibuja y al que Prigioni da forma. El Real Madrid cogi¨® un rebote ofensivo en tres cuartos y 5, determinantes, en el ¨²ltimo. Anot¨® 3 triples en el primer tiempo y 7 en el segundo... S¨ª, el Real Madrid supo jugar mejor los minutos calientes. Pero s¨ª, influy¨® la falta de ox¨ªgeno final de un Caja Laboral que sobrevivi¨® cuatro partidos, tres cuartos y m¨¢s de 35 minutos: 59-59 a 350 segundos del final...

El Real Madrid, lo ha hecho en sus tres triunfos de la serie, corrigi¨® sobre la marcha un inicio g¨¦lido: 14-24 en un primer cuarto en el que Ivanovic cambi¨® la pizarra ofensiva con Nocioni pegando como un b¨²falo y Teletovic picando como una avispa. Disimul¨® un d¨ªa intrascendente de Su¨¢rez o Singler, otro partido descorazonador de Tomic y hasta un d¨ªa obtuso de Llull, que coje¨® en la lectura del juego en est¨¢tico. Pablo Laso supo ser flexible, barajar y repartir hasta encontrar la jugada ganadora: un quinteto bajo con Sergio, Llull, Carroll, Mirotic y Felipe. Sin Velickovic, sin sus dos p¨ªvots puros, sin sus dos aleros altos. Intensidad y movilidad en defensa, recursos en est¨¢tico, segundas opciones al zurr¨®n... y Sergio Rodr¨ªguez. El canario hubiera firmado seguir jugando esta semifinal. A siete partidos, a nueve, m¨¢s all¨¢... En el quinto 9 puntos, 8 asistencias y sus mejores minutos defensivos en mucho, much¨ªsimo tiempo. Clarividente en est¨¢tico, el¨¢stico en transici¨®n y con la punter¨ªa a prueba de bombas.

El partido fue un viaje de sensaciones que comprimi¨® lo que ha sido toda la semifinal, cinco partidos en los que cada metro ganado era una cabeza de puente, un pedazo de terreno que ya no recuperaba el enemigo. Del 12-32 de valoraci¨®n del primer cuarto al 37-5 del segundo. El Real Madrid por detr¨¢s muchos minutos midiendo la distancia, agazapado y calculando el momento, un depredador que venci¨® a la presi¨®n, al miedo al fracaso (desde el volc¨¢nico tercer partido) y a un rival tremendo que no cay¨® a la lona hasta que se escap¨® la ¨²ltima fuerza, el ¨²ltimo tiro desesperado (74-65 en ruta hacia un final ya inamovible). El Real Madrid vuelve a la final y la ACB recupera el Barcelona-Real Madrid cinco a?os despu¨¦s y en un momento de enorme necesidad por tantas y tantas razones. Lo mejor es que llega henchido, orgulloso y con una rotaci¨®n m¨¢s profunda que antes de los playoffs. Cuesti¨®n de momentos de forma y confianza. Falta le har¨¢ porque si esta semifinal ha sido una batalla la final promete aunar las Term¨®pilas, Waterloo y Normand¨ªa. Del Palau al Palacio y por el camino, esperemos, baloncesto. Toneladas de baloncesto.