El Madrid roza las semis ante el irreductible Fuenla
Los locales apelan al esp¨ªritu naranja y repartir¨¢n 4.000 camisetas.
El Fernando Mart¨ªn vestir¨¢ de riguroso naranja, con las cuatro mil camisetas que repartir¨¢ el club con el lema Imposible m¨¢s por menos? . La fiesta arrancar¨¢ quince minutos antes de lo habitual, a las 12:15, por cuesti¨®n televisiva y electoral.
Match-ball para el Madrid, que sue?a con meterse por la v¨ªa r¨¢pida en semifinales y que all¨ª le espere el Bizkaia? Bilbao. Y tambi¨¦n pelota de partido para el irreductible Fuenla, para salvar la eliminatoria y lograr el primer triunfo de su historia en unos playoffs (0-10 de momento). En casa s¨®lo ha perdido dos encuentros esta campa?a (Valladolid y Valencia), donde ha ganado a los cuatro equipos con plaza fija en la Euroliga: Barcelona, Caja Laboral, Unicaja y Real Madrid. El equipo blanco fue el ¨²ltimo en caer, hace tres semanas, con l¨ªo entre Prigioni y la hinchada local. La pitada al argentino ser¨¢ de a¨²pa, aunque esperemos que la afici¨®n evite insultos desagradables y el jugador tire de templanza. Molin dijo que el comportamiento del base fue inaceptable, primero lanzando agua a la grada y, luego, baj¨¢ndose los pantalones con mal estilo.
M¨¢s aportaci¨®n.
El efecto Prigioni tendr¨¢ su peso, aunque si el pez grande se centra es imposible que no devore al chico?. Los de Maldonado? deben estirar como un chicle sus recursos (m¨¢s aportaci¨®n de Mainoldi y Barton), porque de otro modo la diferencia son esos 21 puntos del partido del viernes: 93-72. Pero que el Madrid falle m¨¢s de la cuenta, suba y baje, ha sido moneda com¨²n esta campa?a. Lo diferente fue lo del primer partido, cuando el Fuenla puso una zona y los de Molin ni se inmutaron, con un ataque fluido y demoledor, con Llull muy inspirado. En los ¨²ltimos cuatro partidos, desde que volvi¨® de la lesi¨®n, promedia 18 puntos (3,5 triples y 56% de acierto). "Si seguimos acertados en el per¨ªmetro nos ir¨¢ bien -dice el menorqu¨ªn-, aunque tenemos que plantear un partido f¨ªsico desde el principio, porque en su casa, con el pabell¨®n lleno, el Fuenlabrada se va a crecer. A ver qu¨¦ pasa".
