La historia milenaria de Dargavs, la necr¨®polis abandonada en Rusia

La historia est¨¢ plagada de ejemplos de pueblos que, despu¨¦s de un evento de diversas caracter¨ªsticas, finalmente son abandonados. Un buen ejemplo de ello lo encontramos en Espa?a, en el municipio antiguo de Belchite, uno de los escenarios m¨¢s caracter¨ªsticos de la Guerra Civil. Rusia cuenta tambi¨¦n con un ejemplo algo diferente en el pueblo de Dargavs, situado entre las cadenas monta?osas del C¨¢ucaso.

Este pueblo fantasma, conocido tambi¨¦n como la ¡®Ciudad de los Muertos¡¯, es una vieja necr¨®polis en la que se acumulan las tumbas y criptas. El motivo por el que las personas dieron sepultura a sus seres queridos en este enclave es algo que el tiempo ha ido borrando. Tal y como explican desde National Geographic, durante siglos las poblaciones cercanas tem¨ªan acercarse ante la posibilidad de no regresar a casa.

Finalmente fue deshabitada por una gran plaga que acab¨® con mayor¨ªa de la poblaci¨®n. Y los que sobrevivieron se vieron obligados a escapar para no perder la vida igual que sus vecinos. Este antiguo pueblo se encuentra en el extremo m¨¢s occidental de Rusia, y fue fundado por los osetios, una etnia de ascendencia iran¨ª. A las afueras de Dargavs se estableci¨® una gran necr¨®polis compuesta por 99 estructuras funerarias.

Restos mortales

All¨ª se encuentran, entre tumbas y criptas, los esqueletos de cientos de personas que quedaron atrapadas durante siglos. Los restos m¨¢s antiguos data de la Baja Edad Media, sobre el siglo XII de nuestra ¨¦poca. En la parte posterior del cementerio se edific¨® una torre que, seg¨²n los arque¨®logos, pudo ser un espacio de adoraci¨®n o un lugar para la vigilancia.

Una arquitectura, la de esta necr¨®polis, que ha fascinado a los arque¨®logos durante el paso de los a?os. En cuanto a las criptas, las m¨¢s grandes cuentan con techos curvos y acanalados, y se elevan de forma escalonada hasta un pico en el centro. Mientras, las m¨¢s peque?as no tienen cobertura, por lo que algunos de los huesos quedaron expuestos.

Gracias a diversas excavaciones se descubri¨® que las familias desped¨ªan a sus seres queridos en botes de madera. Una tradici¨®n en la que, para alcanzar la otra vida, deb¨ªan atravesar un r¨ªo ancho. As¨ª, a modo de ritual, los dolientes se encargaban de que los restos de sus familiares quedaran en balsas funerarias.

A su vez, algunas de sus pertenencias tambi¨¦n eran enterradas en estas estructuras de madera. Quiz¨¢, si consegu¨ªan cruzar el r¨ªo en destino hacia la otra vida, les podr¨ªan hacer falta. En las proximidades de esta necr¨®polis se pueden encontrar monedas, algo que tiene una explicaci¨®n: los familiares las lanzaban y, si golpeaba en una piedra, significaba que el alma hab¨ªa conseguido llegar al cielo. En caso contrario, segu¨ªa navegando en las aguas del m¨¢s all¨¢.