¡°No hemos sabido medir las consecuencias de dar el m¨®vil a nuestros hijos¡±
La crimin¨®loga y abogada Beatriz Izquierdo nos cuenta la ventana abierta a los pederastas que son las redes sociales y el papel fundamental que tienen los padres de hablar con sus hijos y explicar esos peligros.
Beatriz Izquierdo es licenciada en Derecho y especialista en Ciencias Criminol¨®gicas, Penales y Penitenciarias. Acaba de publicar ¡°De los Reyes Magos al porno¡±, libro en el que habla sobre la nefasta influencia de un consumo desmedido de un porno inapropiado en ni?os y adolescentes, que parece ser la fuente de su educaci¨®n sexual y que podr¨ªa estar detr¨¢s, junto con otros factores, de un n¨²mero importante de agresiones sexuales. En el mismo tambi¨¦n hace un recorrido por los peligros a los que los menores se enfrentan en las redes sociales.
¡°Todas las generaciones han tenido much¨ªsimos peligros, en los ¡®80 la gente se pinchaba hero¨ªna en los portales. A nosotros nos ha tocado lidiar con esto¡±, dice la experta crimin¨®loga Beatriz Izquierdo, quien nos cuenta a Diario AS c¨®mo debemos evitar tener una generaci¨®n perdida en las redes sociales.
¡°Nuestros ni?os han tenido acceso a un tipo de contenido porque no hemos estado pendientes de eso; sus relaciones sexuales van a estar condicionadas por lo que han visto. La cifra de 2.143 denuncias por agresiones sexuales con penetraci¨®n en el ¨²ltimo a?o en nuestro pa¨ªs es una cifra negra, que decimos los crimin¨®logos. Habr¨¢ much¨ªsimos m¨¢s casos, que parece que no existen porque no se denuncian¡±, as¨ª de contundente nos cuenta un dato que es escalofriante.
¡°A lo que hay que a?adir que la Fiscal¨ªa General del Estado acaba de publicar su Memoria Anual en la que varios fiscales denuncian el aumento de agresiones sexuales entre menores, les espeluzna el nivel de sexualizaci¨®n de los mismos y el acceso a la pornograf¨ªa. Existe, especialmente, una pornograf¨ªamuy violenta con tintes s¨¢dicos y que erotiza la violencia. Es la cosificaci¨®n de la otra parte que puede llevar a cabo la otra persona¡±, nos cuenta Beatriz.
Una ventana abierta a los extra?os
¡°No aceptes caramelos de desconocidos. No te subas a las rodillas de hombres. No hagas auto-stop ni vayas con gente que no conoces¡±, frases que hemos escuchado durante a?os todos los ni?os de nuestros abuelos y padres, y que ahora cobran otro sentido, ?c¨®mo vamos a evitar que un extra?o, con malas intenciones, mire a un menor si ¨¦ste ha compartido un baile, una canci¨®n, sus vacaciones, sus fiestas de cumplea?os, sus festivales o sus disfraces, en redes sociales que son p¨²blicas y a las que todos pueden acceder?¡±
Hace un a?o, Beatriz cre¨® en Instagram ¡°El origen del mal¡± (@origendelmal), una cuenta para dar a conocer estos peligros y que es una realidad para muchos ni?os y ni?as. Y que sus padres descubren tarde. ¡°Hoy en d¨ªa los riesgos de cometer o ser v¨ªctima de un delito a trav¨¦s de las redes sociales son mucho m¨¢s comunes de lo que pensamos. Por ejemplo, grabar a un compa?ero , mientras es vejado constituye una materia que interesa a la criminolog¨ªa. Por eso, los crimin¨®logos hacemos falta en los colegios. Debemos explicar, a padres y alumnos, la responsabilidad penal del menor. Hay que educarles desde los 12 a?os. Hay que darles clases de Derecho Penal. Tienen tambi¨¦n responsabilidades. Van a ser responsables en cuanto cumplan 14 a?os. Si cometen un delito, intervendr¨¢ la Fiscal¨ªa de Menores y todos deben saberlo. Por eso cre¨¦ el proyecto¡±, explica muy preocupada.
¡°A los 12 a?os una ni?a consume ese contenido para saber lo que se espera de ella en sus relaciones futuras¡±
¡°No podemos defendernos de aquello que no conocemos. La realidad es que el m¨®vil se lo hemos dado nosotros y no hemos sabido medir las consecuencias. Ha llegado el momento de explicarles a nuestros hijos que les queremos, estamos preocupados, y debemos decirles que, en muchos casos, en Internet van a ver contenido muy violento y no una relaci¨®n sana y consentida. Los menores no ven a los adultos practicar relaciones sexuales, y pueden pensar que eso que ven en la red es luna relaci¨®n sexual normal¡±.
