Euroliga | Maccabi 88 - Real Madrid 82
Farmar le hace un traje a un Madrid fr¨¢gil atr¨¢s
El ex de los Lakers rompi¨® la defensa blanca con sus penetraciones.

Lo m¨¢s positivo de la visita del Madrid a Tel Aviv es que lleg¨® al ¨²ltimo minuto con una m¨ªnima opci¨®n de victoria: 85-80 y doble amago de robo. Al final, s¨®lo seis abajo. Sin duda, lo mejor de la noche. Porque qued¨® claro que si las plazas para la Final Four de Estambul se repartieran ahora, el Madrid se quedar¨ªa sin billete.
Los dos equipos se retaron con un estilo veloz, nada especulativo, de transiciones r¨¢pidas y anotaci¨®n fluida. Pero el Maccabi? juega a eso con intensidad m¨¢xima, con un plan defensivo, y el Madrid a¨²n no. Schortsa?nitis, que pesa m¨¢s de 150 kilos, atrap¨® cada bal¨®n dividido tir¨¢ndose al parqu¨¦ como una pantera de figura oronda mientras sus rivales miraban.
El Madrid fue incapaz de contener las penetraciones de Jordan Farmar, el exjugador de los Lakers, que golpe¨® como un abnegado herrero a la defensa blanca: 9 de 11 en tiros de dos para 35 de valoraci¨®n (MVP de la jornada). Calc¨® sus acciones una tras otra, ante la impotencia del per¨ªmetro madridista. Anot¨® y sirvi¨® en bandeja tiros liberados para sus compa?eros, que en la brecha abierta en el tercer cuarto ametrallaron el aro repetidas veces desde el mismo sitio. No hab¨ªa barricada y s¨ª un caminito de rosas que Blu y Smith aprovecharon con maestr¨ªa.
Porque plantear un duelo a campo abierto no es presentar batalla alocada. En el Maccabi cada movimiento parece responder a una estrategia dise?ada. Enfrente, el Madrid sufri¨® cuando se vio en apuros con su defensa, cuando tuvo que atacar en est¨¢tico, con Rudy err¨¢tico, con Mirotic temeroso. Carroll evit¨® la sangr¨ªa con triples de genio, sin esp¨ªritu colectivo. Debieron aprovecharle m¨¢s antes y debi¨® forzar menos luego. Falt¨® direcci¨®n pese a las ocho asistencias de Sergio. Begic e Ibaka compitieron con Schortsanitis, pero Sofo es mucho Sofo. El triunfo del Maccabi result¨® exiguo; las sensaciones, m¨¢s abultadas. Le queda trabajo a Laso.