¡°A los 12 a?os una ni?a consume ese contenido para saber lo que se espera de ella en sus relaciones futuras , seg¨²n se?ala Save The Children en su informe Desinformaci¨®n sexual pornograf¨ªa y adolescencia. El porno que ten¨ªamos hace 50 a?os ha cambiado, era de dif¨ªcil acceso. Ahora cualquiera puede subir cualquier contenido expl¨ªcito y colgarlo en cualquier plataforma. Las plataformas de adultos recogen, entre su contenido, millones de escenas que simulan agresiones, escenas violencias, insultos a la otra parte, y eso lo ven los ni?os sin saber distinguir realidad de ficci¨®n. La industria del porno no hay que satanizarla, pero el contenido es para adultos¡±.
Un duro relato de investigaci¨®n que se refleja en De los Reyes Magos al porno, que destaca que la edad en la que los ni?os pasan de dejar de creer en los Reyes Magos a ver contenido de adultos, que no es adecuado para ellos. ¡°Es que pueden encontrarse ese contenido delictivo; no es que se encuentren contenido que simula agresiones, sino que, en muchos caso, lo pueden ser. Este fin de semana han grabado en Mallorca una agresi¨®n a una menor por parte de otros menores. Si no la graban, no lo pueden contar. Es una experiencia que no se quieren perder. Grabarlo es un est¨ªmulo m¨¢s¡±.
¡°Una de las cosas que sabemos de las ¡®manadas¡¯ es que culpan a la v¨ªctima de hab¨¦rselo pasado igual de bien. Creen que su conducta no est¨¢ penalizada. Hay que tener mucho cuidado con qu¨¦ fantas¨ªas alimentamos¡±, a?ade.
El primer caso en 2002: Alicia Kozakiewicz
¡°En el a?o 2002 saltaba en Estados Unidos una noticia de Alicia Kozakiewicz, cuando se crearon los primeros chats; empez¨® a hablar con un amigo de otro instituto sin pensar que hac¨ªa nada malo, durante 6/8 meses; tras ese tiempo, ¡®el amigo¡¯ (un hombre adulto de 38 a?os) le fue a visitar a la puerta de su casa, la secuestr¨®, la viol¨®, la tortur¨® y lo reprodujo en directo durante varios d¨ªas. El FBI la salv¨® gracias a otro ped¨®filo que estaba viendo el v¨ªdeo. S¨®lo ten¨ªa 13 a?os. Cuando tuvo fuerzas, empez¨® a acudir a los colegios, cre¨® The Alicia¡¯s Project para alertar de los peligros de internet en 2002¡å.
Hace 20 a?os ya se captaba a los menores. Alicia Kozakiewicz se convirti¨® en la primera v¨ªctima de secuestro de ni?os relacionada con Internet ampliamente denunciada. ¡°Corren buenos tiempos para los ped¨®filos. Y el peor tiempo para nuestros hijos. Es como si tuvieran una barra libre inagotable¡±, afirma sincera.
Para investigar, Beatriz tuvo que estar consumiendo durante tres a?os pornograf¨ªa a diario, ¡°es un acceso f¨¢cil, legal y gratuito¡±. ?Y cu¨¢l es la imagen que m¨¢s te ha impactado? ¡°Dentro de portales de pornograf¨ªa mi mente adulta sab¨ªa que ve¨ªa ficci¨®n. Pero, sin embargo, las im¨¢genes sexualizadas de los menores que he visto en TikTok me ha impactado mucho m¨¢s. Por un lado, ves menores con una inocencia absoluta, pero movi¨¦ndose de manera que es un contenido perfecto para los ped¨®filos. Lo que m¨¢s desasosiego me provoc¨® es que yo sab¨ªa que no era ficci¨®n, sino la vida real en redes sociales de muchos menores. No hay contrato, ni ficci¨®n, son nuestros menores porque todo vale. Hace unos d¨ªas un ni?o de 10 a?os falleci¨® en UK por un reto de TikTok. Y otra cosa que me preocup¨® a¨²n m¨¢s es que, cuando algunos de los menores grababan esas im¨¢genes, lo hac¨ªan de manera deliberada, buscando unos likes¡±.
¡°Parece que no queremos verlo. No son datos propios, las noticias, muy a menudo,nos cuentan algo de una red de pornograf¨ªa infantil o de ped¨®filos captando menores en las redes o a trav¨¦s de videojuegos (a alg¨²n menor se le ha captado, por ejemplo, jugando a Fornite. ?C¨®mo? Porque les regalan recompensas. El cebo es `m¨¢ndame una foto y yo te compro lo que quieras para tu aplicaci¨®n?¡±, detalla.
¡°El poder de la imagen en mentes fr¨¢giles es brutal. Si con 9 a?os llevas a un ni?o al Bernab¨¦u, la experiencia no se le va a olvidar en la vida; y, a esa edad, una imagen muy violenta no se le va olvidar tampoco nunca¡±, insiste.
A ra¨ªz de la cuenta de Instagram, ?la gente te contacta? ¡°Sobre todo padres y madres preocupados, y adultos reconociendo que se han le¨ªdo mi libro, y que han reconocido que sus conductas no eran apropiadas. Hay quien reconoce que ha consumido tanto porno que ya no se excita con su pareja¡±, explica.
98 menores enga?ados por un mismo pederasta en Espa?a
¡°El despertar sexual de los ni?os va a suceder tarde o temprano, de modo que hay que estar preparados para contestar la su preguntas porque, si no, las van a encontrar en Internet. Les hemos dado un m¨®vil a nuestros hijos y es como contratar a una persona para que los cuide sin antes comprobar si tiene antecedentes penales. Todas las aplicaciones de control parental tienen su utilidad, pero nunca pueden sustituir una paternidad responsable. A los ni?os hay que cuidarles, y dejarles ser ni?os. Depender¨¢ lo que seamos nosotros como sociedad, hay que protegerlos como el bien m¨¢s preciado que tenemos¡±, cuenta la experta.
¡°Hay que hablar con ellos. No podemos hacer ni?os de cristal. A las ni?as de Alc¨¤sser ni siquiera les sirvi¨® ir en grupo. A quienes ahora somos padres de adolescentes nos dijeron ¡°no te subas al coche de un extra?o¡±, y ahora tenemos, en esa l¨ªnea, que contarles, a nuestros hijos, los peligros a los que se enfrentan. Porque piensan que son muy mayores y que no les van a enga?ar. Por ejemplo, a 98 menores les consigui¨® enga?ar, por Instagram y por WhatsApp, un solo pederasta en nuestro pa¨ªs¡±.
D¨®nde est¨¢n los ped¨®filos
¡°Los ped¨®filos y pederastas est¨¢n donde est¨¢n los ni?os. Da igual la aplicaci¨®n. Las redes sociales son las ventanas al mundo de nuestros menores, y hay muchos mirando. Los menores son capaces de asumir los riesgos de exponerse en ellas para tener m¨¢s seguidores. No queremos ni que nuestros hijos sean v¨ªctimas, ni verdugos¡±.
Adem¨¢s, ahora hay que tener en cuenta la incidencia de la nueva ley. ¡°La legislaci¨®ny ha cambiado. Antes, las preocupaciones de nuestros padres no eran que cometi¨¦ramos un delito, sino evitar que fu¨¦ramos las v¨ªctimas. Ahora, sin embargo, hay que contemplar los dos supuestos. La nueva ley, que ha entrado en vigor el 7 octubre de 2022, sobre Garant¨ªa Integral de la Libertad Sexual, hace m¨¢s necesario que nunca formar en materia de educaci¨®n sexual. El foco est¨¢ puesto en el consentimiento, algo que, a nivel jur¨ªdico, ya es muy complejo. Los menores deber¨¢n entender que alguien puede querer al principio mantener una relaci¨®n sexual, pero querer parar a la mitad, o puede querer una relaci¨®n, pero no aceptando cualquier pr¨¢ctica. Por ejemplo, puede querer hacerlo con protecci¨®n, pero no sin ella. Hay que explicarles a los menores tambi¨¦n que reenviar im¨¢genes sexuales de otra persona sin su consentimientoes delito. Lo que hace un menor instintivamente es mandar a su mejor amigo las im¨¢genes en cuanto las recibe, es algo prohibido por la ley. Por eso, hay que explicarles la ley y no hacerlo es como mandarles a la guerra desarmados. Hay que estar dentro. Los padres tenemos que tener redes sociales porque nuestros hijos pasan mucho tiempo en ellas. No nos pueden ver desconectados de su mundo. Habr¨¢ que intentar hablar mucho con ellos¡±.
¡°Ahora, que estamos preocupados por la nutrici¨®n, no damos a nuestros hijos determinados alimentos. E, igualmente, cuando vamos a la playa llevamos protecci¨®n solar para evitar que se quemen y prevenimos el melanoma. Esto es similar: hay que hablar y ayudarles. No podemos protegerlos de aquello que no conocemos. Hace falta una criminolog¨ªa educativa. Todo pasa por la educaci¨®n. Que nuestros menores accedan a un contenido sexual muy violento nada bueno puede aportar a una sociedad¡±. Y debemos empezar a actuar desde todas las instancias, como ha sucedido con las recientes multas a varias web por permitir el acceso a menores¡±.